El agua caliente caía sobre mi cuerpo y con rabia intentaba limpiar cada centímetro manchado por la humillacion.

Mis lagrimas se mezclaban con el agua y se iban por la coladera. Esta es una leccion de vida, dejarlo pasar todo y que se vaya por la coladera... Vivir dia a dia escribiendo un capitulo enterrandolo después para jamás volver a ser leido será la mejor opcion.

A fin de cuentas, él no me ha despedido, no me corrió de su apartamento. Suspiré con el poco de amor libre que quedaba en mí . -Alisson, despierta, deja de ser tan estúpida .. -Golpee mí mejilla reprendiendome dejandola roja y ardiendo.

Cerré la regadera y salí de ahí.
El ritual comenzó y mi mente me sorprendía, con un silencio sepulcral.
Perfumé mi cuerpo y sequé mi cabello.

El sol es hermoso afuera, quizá deba salir y conocer un poco, me hará bien.
Tal vez el me extrañe... Puse los ojos en blanco por que volvió a aparecer la Alisson que se enamoró perdidamente de él en algun momento .

Un vestido corto azul, unos zapato cómodos y una chaqueta de mezclilla me acompañaran este día.
La puerta golpeó y mi corazón dio un brinco, olvidaría sus llaves me pregunté... No creo y abrí con la cara más ruda que pude tener. -bue... Buen dia.. No puedo negar que senti alivio al ver q no era el si no la señora del aseo.

-Adelante, yo estoy por salir.
Le di acceso y me fui sin mirar atrás.

Baje una a una las escalera y el alivio regresaba a mi en cuanto me alejaba.

Tenía que pasar frente a la cafetería de esa pequeña traidora y no habiay de otra, intentaré no ser vista pero fue inútil. La cafetería estaba vacia a esa hora y me vió..
-Alisson, Alisson!! Gritó desde el interior hasta darme alcance.
-Hoy no viniste a desayunar y te he guardado un pastel.
-había sinceridad en sus palabras, pero. ¿Por qué tanta amabilidad de su parte?, sólo soy una cliente frecuente o ¿que intencion escondida la mueve?... Tomó mi mano e insistente suplicó el que pasara a comerlo...
-yo invito.. -lanzó su última oferta y sentí pena. Solo asentí y me deje llevar al interior del establecimiento.

Me senté en los bancos de la barra mientras ella preparaba un café ...
Si yo iniciaba la conversación se bien que lanzaria una flecha envenenada directo al centro de su corazón asi que esperé a que ella lo hiciera.

-Estás demasiado pensativa, ¿Te ocurre algo?... -escapó una sonrisa ante tal pregunta.
-¿Debería ocurrirme algo?... Evadia al límite el responderle pero ella insistía... -Tal vez extrañas algo o algo más te ha ocurrido, no creas que no conozco el ambiente y lo desgastante que puede ser la oficina y Jimin..

Punzada al corazón, cuando dijo ese nombre y no estaba segura si quería que me contara sobre sus tiempos ahí...
Corté un poco de pastel y lo lleve a mi boca para saborearlo e intentar quitar el sabor amargo que habia en ella.. me dispuse a preguntar por que sus respuestas a partir de ahora cambiarían toda mi realidad.

-¿Por qué te fuiste?, ¿Te despidieron?.. Pregunté con insistencia ... -Oh no, simplemente lo logré. -Con orgullo señalo su pequeño lugar.

-Así que ¿no solo lo atiendes?.. Ella sonrió y puso la barbilla entre sus manos recargada sobre la barra... -No Alisson, este es el sueño que tuve desde niña, para algunos no es mucho, para mí lo es todo, depende de las metas de cada quien. Esta es la mía.

-Seguro ahorraste cada centavo... Di un largo trago de café y temí a su respuesta. Esperaba que fueran ahorros con todo mi corazón...

Estiró su mano y arregló mi flequillo,mientras me miraba con dulzura.
-Ahorre cada centavo Alisson, fueron tiempos muy difíciles, hay que aprender a jugar si quieres lograr todo lo que te propongas....
inevitablemente al escucharle se atoró el panesillo en mi garganta aun irritada.
Ella se asustó y dio golpes sobre mi espalda.

-A...jugar?... ¿A que te refieres con eso... Apuestas???.. La miré esperando el milagro de que ella tuviera el talento del juego.

-Alisson... ¿Crees en verdad que no se nada de nada?.. Se cruzó de brazos y leyó mi reacción atenta..

-¿A que te refieres con saber? .

Veronica tenia mi edad aproximadamente, sus cabellos rubios al hombro y ojos azules la hacian parecer una muñeca viviente, ella entró mas joven que yo a la empresa, y si, fue asistente de Jimin, pero de eso a más hay un mar de diferencia...

Me miró con complicidad y empatia...
-¿Crees que no me di cuenta que casi cortas mi yugular ayer?.. Fue infantil pero te veias tan tierna enfadada. -los tonos rojos de vergüenza estaban apareciendo en mis mejillas..
-No te avergüences, no hay por que hacerlo, yo no voy a juzgarte ni tengo el derecho... - De una mirada rápida a mi tasa notó que estaba vacía.. -Más café?- asentí y volvió a llenarla.

-Puedes preguntar con libertad cualquier cosa que necesites y que esté inquietandote. Todo eso que no vomitaste en mi cara por ejemplo.

Veronica no era una enemiga declarando guerra, ella era un pais amigo mostrando su apoyo o eso parecía.

-¿Te acuestas con el?...

Disparé mi flecha envenenada esperando que se ofendiera y negara. Sólo sonrio y rio por lo bajo cubriendo su boca..

- A veces...

Quedé helada con su respuesta y el aire me faltaba.

-¿c.. Como que a veces?... Deseaba que un rayo me cayera encima ,ya no quería mas de esto pero la curiosidad era mas fuerte.

Llevó la cafetera de regreso a su sitio.

-¿Tú no?...


Mi mandíbula estaba a punto de caer por la sorpresa pero guarde silencio.

-Ya no es tan frecuente, quizá esté en otros asuntos... Asuntos con cabellos cobrizos y ojos grises quizá.. Me dio una sonrisa.

-¿Y eso te importaría?... - esperaba le doliera como a mi pero negó un par de veces.. -¿Por que habría que afectarme Alisson?...

-¿Y si se casara?... - abrió sus enormes ojos azules y sonrió ampliamente... -¿Quién ? ¿Jimin casado?..
Disculpa disculpa por reírme, no te ofendas solo que la idea me parece una locura.

-Podría ser el caso que se enamorara y se casara dentro de poco. - agregue.

-Dime por favor que no te lo has creído, en el caso que así haya sido por favor, si es de esa manera, estoy en el deber de romper tu burbuja y traerte de nuevo al mundo real.

-¿Te lo ha propuesto?.. ¿Ha sido sobrio?... Su mirada no se apartaba de mi, ansiosa de una respuesta y un nudo en la garganta me puso freno a responderle.

Sólo negué un par de veces y sin querer mis lágrimas salieron.

-Te dije que tuvieras cuidado, lo advertí pero no me escuchaste.

Sus brazos rodearon mis hombros y acepte, necesitaba un abrazo y ella era una enemiga que entendía mi sentir.



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