UNA METIDA DE PATA
|Sara Stone|No solía ser una mujer muy desesperada como para lograr desesperarme conmigo misma por lo torpe que podía llegar a ser en ocasiones, pero en otras y muy diversas, lo agradecía profundamente. Bueno, ahora estaba más que agradecida.
Intenté escapar antes de que él empezara a interrogarme, pero apenas y había dado media vuelta, conseguí chocar con uno de los meseros que provoco cayéramos directo al suelo.
—Lo siento, señorita. ¿Se encuentra usted bien? — preguntó el joven, sumamente preocupado.
— Yo...— miré a mi alrededor en su busca.
—¡Sara! — gritó mi nombre por segunda vez, pero decidió guardar silencio en cuanto me vio tendida sobre el suelo.
— Perdón, señor — comenzó a parlotear el mesero con un nerviosismo excesivo — Ella se me atravesó y yo no fui capaz de esquivarla.
— No necesito explicación alguna — respondió esté con un ligero toque de enfado y resignación.
Me miró desde arriba con cierto desdén por unos segundos para después inclinarse y tenerme de frente.
— Levántese ahora — dijo sin ninguna compasión — Necesito saber que carajo paso hace un ....
— ¡Ay! ¡Ay, mi cabeza! —comencé a quejarme, sobándome — ¡Cómo duele! ¡Pero que dolor! ¡Ayyyyy!
Debía aprovechar el incidente para evadir sus preguntas.
— ¿Esta usted bien? — se acercó un poco más.
— No, estoy mareada — continué con mi mentira. Lo sentía por el mesero que tenía el rostro descompuesto — Creo me golpeé la cabeza.
—Esto no me puede estar pasando — murmuró por lo bajo dejando escapar un entrecortado suspiro — Levántese, te llevaré al hospital.
— No creo sea necesario, señor — respondí de inmediato — Solo, yo solo necesito dormir un poco.
Resopló descaradamente, demostrándome así, que yo para él solo era un total fastidio. Me ayudó a ponerme de pie y dejándome apoyada en su brazo nos montamos en el auto.
Por fin iba en la parte trasera junto al señor Leonardo y Esteban iba de copiloto, pero no dejaba de mirarme con una gran sonrisa en el rostro.
—Eres muy graciosa, ¿sabías? — dijo y definitivamente estaba pasado de copas.
—Yo diría todo lo contrario — respondió mi jefe en un tono agrio.
— Solo veía esas situaciones en las películas y vaya que parecía una escena de película... — continuó sin poder evitar arrastrar las palabras— Por cierto. ¿Cómo dices que te llamas, chica nueva?
—Señorita Stone — dije de sopetón — ¡No! Sara, quise decir. Mi nombre es Sara.
O ya estaba traumada, o si me había golpeado la cabeza.
— ¡Sara! — entonó mi nombre — Anotado, nunca lo olvidaré.
— Deja de hablar tan alto — lo reprendió al mismo tiempo que se sobaba la sien.
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LA CHICA DESASTRE ©°
Romance[COMEDIA ROMÁNTICA] - [ENEMY LOVERS] Sara Stone es contratada cómo chaperona por parte de una empresa muy famosa. Ella tiempo atrás soñó con trabajar en aquel lugar, pero por desgracia era rechazada constantemente. Un día para ella todo eso cambió y...