WHAT A TIME || regulus black

capitulo cuatro

Con el mes de octubre llego la época que Daisy mas esperaba. El comienzo de la temporada de quidditch. No podía negar que los nervios la comían por dentro, temía no ser lo suficientemente buena y decepcionar a su equipo, pero iba a hacer lo mejor que pudiera. Además, había dado todo de ella en cada una de las practicas e incluso entrenado horas extras con James y Corvus a quien consideraba cada vez mas sus amigo, incluso estaba diseñando todos los planes posibles para lograr que Lily empiece a ver a James con otros ojos.  

—Si no dejas de mover tu pierna, voy a lanzarte de la escoba con una bludger—le advirtió Corvus durante el desayuno, la mañana de su primer partido contra slytherin. 

—¡Estoy nerviosa!—trato de defenderse dándole una mala mirada. 

—Y si no te detienes estarás nerviosa y muerta—dijo seriamente. 

Daisy rodo los ojos para levantarse y salir del Gran Comedor, decidiendo que ya era un buen momento para dirigirse a los vestuarios y preparase, el partido comenzaría recién en una hora. Al llegar vio a Tamarah y Dorcas Meadowes, las únicas otras chicas del equipo. Ellas le sonrieron y Dorcas le extendió una pequeña coleta roja.  

—Deberías sujetar tu cabello o será un desastre—bromeo—recuerdo que en el primer partido que vi, cuando estaba en primer año, una de las chicas del equipo jugo con el cabello suelto y todo su cabello se fue a su cara...termino recibiendo una bludger en la cabeza—hizo una mueca.

—¿Esta viva?—trago saliva preocupada.

—No lo se—se detuvo un momento—ahora que lo pienso, nunca volví a verla.

—Oh, genial—rodo los ojos sarcásticamente. 

Su uniforme ya estaba puesto y su cabello había sido acomodado en una coleta alta, lo único que le faltaba era la seguridad de que no se caería de la escoba a mitad del partido y arruinaría todo. Tal vez ser la buscadora era una mala idea, toda la victoria dependía de ella en gran medida. 

—Un pajarito me dijo que estas nerviosa—comento James acercándose a ella luego del gran discurso de Frank, que fue mas una amenaza, mientras esperaban que se les diera la orden para salir al campo y empezar a jugar. 

—Un cuervo bastante chismoso—dijo por lo bajo, el nerviosismo la ponía de mal humor. 

—Daisy Gertrudis Evans...

—Mi segundo nombre es Elizabeth. 

—¡No te atrevas a estar nerviosa!—siguió sin escucharla—yo mejor que nadie se lo duro que haz trabajado, y tu lo sabes también. ¡Eres una de las mejores jugadoras que ha tenido gryffindor en años!—insistió sacudiéndola por los brazos—Nos harás ganar, estoy seguro.  

—¿Enserio lo crees?

—Si Dais, todo saldrá bien.  

Daisy sonrio levemente sintiendo el miedo salir de su cuerpo lentamente. Era su primer partido e iba a dar su mejor esfuerzo y disfrutarlo. Sin pensarlo demasiado, salto a los brazos de James abrazándolo fuertemente y el se lo devolvió con una risa y un beso en su frente. En ese tiempo juntos habían aprendido a quererse como lo harían un hermano y una hermana. Realmente eran buenos amigos.

—¡Fanáticos del quidditch!—se escucho la voz de quien narraría el partido desde lo mas alto de las gradas—¡Bienvenidos al comienzo de la temporada, donde los tres mejores equipos de Hogwarts...y slytherin...competirán por la copa de quidditch!

—¿Ese es Sirius?—pregunto incrédula. No entendería porque Dumbledore le daría la responsabilidad de narrar un partido de quidditch a Sirius Black.