Cap. 2

96 13 2
                                    


Narra Misaki

Hace meses no me había dado resultado nada de lo que quería, por lo menos tenía mi trabajo estable y mi cuñada me encontró un lugar donde poder vivir tranquilo.

Una casita cerca de la playa, estaba un poco lejos de la ciudad y debía tomar dos autobuses pero no iba a dejar esa oportunidad, no podría encontrar otro lugar donde estar.
Lo extraño es que tiene un gran almacén detrás, no sabía que iba a poner ahí pero por lo frío que era solo decidí que fuera mi taller donde pueda pintar.

En mis ratos libres pintaba cuadros para distraerme, era algo que hace mucho no hacía, había espacio de sobra para todos mis lienzos.

Ya estando más tranquilo invité a mis amigos, se interesaron más por los cuadros pero se enfadaron al ver que la mayor parte de los retratos eran de Ijuuin.

"Eres tan débil, Misaki"


No los volví a invitar, a excepción de uno que sí me acompañaba.

Toudou Shinnosuke, chico que conocí en la universidad y hasta el día de hoy sigue siendo mi amigo, uno de los más cercanos que tengo.
El único que me apoyó al saber de mi orientación sexual.

Aunque se encuentre lejos de mi hogar, él hace lo posible para venir a verme y acompañarme, también me hace comprender que seguir con estos retratos no vale la pena pero no puedo evitarlo, no puedo superar tan rápido a Ijuuin..

------

-Misaki! Cómo te va?-

Siempre tan feliz, lo dejé pasar a mi hogar para así dejar que me abrace fuerte. Le ofrecí café que aceptó con gusto, con todo listo se guió solo al almacén que poco a poco se vió más cómodo para poder estar.
Compré un radiador para que no hiciera tanto frío y todo estaba bien decorado y ordenado.

-Qué pintabas?- Me preguntó mientras se sentaba.

-Nada nuevo, un gato jugando al ajedrez.-
 Contesté bebiendo un poco del café mientras le mostraba la pintura.

Sus ojos se iluminaron, a Toudou le  gustan los gatos.

-ESTÁ GENIAL! PUEDO QUEDÁRMELO?!-
Se levantó feliz para apretar mis manos.

-C-Claro tranquilo, sólo deja que lo termine y te lo daré.-

-Gracias Misaki!-

Me abrazó fuertemente de nuevo sin notar que me hizo tirar la mitad del café al suelo, de todas maneras acepté su abrazo.

-Oye, quieres salir por ahí? Está bonito el día para estar encerrados.-

Preguntó al mirar a los pájaros cerca de la ventana, me quedé pensando una respuesta.

-No sé... Estamos bien aquí.-

-Misaki... estás pensando otra vez en eso?-

-Podría llegar a pasar...-

Suspiró decepcionado;
-Misaki, escuchame. No hay posibilidad de que puedas cruzarte a ese desgraciado, la ciudad es enorme como para que eso pase.-

Aparté la mirada por un momento, hace rato no iba a la ciudad por temor a tener que encontrarme de la nada a Ijuuin con alguien más.

-Vamos a comer helado!- Me dijo feliz.

-Pero.. Y si él está en alguna heladería que me gusta? No puedo arriesgarme a eso..-

-Qué?! Estás bromeando? Te llevaré a otras heladerías mejores que a las que fuiste con él. Además tú amas el helado.-

"La historia del lobo plateado" 《Junjou romántica》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora