The Presentation [La presentación] ¬BrightWin

33 | DESAMOR

33 | DESAMOR

Milli estaba orgullosa de sí misma.

Después de que Bright se desmayase en sus brazos tuvieron que llevarlo a la enfermería. Era un pensamiento bastante lógico, pero hacerlo realidad fue difícil porque si ya les había costado arrastrar a un Bright consciente hasta un escondite tras el edificio, un Bright inconsciente al tercer piso terminó siendo toda una odisea. Al final lo lograron, en bastante menos tiempo del que habían previsto y cuando pudieron recostar al chico en una camilla este ya estaba despierto, observando a la nada con la mirada perdida. Milli no sabía que era más preocupante y tanto ella como Fern estaban de acuerdo en que tenían que inventarse algo rápido.

La cosa es que Bright tenía el corazón roto, eso siempre pasaba en las películas e incluso le había sucedido a ella misma un par de veces. La doctora alfa que atendía a Milli cada cuatro meses ya le había hablado varias veces de las diferencias entre las reacciones a traiciones sentimentales por parte del humano y el lobo ante una pareja con unión biológica y una pareja con mordida de enlazamiento. El alfa de Bright estaría bien después de unos días, incluso podía ausentarse; la verdad a Milli le preocupaba más la parte humana. Su mejor amigo necesitaba un tiempo a solas y vivir en la misma casa con la persona que lo hizo sufrir no le garantizaba ese tiempo de calidad y catarsis consigo mismo.

Milli era una persona noble y le iba a regalar a su amigo lo que necesitaba. Pero, ¿cómo?

—No se acerquen a la última camilla por nada del mundo, tenemos a Sarunchara con una posible neurafálea, sea lo que sea que tenga él no sería nada bueno que se contagiara. Tampoco ustedes —la respuesta les llegó con la advertencia del enfermero que se asomó en su cubículo apenas notó que ya habían ubicado a Bright—. Déjenme hacerle una revisión para ver si lo que tiene es grave o si puede esperar a que lleguen los padres de N'Aye y hable con ellos.

Apenas mencionaron la enfermedad cuando Milli ya tenía una historia en la cabeza. La neurafálea era una enfermedad viral muy parecida a la varicela por la forma en la que se contagiaba y cómo atacaba al cuerpo, aunque los síntomas eran muy diferentes por la naturaleza de la primera por atacar el cerebro; gracias a la vacuna era casi imposible morir con esta enfermedad, únicamente se pasaba por un predicamento de síntomas irritantes que incluían dolores de cabeza fuertes, sensación de desvanecimiento, fiebre, desmayos, dormir mucho, pérdida de la noción del tiempo y otras cosas mucho menos graves. Solía presentarse en la infancia, a Milli, por ejemplo, le dio a los seis años y sabía que Bright la sufrió a los tres. Era un poco más delicado cuando te daba después de haberte presentado porque la parte que más sufría los síntomas y los magnificaba era el segundo género, en el caso de Aye Sarunchara, omega y en la futura mentira de Milli, el alfa de Bright.

Fue una treta estructurada de forma magnifica en menos de diez segundos, incluso Fern tuvo que estar de acuerdo con eso.

—No es necesario que haga ninguna revisión ni que nos haga esa advertencia —dijo con voz seria y solemne—. Bright se desmayó cuando nos dirigíamos a clase después del almuerzo, ¿verdad Ai'Fern?