𝐃𝐫𝐨𝐰𝐧𝐢𝐧𝐠 || 𝐌𝐢𝐭𝐬𝐮𝐲𝐚 𝐓𝐚𝐤𝐚𝐬𝐡𝐢 ✓

𝒄𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐 17

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"—¡Akane! Joder ¡Llamen a una ambulancia!.

—Por favor quédate con nosotros, Akane.

—¡La perdemos!.

—Inicien reanimación. ¡Denme doscientos!".

Desperté.

Parece que sólo han pasado minutos desde que estuve en esa silla. Parece que sólo han pasado segundos desde que nos fueron a tirar al patio de mi casa. Lo último que recuerdo de todo esto, es a Hanma, riendo como desquiciado mientras salía huyendo en su moto.

Sentía mi cuerpo pesado, como si un camión me hubiese pasado encima, tengo lagunas mentales de lo que sucedió después de haberme desmayado, pero todo lo demás, es completamente borroso.

Alce mi mano, estaba completamente vendada desde los dedos hasta el codo, quise cerrarla, pero las manos me dolían horrores. Sabía que se me habían acalambrado al no tener una buena circulación y por tanta agua helada que me tiraron.

Gire mi cabeza hacia un lado, había una silla a un costado de la cama, como si alguien hubiese estado ahí con anterioridad, mire hacia el otro lado esperando encontrar a alguien pero, solo estaba yo.

Apoye mis manos en el acolchado y trate de ayudarme a sentarme, pero el dolor que sentía en mis manos era insoportable. Mordi mi labio para evitar gritar, no quería alertar a nadie.

Termine cayendo de nuevo en el acolchado al obtener resultados nulos. Lo intenté dos veces más pero siempre terminaba cayendo.

Al final me rendí.

Si tenía que estar acostada, tendría que quedarme acostada, en estos momentos me sentía completamente inútil porque ni siquiera yo misma me podía sentar, algo tan fácil y sencillo de hacer.

¿Cómo estará Takemichi?.

Mi pecho se contraía de tan solo recordar. Él no tenía porque estar ahí, él no tenía que haber salido herido, joder, ¿por qué alguien siempre tiene que salir herido por mi culpa?. Mitsuya tenía razón, por mi maldito descuido alguien salió herido.

La puerta se abrió, ladee mi cabeza viendo entrar a la enfermera, no debía de tener más de veinte años, al verme despierta sonrió de oreja a oreja.

—Has despertado. Iré a avisarle al doctor.

—Espera.— hablar dolía, sentía como si mi garganta estuviera llena de espinas.— ¿Puedes ayudarme a sentarme?.