Capítulo 6

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Desperté sintiendo que había dormido más de lo que en otras circunstancias hubiera hecho. La luz de la ventana me dio de lleno en la cara, era un día de sol. Espero que puedan dejarme salir de este lugar, ya me siento mucho mejor.
Mientras pensaba en estas cosas, escuché que la puerta se abría y del otro lado aparecía Hange con una sonrisa.

-Buenos días Olivia, venía a ver como te sentías - dijo acercándose a mi cama.

-Buen día Hange, ya me siento mucho mejor. Quiero salir de acá.

Ella rió y examinó mi abdomen y luego mi pierna lentamente hasta llegar al tobillo. La vi hacer una pequeña mueca.

-Vas poder salir ahora si querés, pero olvidate de volver al escuadrón por un tiempito, ese tobillo necesita sanar.

-Hange... necesito hablar sobre lo que pasó. Hay un detalle de todo lo sucedido que no puedo sacármelo de la cabeza. El último titán... el último titán me salvó. Atacó al que estaba a punto de comerme, y después me cargó en su mano para sacarme de ahí ¿Qué está pasando? ¿Hange los titanes pueden ser.... personas?

Mientras iba lanzando mi monólogo pude ver como las facciones de Hange iban pasando de una sonrisa intrigada a seriedad y luego a preocupación. Ella sabía algo y se dio cuenta que lo había descubierto. La vi dudar, y luego se acercó a la puerta para asegurarse que estuviera cerrada. Volvió a mi con sigilo.

-Bien, esto no es información que deba compartir con vos, pero considerando que casi lo descifraste y que fuiste protagonista directa del suceso, te lo voy a decir. Olivia... esto es ultra confidencial, te suplico que no lo compartas con nadie. Lo cierto es que nunca supimos a ciencia cierta de donde venían los titanes, como llegaron a dominar nuestro mundo, por qué nos atacan. Teníamos muchas conjeturas pero ninguna podía ser probada. Intentamos investigarlos como pudimos, pero siempre fue una tarea sumamente difícil. Hasta que... apareció alguien con información. Esta persona nos contó varias cosas, entre ellas.... la posibilidad de que algunos titanes puedan ser controlados por los humanos.

-¿Qué?

-Si. No sabemos si todos son así, pero si sabemos que es posible. Esto podría ser algo muy valioso para la humanidad si descubrimos como usarlo a nuestro favor. Pero es todo lo que puedo compartir con vos hasta ahora. No lo hacemos público aún porque no queremos desatar un estado de histeria generalizada, hay muchas preguntas sin respuesta y estamos esperando poder reunir un poco más de información.

Hange se puso de pie junto a mi cama, y me observó fijamente. Luego sonrió.

-Fuiste valiente, te felicito. Ahora andá al comedor, debés tener ganas de comer algo- dijo mientras se dirigía a la puerta. Cuando puso la mano en el picaporte, no pude aguantar las ganas de preguntarle

-Hange ¿Eren Jaeger... es un titán?

Vi como se quedó paralizada con la mano sujetando fuertemente la manija de la puerta. No contestó a mi pregunta directamente, volteó su cabeza para mirarme de soslayo y solo se sonrió. Luego salió por la puerta.
Entonces era cierto... aquel titán del bosque era Eren. Y Hange quiso que lo sepa. Se me nubló la mente de preguntas, al final aquello me dejó más confundida que antes ¿Cómo es posible? ¿Por qué Eren pueden convertirse en titán? ¿Por qué se unió a la legión para matar titanes si él es uno? ¿Es por eso que se reunía en secreto con el Comandante y el Capitán? ¿Hay un plan detrás de todo esto? ¿Mikasa y Armin lo saben?
De repente me sentí perturbada. Hange tenía razón, si esto se hacía público, solo generaría demasiadas preguntas que no tendrían respuesta, al menos para nosotros. Ahora era portadora de un pesado secreto que solo pocos sabían...

Decidí ir al comedor. Necesitaba distraerme para no seguir pensando en cosas que no podría descubrir de momento. El doctor Connor me hizo un último chequeo, y me dijo que volviera todos los días para ver mi evolución. Me entregó una muleta para que me apoye del lado de mi pierna mala y unos medicamentos por si sentía dolor. Abrí la puerta de la enfermería y comencé a caminar hacia el comedor. Algunos de mis compañeros deambulaban por el lugar y se acercaron a preguntarme como estaba. Cuando llegué a las puertas dobles de madera, me costó un poco de trabajo abrirlas y entrar, pero allí estaban la mayoría, terminando de desayunar y conversando entre si. Cuando me vieron, todos de inmediato giraron la cabeza hacia mi y parecieron alegrarse, porque comenzaron a saludar y a preguntarme por mi pierna.

-¡Abran paso, abran paso que viene el carro ambulancia! - gritaba Connie que venía hacia mi junto a Sasha para librarme del interrogatorio. Me alegré de verlos. No solo los había extrañado estando sola, sino que también era un alivio saber que todos estaban con vida. Me ayudaron a llegar a la punta de la mesa donde también estaban Jean, Ymir e Historia.

-Liv, que bueno que estás recuperada- dijo Historia al verme tomar asiento- ¿Cómo estás? ¿Te duele algo?

-Estoy mejor, a veces me duele el tobillo, pero el Doctor Connor dijo que es normal, que en unas semanas va a estar completamente sano. Solo que no puedo salir a misiones aún.

-Yo no querría salir a misiones después de casi ser comida por un titán de todas formas - expresó con un gesto de pánico en el rostro.

-Ey... todos nos preguntamos como fue. Tenemos una versión que circula por ahí, pero supongo que la tuya va a ser la verdadera. Queremos escuchar la primicia.

Ymir me miraba con intriga, al igual que el resto del grupo que se acercó para escuchar. Era momento de sacar mi mejor cara y de dibujar los hechos un poco. Hange estaría decepcionada si se me escapaba algo de lo que me había confesado. Miré de reojo a la mesa de al lado y divisé a Eren sentado a un metro de mi. Simulaba estar bebiendo té y comiendo una galleta pero me di cuenta que su atención estaba puesta en lo que iba a decir.

-Bueno... es que apareció un titán excéntrico, Sasha me gritó y disparé la bengala. Moblit dijo que huyéramos al bosque, que él y Moses se encargarían. Entonces huí, pero estaba tan nerviosa que cuando miré al mi alrededor estaba sola. Até a Libra y.... - conté la historia tal y como había sucedido, hasta el momento de la aparición del cuarto titán. Miré de soslayo otra vez hacia Eren, y nuestras miradas se encontraron. Él no apartó sus ojos y en ese momento supe que ya lo sabía. Sabía que conocía su secreto. No me quitaba los ojos de encima. De repente sentí una ola de calor invadir mi cuerpo y concentrarse en mis mejillas. Eren seguía mirándome, quería saber que diría a continuación, quería comprobar si diría la verdad o lo cubriría.

-Apareció un último titán, si. Pero yo estaba demasiado débil para combatirlo, intenté esconderme y creo que funcionó. Pero me desmayé. Lo siguiente que recuerdo es a Armin mirándome en el carro de regreso. No sé como salí del bosque, no se quien me salvó.

En ese momento, escuché como Eren se ponía de pie y se dirigía hacia la puerta. Eso era todo. Aquello le confirmó que conocía su secreto y no necesitaba oír más ¿Estaría enojado? ¿Tendría miedo que lo cuente? ¿Por qué se iba? Otra vez las preguntas sin respuesta.

- El Capitán Levi dice que él y Hange regresaron a buscarte - Sasha interrumpió mis pensamientos- cuando se enteraron que entraste al bosque y nunca saliste, decidieron ir a investigar y te encontraron herida.

Me apuré a asentir con la cabeza. Cada vez era mas evidente que los altos mandos sabían de todo esto y estaban intentando encubrirlo.

-Así debió haber sido.... - acoté confundida.

-Lo importante es que estás a salvo-dijo Sasha nuevamente abrazándome con fuerza. Me quejé del dolor y ella me soltó entre risas y disculpas. Volteé a ver la puerta pero Eren ya no estaba. Definitivamente necesitaba volver a hablar con él.

Una última vez (Eren Jaegar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora