Un pequeño paso previo al camino principal.

120 18 15
                                    

Parte uno: El corazón de una madre

― ¡AHORA REVISEN EL TERCER PASILLO, DE INMEDIATO! ― Reisen estaba avanzando por los pasillos de Eientei mientras que a su lado estaban un grupo de varias conejas, en pleno camino cerca de una de las esquinas que conectaban con otro pasillo apareció caminando lenta y elegantemente una mujer realmente hermosa ― ¡PAREN, DE INMEDIATO!

Reisen ordenó mientras que las conejas pararon en seco y la propia Reisen se inclinó levemente saludando a la mujer con respeto

― Oye Udongein, ¿no has visto a Sheng? ―  Preguntó la mujer ladeando elegantemente su cabeza y preguntando sinceramente a la chica coneja, esta se puso algo tensa y no sabía que contestar ― Esta...esta...

― Esta afuera jugando con Tewi ―  Habló Eirin apareciendo detrás de Kaguya  y haciendo que esta volteara a verla ― Ya es un poco tarde princesa el agua para su baño se va a enfriar.

― Bueno, asegúrate que Sheng coma bien, no lo he visto en horas así que supongo que Tewi lo tiene bastante entretenido ―  Kaguya se volteo comenzando a caminar y una coneja estaba en su camino, Kaguya la ignoró pasando en línea recta y forzando a la chica a alejarse de su camino ― Esa chica... jamás cambiará.

― Señorita Eirin, esto es malo, no importa que tanto nos esforzamos no podemos encontrar a Sheng, no esta por ningún lado de la mansión, Tewi tampoco ha reportado nada en las afueras, simplemente desapareció por completo, igual Yamata ―  Reisen se notaba preocupada y tensa, en cambio Eirin tragó saliva ―  Esto es lo malo... sabía que esto ocurría tarde o temprano...

―  ¿Lo sabía? ―  Preguntó Reisen mientras que el resto de conejas comenzaban a revisar y avanzar por orden de Eirin ―   Así es, verás Reisen, Mokou y Kaguya lo criaron con suma cautela, casi enjaulándolo en Eientei desde la pelea con esa criatura, preferí permanecer callada para evitar el riesgo de un problema, Keine también, pero ambas sabíamos que si esto de mantenerlo aquí, sin oportunidad de salir continuaba, llegaría un punto en donde se alejaría más... y más... y al no recordar el camino tras tantos años sin pasar por ahí, terminaría perdido.

― Señorita... ¿por qué no lo dijo entonces? ―  Preguntó Reisen y Eirin suspiró ―  Lo acabo de decir Udongein,  preferí callar para evitar el riesgo de un problema, si hablaba antes, Kaguya y Mokou habrían comenzado a discutir y bueno, no es sano para un niño ver a sus figuras parentales discutir, más aún sobre algo relacionado con él.

― ¿Alguna pista que podamos seguir señorita? ―  Reisen continuó con su asalto y Eirin suspiró algo cansada ―  Si Yamata no esta presente, solo una teoría se me ocurre y es que ella haya avanzado con su amo hacia algún lugar que deseara volver a ver.

― Y dado que se ubicará principalmente por el olor, solo hay dos lugares con un olor conocido para el ― Eirin se plantó firme ― La aldea humana... y el templo Hakurei.

Reisen completó asintiendo

― ¿Permiso para ir en una misión de rescate? ―   Udongein solicitó con una voz algo militar y Eirin asintió ― Dirígete hacia el templo Hakurei, yo iré a la aldea humana, Keine puede recibirme ahí dado que no soy un Yokai

―  ¡Entendido! ―  Reisen hizo un saludo militar y comenzó a dirigirse hacia la salida de la mansión y Eirin comenzó caminar hacia ahí también ―  ... Houraisan Fujiwara no Shao Sheng... en verdad eres idéntico a tu madre a tu edad...

Eirin río levemente con un tono algo nostálgico y durante su caminata, su intención era clara, debía encontrar al joven muchacho, mientras esto ocurría en el interior de el baño del lugar una hermosa mujer estaba sentada.

Una historia en Gensokyo: "Más allá de lo que puedes ver..."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora