sobrenatural

- confrontación -

Después de un fin de semana mágico y súper especial entre la recién formada pareja. Tenían que afrontar la triste y jodida realidad de salir de su humilde hogar para ir a la escuela a tener un aburrido día de clases con los odiosos de sus hermanos y los emplumados angelicales, lo bueno de todo eso, es que es oficialmente pareja de Ryoken y ya está a salvó del contrato que su viejo hizo hace años.

Iniciando el día de lunes con el clásico berrinche de no despertar por parte del incubo. Abrazandolo y besando su cuello para evitar que escapara pero no, Ryoken fue lo más firme que podía contra su encantadora personalidad. El adolescente psíquico de fue a bañar mientras su compañero comienza con los preparativos del desayuno.

- sabes que puedo pedir algo de comer mientras yo te como a ti - comento muy relajado, mientras ponía el agua a hervir en la tetera.
- Prefiero no gastar en ello - el peliblanco salió del baño con una toalla en su cintura y el cabello mojado hasta el cuello. El incubo sonrió deseoso, depredador con la hermosa vista, he hizo ademán de acercarse.

- oh no, no Yusaku. Ayer lo hicimos muchas veces. Dame un respiro.  Además tenemos que ir a clases. - se fue alejando cuando se percató de su desliz.
- no puedes hervir el agua y no meterte a bañar Ryoken -

Rápidamente el albino se metió a la habitación pero antes de que Yusaku entrara, se cerró de golpe e impidiendo su paso. Cuando estaba por abrirla, no pudo, de hecho, sintió una descarga menor en sus manos. Sacudió sus manos con algo de dolor, si bien es Más fuerte que antes, nunca podría contra su poderoso protector.

- ¡Oye!! Sin campos de fuerza -
- ¡No hice nada!-
- tu no solecito, le digo a  tu guardian -

Mientras escucha a su novio refunfuñar, Ryoken agradeció en silencio a su protector por su ayuda. No le molesta ser tan deseado por su novio pero había momentos cuando no se podía. Debía trabajar en ello junto a su pareja.

- termina el desayuno, ya salgo - exclamó comenzando a vestirse rápidamente. Su cuerpo ahora temporalmente tatuado por los besos le causa cierta timidez, afortunadamente Yusaku tuvo consideración en no hacerlos en su cuello. Lo que menos quería era pasa vergüenza en la escuela.

- la escuela... - mientras se subia el pantalón fue que recordo que Yusaku tiene su reputación de Fuckboy para alimentarse. Le desagrada la idea de que su novio se encontrará con otros u otras aun si sabe que lo hace para sobrevivir. Así como un humano requiere oxígeno.

- bueno... Supongo que es parte de la relación. Pero tengo que hablar con el... - el olor a quemado lo hizo reaccionar y rápidamente salió de la habitación.

- ¡¿Que sucede?! ¿Estás bien? - vio a su novio cocinando un omelette pero la espátula de madera se había quemado porque lo dejo cerca del fuego al estar terminado de cocina el arroz.
- solo un accidente. La espátula de madera se quemó - toma el objeto y señalo la zona dañada. Ryoken suspiro de alivio sonriendo.

- me alegro. Aún no he comprado el extintor contra incendios -
- Sigo sin entender porque tener esa cosa. Arruina la estética de la casa - continúa preparado la bentos ahora con la ayuda de Ryoken. El termina la comida mientras su compañero hace los postres: un par de sandwiches rellenos de crema dulce y fruta.

- es por seguridad. Después de la última vez que... - calla de golpe, ruborizandose un poco. Esto hizo sonreír travieso al incubo.
- ¿después de que solecito? -
- que lo hicimos en la sala mientras había un pastel en el horno - fue terriblemente bochornoso ver a los vecinos con su buena voluntad llegar asustados por las alarmas de humo a causa de un pastel quemado. Y si no fuera por las habilidades de habla de su pareja, hubiera Sido más vergonzoso decir que por estar de calientes descuidaron el pastel.