"La historia del lobo plateado" 《Junjou romántica》

Cap. 17

Narra Misaki

Me quedé pensando en su reacción al verme después de mucho..

Y si a lo mejor... él quería verme de nuevo?

Habrá pensado en mí?

Llegué a casa y cerré bien la puerta por si acaso, aunque ya no quiera ver a Usagi san haré caso a eso de que hay híbridos con malas intenciones cerca de casa.

Me acosté en el sillón pensando en Ijuuin, con tan solo esa sonrisa que me enseñó yo dibujé una en mi rostro.
Cerré mis ojos recordando en todo lo que viví con él.
Al conocerlo por primera vez en una cafetería cerca de mi secundaria me emocioné, siendo autor de novelas increíbles me cautivó rápido. Recuerdo que él no pasaba por buen momento así que decidí animarlo y después de una linda amistad me preguntó;

"Quieres salir conmigo?"

A lo que respondí como un tonto tímido que sí, mi cara tan roja sin saber que más hacer en ese momento. Nuestra primera cita fue ir a caminar por el centro de la ciudad, visitar la misma heladería todo el tiempo, hablar de tantas cosas, de mis penas hasta logros.
Era tan joven, apenas tenía 18 años cuando comencé a salir con él. Era tan inocente para entender algunas cosas que hacía o decía, eso le gustaba de mí según sus palabras.

"Felicidades por tu egreso, amor."

Me felicitó con un lindo ramo de rosas, estaba tan feliz que comencé a llorar como un niño, lo abracé tan fuerte mientras que él besaba mi mejilla tiernamente.

Tiempo pasó y no sabía si estudiar o trabajar, después de un bajón mío intentó animarme.

"Misaki, ven conmigo. Quiero que vivamos juntos."

No podía creer su propuesta, eso ya era demasiado para mí, no quería llorar en frente de él, tapé mi rostro lloroso y sentí sus brazos alrededor de mí. Estaba feliz de verdad.

"Misaki... terminemos esto aquí, si?"

Hasta que eso pasó... abrí mis ojos sorprendido, me senté en el sofá con la cabeza agachas.
Mi hermano me dijo algo antes de que todo lo malo pasara;

"Misaki te dejo ir, ok? Pero luego no vengas llorando."

Suspiré;
-Qué tonto..- Dije para mí mismo pensando en mi hermano.
Me levanté para ir a mi cuarto y cambiarme, aún seguía teniendo el número de Ijuuin, debería llamarlo?

Qué tipo de conversación le puedo buscar como excusa para llamarlo? No puedo decirle algo como: "Cuando te vi caminando por la vereda me ilusionaste otra vez, quiero saber cómo estás."
Qué tonto soñador soy.

No tenía nada en mente, me puse ropa más cómoda y seguía pensando, hasta que llegó esa prenda a mi cabeza.
La levanté del suelo para ponerlo en el lavaropas, ese sweater debe ser devuelto a su dueño.

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Dos semanas pasaron, el clima estaba nublado y a veces llovía. Aunque fuera poco igual había que llevar paraguas al trabajo, estando con la mente limpia y serena lo tenía decidido, le daría el sweater a Ijuuin hoy.

Tomaré el bus al centro para ir caminando hasta el departamento ajeno y al dárselo le preguntaré cómo ha estado. Y si la conversación sigue pues a lo mejor tenga oportunidad, cierto?
Intenté llamarlo pero no respondía, a lo mejor estaba ocupado.

Preparé mi mochila para llevar la prenda limpia y planchada en un paquete.
Estando listo fui a la puerta, al intentar girar el pomo algo me detuvo.

No sé qué fue eso, aunque estuviese solo en casa sentí que algo paró mi paso. Agité mi cabeza para dejar esa tontería y por fin salir de casa.