14.

14 3 0
                                    

Liz se levantó en la mañana de las primeras, no había dormido casi nada porque despertaba a cada rato, fue a la cocina y se acercó a la cajita de café instantáneo de chocolate, más que nada para despertar. Mientras servía el agua caliente escuchó un grito, más bien chillido, de su compañera de casa por lo que casi se quema.

—¿Qué pasó? —dijo en un tono alto Liz ya que se había asustado y pensó que le había pasado algo así que rápidamente se acercó al umbral de la puerta de la habitación—

—Soñé con Dazai —dijo Shun cubriéndose el rostro y luego levantándose.— Por cierto, ¿Por qué estamos en casa?, deberíamos estar vigilando al niño con el par de raritos.

—¿Shun...?—le preguntó Liz aguantando la risa—Eso fue ayer.

Shun respondió "qué" y luego se miró su ropa rota, ya que se había dormido con la ropa que había usado el día anterior que no recordaba, hasta que de pronto todo lo sucedido la noche anterior volvió a su mente y con eso vino el exacto momento en el que se besó con Dazai accidentalmente.

—Oye, ¿acaso bebiste anoche que no te acuerdas?—le preguntó Liz sonriendo, quería reírse por la cara de confusión de su amiga.

—¡Dame un momento!—dijo Shun corriendo hacia el baño mientras Liz la miraba cada vez más confundida.

Unos minutos después y mientras la pelirroja se tomaba felizmente su café con chocolate apareció Shun caminando como si hubiera recordado todo.

—¿Recuerdas ese anime donde el protagonista besaba al que le gustaba y por la emoción del concierto no recordaba nada al día siguiente y cuando se acordó entró en pánico?—todo eso lo dijo extremadamente rápido

—Me acuerdo, sí, ¿Qué pasa con eso?—preguntó Liz, aunque se estaba haciendo una idea de lo que sucedió no estaba muy segura.

—Ayer Dazai y yo nos besamos—dijo Shun mientras se tapaba el rostro

—Es mayor que tú, dile Dazai-san...siempre te digo lo mismo cuando hablas de Nakahara-san o él....—dijo regañándola por su falta de modales característicos— ¡ESPERA! ¿¡QUÉ AYER TÚ Y DAZAI-SAN QUÉ!?

Shun se encontraba aún en un estado de pánico tremendo y tenía hasta sus orejas rojas.

—PRIMERO, ¿tú a él o él a ti?—dijo Liz tratando de procesar todo—No me digas que....¡tienes la ropa rota porque ustedes---!—hizo una pausa para cubrirse la boca con sorpresa.—¡vas demasiado rápido! imagina quedas embarazada ahora...

—respecto a lo primero, fue un accidente así que técnicamente fuimos los dos—dijo Shun levantando su mano mientras iba enumerando—segundo, no, no tuvimos relaciones porque estábamos en un bosque y no lo conozco de nada así que no estoy embarazada.

—owww, yo quería un sobrino—dijo Liz en tono de broma—¿y como eso del accidente?, no entiendo.

Comenzó su relato con un "lo que pasó es que" y luego de unos minutos en los que estaba inconscientemente sonriendo terminó de hablar.

—Dazai-san es un atrevido, mira que llevarte al bosque y besarte indirectamente—dijo Liz quien ya había terminado su café.—Oye pero, Shun... sé que lo has buscado toda tu vida prácticamente pero, ¿a ti te gusta realmente o simplemente alguien a quien te aferras para no perder esa parte de ti misma que escondes?

Aquella pregunta desconcertó totalmente a la castaña y tuvo que quedarse pensando unos momentos hasta que comenzó a carcajearse fuertemente, era la sonrisa más radiante que Liz alguna vez había visto y estaba casi segura de que la mayor aceptaría sus sentimientos, aquello la hacía feliz y se encontraba sonriendo con dulzura.

Libertad / BSD / En renovación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora