este capítulo está desde el punto de vista de Jungkook.
Ella debía casarse con mi hermano, ya todo estaba planeado, desde su vestido que había sido diseñado por uno de los mejores costureros de la época, hasta sus zapatos con suela de oro. Era hija del rey de las tierras del occidente, era tan atractiva a la vista que cualquier doncella que hubiera en nuestro reino se veía poca cosa al lado de ella.
Estábamos escondidos en la biblioteca, entre ese montón de estantes llenos de polvo, donde los libros eran testigos de nuestro amor. Volví a besarla acorralandola contra el pequeño sofá que había en una esquina, retiraba de forma lenta su extravagante vestido, y aflojando su corsé.
Tu: Jungkook, tengo que estar en el salón para practicar el vals- me miró a los ojos
Jk: tenemos tiempo aún, nadie sabe donde estamos, solo vivamos nuestro amor.
Como hubiera deseado que me escuchara y se diera cuenta que estaba dispuesto a hacer lo que fuera con tal de quedarme con ella, no quería compartirla con Minho, la quería solo para mí y nadie me detendría. La solté dándole a entender que podía irse, acomodó su corsé y su vestido volvió a su bronceado cuerpo, se despidió de mí con un beso en la mejilla y desapareció de la biblioteca.
Días después mi hermano y la corte real fueron invitados a una cena, T/n estaba "enferma" así que no pudo ir y yo me ofrecí a cuidar de ella. Mi hermano confiaba plenamente en mí, así que me concibió el permiso. Pero no sabía qué le diría a las criadas y al canciller que nos vigilaran.
Mi hermano se retiró atravesando la fortaleza y perdiéndose en la extensa carretera, miré cada uno de los pasillos del palacio, había criadas haciendo su labor y guardias pero ninguno prestaba atención. Entre a la habitación de la princesa, con dos botellas de vino.
Jk: ya se fueron- susurré
Tu: ya?- asentí- al fin, ya me estaba aburriendo de que me trajeran té a cada rato, sabe horrible; ahora que haremos Príncipe Jungkook.
Jk: hay un lago en el bosque, quieres ir?
Tu: me encantaría.
Corríamos desnudos por todo el prado, el sol iluminaba su escultural cuerpo provocando la misma sensación que tuve en la biblioteca, quería hacerla mía una vez más, al menos antes deque ella se case y yo tenga que irme del país para buscar esposa también.
Ya dentro del lago la besé, recorriendo con mis manos cada parte de su cuerpo, nos deseabamos de forma intensa. Con mis traviesos dedos toqué su núcleo, la penetre, ella apretaba mis hombros tratando de no soltar gritos y llamar la atención de algún cazador o leñador. finalmente me uní a ella comenzando con el coito que marcaría nuestro pecado. Salimos del agua, acostandonos el el césped dispuestos a seguir con nuestro encuentro sexual, dominaba su cuerpo, apoderándose de cada parte de su ser, uniendonos en cuerpo y alma eramos uno solo.
Jk: te amo- gemí
Tu: yo te amo más.
Liberamos nuestro clímax con un fuerte grito liberador, metidos en nuestra propia burbuja mientras volvíamos a besarnos de forma desesperada sin percatarnos de la presencia del canciller y dos criadas detrás de él.
Nuestro acto llegó a oídos de mi hermano, llamándome traidor y condenando a muerte a T/n, sus ojos reflejaban fúria y no había ser que lograra parar el rencor y odio que sentía contra nosotros. Frente a toda la corte dije que quería morir con ella, y así lo hice.Morimos en el mismo lago donde echamos pasión, con cadenas en nuestros tobillos obligandonos a hundirnos, le agarré la mano derecha jurando jamás soltarla, mientras veíamos con resentimiento a los que fueron testigos de una pasión.
ok, este en un borrador que tengo hace mucho y quería publicarlo, este no tiene tantas cosas como lo otros, ya que es algo romántico como amantes por así decirlo que sucedió en el siglo XVII, espero les guste y más tarde actualizare otra vez.
l@s amo zucaritas <3
yo al ver lo que escribí hace 1 año.
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