WHAT A TIME || regulus black

capitulo dos

Daisy Evans se despertó temprano en su primer día de clases. Se dio una ducha, peino, maquillo y coloco su uniforme, tomándose todo el tiempo necesario para verse decente al conocer a sus profesores y causarles una buena impresión. Quien dijo que el aspecto no es lo mas importante claramente no sabia demasiado de la vida real, si quieres agradarle a alguien que realmente no te conoce, debes verte de una forma que le parezca apropiada. Por mas superficial que suene. 

La rubia no llevaba ni una semana en Hogwarts y ya estaba sintiendo la familiar presión en su pecho, esa presión que había dejado de sentir al irse a Ilvermorny a estudiar. Sabia que Lily era una estudiante modelo y que sus calificaciones y talentos eran algo extraordinario, y si bien eso la enorgullecía profundamente, no quería ser conocida solo por ser la hermanita pequeña de Lily Evans, quería brillar por su cuenta propia y demostrar que era igual de valiosa. 

Bajo al Gran Comedor luego de ordenar su cama, eso era algo que le daba mucha pereza hacer pero peor era la sensación de volver a su habitación y ver todo desordenado. Como las chicas de su año eran numero par, Lily y Remus le habían informado que tendría una habitación para ella sola, a no ser que llegue una estudiante nueva, pero era algo poco probable. Las transferencias no eran muy comunes y menos en el ambiente de guerra que Inglaterra estaba enfrentando en esos momentos. 

Tomo asiento en la mesa de gryffindor, preparando su desayuno y observando a las demás personas presentes. Aun faltaba una hora para el comienzo de las clases así que suponía que todos estaban tratando de dormir un rato mas. Salió de sus pensamientos en cuanto sintió a alguien tomar asiento frente a ella y al ver quien era no pudo evitar sorprenderse.

—Leonie—la saludo, llevando su taza de te hacia su boca mientras que la slytherin le sonreía simpáticamente.

—Hola, te vi sola y decidí hacerte compañía, ¿eso esta bien?—pregunto nerviosa. Leonie era una buena chica y se había sentido muy mal luego de que Regulus la insultara de esa forma el día anterior. Sabia que el chico no había querido ofenderla de ninguna forma, esa era solo su forma normal de expresarse. Y si bien dudaba que la chica fuera a tratarla mal por algo que no hizo, siempre se sentía nerviosa en presencia de otros gryffindors. No era extraña al hecho de que todos pensaban que saldría de Hogwarts para convertirse en  una malvada asesina, no es que estuvieran muy alejados de la realidad realmente.

—Si, claro—asintió intentando eliminar la sorpresa de su cuerpo y charlar con normalidad.

—¿Qué tal tu nueva habitación?—pregunto intentando eliminar todo rastro de incomodidad del ambiente. 

—Bien—sonrió, volviendo a bajar su taza mientras la chica empezaba a desayunar también—al parecer no hay compañeras para mi así que tengo una habitación propia. 

—Que afortunada—suspiro—una de mis compañeras, Millie Nott, no deja de roncar en toda la noche...una nunca sabe si es ella o el calamar gigante finalmente rompió las paredes y entro a la sala común—rodo los ojos bromeando, haciendo a la rubia soltar una carcajada que provoco una sonrisa en la morena. 

—Debe ser genial dormir bajo el lago negro—comento—yo tengo algo de miedo de caminar dormida y caerme de una ventana de la torre. 

—Oh ¿eres sonámbula?—pregunto sorprendida haciéndola asentir como respuesta—Yo sufro insomnio, choca los cincos, podemos formar el club de las personas que no duermen bien—volvió a bromear y ambas chocaron las palmas sobre la mesa. 

La conversación siguió fluidamente y Daisy rápidamente decidió que Leonie era una persona de la que quería ser amiga así que quedaron en verse en la biblioteca para estudiar durante la tarde, teniendo en cuenta que como estaban en casas y años distintos, no podrían verse de casualidad demasiadas veces.