La invitación

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Lena's POV

Sentada en mi escritorio haciendo la tarea de química, me sobresalta la canción que tengo de tono de llamada. Suspiro. Solo me falta un ejercicio para terminarla y no quiero contestar por si la llamada se extiende.

Levanto el teléfono y decido tomar la decisión dependiendo de quién esté del otro lado de la línea.

Llamada entrante: Idiota

Lo pienso un momento. Supongo que la química tendrá que esperar.

—Hola, Le-lena— escucho apenas contesto.

—Hola, Max. Suenas nervioso.

—¿Tan evidente fui? Demonios

Adoro lo transparente que es —el tartamudeo te delató. Cuéntame ¿a qué se debe la llamada si nos despedimos hace como una hora?

—¿Estás ocupada? Porque puedo llamar luego.

—Tranquilo, solo estaba trabajando con los enlaces covalentes.

Suspira —Oh, bueno.— se queda en silencio un momento, otro suspiro más.

—¿Ocurre algo?

—Y-yo... No, o sea, sí...

—Hombre, ve al grano que no te entiendo nada.

Suspira como por cuarta vez —Está bien, aquí voy ¿Quieres salir conmigo el viernes?

Confundida, me siento en mi cama —¿salir contigo? ¿En qué plan?

—En plan... Cita.

—Oh... — eso no lo esperaba.

—¿Muy rápido? ¿Mala idea? Rayos, sabía que debía esperar... No importa, Lena. Hablamos más tarde.

Reacciono rápidamente —Espera, idiota, que aún no te he dicho nada.

—Bueno, bueno. Espero.

Daré ese pequeño salto y lo pensaré después —Está bien, saldré contigo ¿qué plan tenías en mente?

—Maravilloso, creo que vomitaré por el estrés. —río— Planeo que vayamos a ver una película y después a comer.

—Bastante cliché ¿huh?

—Teniendo en cuenta que nunca he ido a una cita y obtuve ayuda para escoger el plan, pude haber estado peor.

—Está bien. Tranquilo, que ya dije que sí ¿tenemos algún dress code?

—Mmm no, solo ve casual.

—Está bien.

Lo escucho suspirar pesadamente del otro lado de la línea —Bueno, creo que eso era todo. Nos vemos mañana.

—Hasta mañana, Max. —cuelgo y me recuesto en mi cama ¿en qué rayos me he metido ahora?

(...)

En el receso después de la tercera clase, caminamos Trix, 4 ojos y yo por el pasillo principal.

En un momento de distracción, Max roza sus dedos con mi mano. Él cree que no me di cuenta, pero claramente sí lo hice. Al cabo de unos segundos lo vuelve a hacer, pero esta vez une uno de sus dedos al mío. Tal como pasó el otro día, separo mi mano como si tuviera la peste, no sin antes voltear a todos lados asegurándome que nadie lo haya visto.

Max frunce su ceño y me mira con descontento, yo le envío una mirada de "por qué me ves así" y ruedo mis ojos.

Unas horas más tarde...

Después de clases, Trix y yo nos juntamos en mi casa porque teníamos días sin hacerlo. Sentadas una frente a la otra, decido darle la "noticia".

—Trix, te voy a contar algo pero —la tomo de los hombros y la sacudo a medida que digo palabra tras palabra— NO TE VUELVAS LOCA.

—No prometo nada, sabes que me volveré loca igual. —se encoge de hombros.

—Ahg, no puedo contigo. Bueno, ayer en la tarde Max me llamó y me invitó a una cita este viernes. —espero a que diga algo pero ella se mantiene tranquila.

Pasan varios segundos en que solo nos observamos y ella sigue callada. Eso es raro.

—¿No tienes nada que decir al respecto? Tu silencio me inquieta.

Y como si hubiese presionado un botón de activado, Trix comienza a abrir sus ojos, sonríe mucho, se levanta de la cama y comienza a dar muchos saltos de alegría al mismo tiempo que chilla muy agudo.

—No puede ser, no puede ser, NO PUEDE SER. AAAAAAHHHH

—Sí, definitivamente esto es más normal. —ruedo mis ojos con diversión.

Ella vuelve a sentarse en mi cama y me ve directamente a los ojos —¿Te dijo qué van a hacer? ¿A dónde dónde a ir? ¿Qué te vas a poner? Dimeee— ahora me toma por los hombros y me sacude con insistencia.

—Ahí es donde iba a pedir tu ayuda, mi querida Trixie.

Ella aplaude — Qué emoción, me estás pidiendo ayuda con el outfit.

Ahora es mi turno de tomarla por los hombros —Cálmate, vaquera. Te va a dar algo.

Ella inhala hondo— Está bien, ahora sí. Cuéntamelo todo.

—No hay mucho qué decir: él me llamó y me dijo para salir a comer y al cine el viernes y me dio libertad en cuanto a la vestimenta. Eso es todo. —me encojo de hombros.

—Eso es fabuloso. Eres suertuda, Lena, Max parece un gran chico.

—Sí, si, ya te pusiste muy cursi. Ahora vayamos a lo que quería discutir: la ropa que usaré ese día.

—Bueno, van al cine y a comer, por lo que podrías usar un vestido con medias o unos lindos pantalones con zapatos cerrados.

Pienso un momento —creo que el vestido suena bien. Vestirme decente de vez en cuando no hace daño.

Trix salta emocionada y comienza a revisar mi closet de pies a cabeza. Saca vestidos que ni sabía que estaban ahí y me los entrega todos para probármelos.

Ella adora todo lo relacionado con la ropa así que la dejo divertirse y convertirme en un maniquí viviente.

Luego de un rato rechazando opciones, termino con un vestido azul marino con agujeros hechos a propósito en todos lados y una pequeña cadena que rodea toda mi cintura. Sonrío en el espejo y volteo a su dirección.

Ella niega con la cabeza —No, pareces una vagabunda.

—¿Qué? ¡Pero si es mi estilo!

—Me agrada tu estilo, pero este vestido en particular es horrendo.

—No me vengas con eso, Trix.— Me cruzo de brazos.

—Sí, te vengo con eso. —Ella me imita.

—Bueno, cualquiera que sea tu opinión, voy a usar este vestido el viernes. No cambiaré de parecer.

—A veces te detesto un poco.— toma el vestido y, pensando que le va a hacer algo, también lo agarro y comenzamos a forcejear. Ambas tiramos en nuestra propia dirección y de repente escuchamos el rasgado de la tela. Oh no.

☆☆☆

Buenas, buenas, queridos lectores. Después de mil años les traigo capítulo nuevo. Qué pena con el compadre, como diría mi mamá.

Qué emoción, se nos viene primera cita.

Oh, oh, las muchas aberturas del vestido de Lena le jugaron en contra.

Para todos los que me leen desde el día 1, seguramente han notado que cambio algunas cosas de los capítulos ya subidos... Solo quiero que sepan que no hay que alarmarse y que obvio pueden revisarlos otra vez para no andar todos confundidos a medida que avanza la historia. Gracias por entender.

¡Los leo luego!

Todas las primeras veces de Max Gutiérrez ☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora