Una historia en Gensokyo: "Más allá de lo que puedes ver..."

Los primeros tres años de Hilbert

Parte uno: El primer año del renacido 

― ... ―  Keine permanecía en silencio junto a Eirin, mientras que el renacido que ahora había sido nombrado "Sheng" estaba leyendo con toda la tranquilidad del mundo un grimorio, se veía bastante adorable porque el libro era más grande que Sheng, hasta que finalmente Keine habló. ― ¿Es normal que un niño pueda hacer eso?

― Su cuerpo no debería  ni siquiera ser capaz de abrir el libro ―  Contestó Eirin que seguía pasmada ―  Ni hablar de su mente, un bebé de menos de un año no debería ser capaz de siquiera leer...

― ¿No será que le llaman la atención los dibujos? ―  Mencionó Keine señalando una de las páginas del grimorio la cual estaba llena de dibujos sobre como hacer pociones mágicas. ―  Eso tendría más sentido.

― ¡SHENG! ―  Resonó el gritó de Kaguya en toda la mansión de Eintei, la mencionada llegó corriendo rápidamente y levantó al renacido. ―  Eres un niño muy travieso, ¿sabes?

Kaguya se retiró tranquilamente llevándose al renacido hacia el comedor, pues ya era hora de alimentarlo.

Por su parte las dos mujeres maduras simplemente se miraron entre ellas otra vez antes de simplemente guardar el grimorio y retirarse a seguir con sus labores.

Probablemente la situación parezca fuera de contexto, sin embargo, en realidad es bastante fácil de explicar.

Dado que las habilidades de Sheng son demasiado peligrosas y podrían causar que fuera marginado o temido por los humanos, pero a la vez su actitud tan pacífica causaría que los Yokai no lo consideraran uno de ellos.

Dentro de varios años los Yokai serán seres más gentiles y ya no serán seres que pelean a muerte por cualquier cosa, sin embargo, en estos momentos los Yokais son seres agresivos y mortiferós desde que el momento en que nacen.

Sheng tiene habilidades aterradoras, que aunque generarían respeto entre los Yokai causan miedo entre los humanos, y a la vez su conducta no agresiva causaría que los Yokai no lo consideren uno de ellos.

En palabras simples Sheng esta en el punto medio entre humano y Yokai, por eso no será aceptado fácilmente por cualquiera de las dos especies, la misma situación que su tía adoptiva Keine pasó hace tiempo, sin embargo, eso es "historia" para otro día

Debido a que tanto Kaguya como Mokou están cuidando de él por un motivo simple, ambas desean hacer algo más allá de simplemente asesinarse la una a la otra sin parar, en palabras de la propia Mokou "Dejó de ser divertido hace cien años", por eso ambas están criando al pequeño Sheng, para así hacer algo productivo con sus vidas y además de poco en poco ir abandonando ese odio irracional que se tienen la una a la otra. 

Esta segunda semana desde que Sheng fue adoptado ha sido bastante difícil.

El renacido tiene serios problemas para adaptarse a su cuerpo infantil, esos problemas son más por sus costumbres que por nada más, desde que tuvo el encuentro fatídico con Mima años atrás él siempre tuvo la costumbre de encerrarse a jugar videojuegos, o al menos eso era la fachada que le ponía a lo que en realidad hacía.

Él se encerraba y comenzaba investigar, su deseo era encontrar qué o quien era exactamente Mima y cómo matarla, obviamente no había una página web que le diera datos exactos sobre esto, sin embargo, su investigación era por comparación, investigaba sobre las criaturas mágicas y los seres mitológicos de todas las mitologías conocidas, las formas de defenderse contra ellos y demás, cuando terminaba su hora de investigación se dedicaba cincuenta minutos a hacer ejercicio con el motivo de fortalecerse, y finalmente se dedicaba los últimos diez a jugar videojuegos, para mantener su fachada.