13. La primera cita

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Narrador POV

¿Donde está? — ____ se preguntó a sí misma, frustrada.

____ buscaba el vestido azul que su prima le había regalado en su cumpleaños, que usaría para la cita con Edric, habían quedado de que él la recogería en su casa, obviamente a escondidas de sus padres.

—¡Al fin! —gritó aliviada, colocó el vestido en su cama y corrió al baño, cepilló sus dientes, se colocó el vestido y se miró detenidamente en el espejo.

—No se ve tan mal —murmuró con una sonrisa, dando una vuelta emocionada.

Un ruido se escuchó desde la ventana del cuarto de la joven, se acercó a ver y el peli-verde, el tiraba unas piedras pequeñas para llamar su atención, ya había venido por ella.

—Ahora ¿qué excusa pongo? —se preguntó nerviosa, se había concentrado tanto en qué ponerse qué había olvidado por completo el tema de sus padres.

Rayos, pensó.

—Edric, mis padres —susurró, abriendo la ventana suavemente sin hacer ruidos.

—Salta, yo te atrapó.

—¿Estas mal de la cabeza?

—Tal vez

—Edric —le reclamó con una mueca.

—Tranquila, se que puedo hacer —movió sus dedos formando un círculo, una ilusión apareció en la cama de la chica, era exactamente a ella pero con ropa cómoda, supuestamente durmiendo.

—Eres brillante —río sorprendida.

—Lo se —respondió Edric con los brazos cruzados.

—Bien, ya voy —agarró la soga que estaba en su cajón, la ajusto y bajó con cuidado, al final Edric la atrapó ya que salto metros antes de caer al suelo.

—Bien, ¿vamos? —preguntó ____, se sonrojo al ver que Edric la tenía en brazos aún.

(Metas)

Vamos —río nervioso y la bajo.

El extendió su brazo hacia ella, ella nerviosa le tomó la mano y caminaron.

Lo que ____ no se había dado cuenta, era que el le había dejado una carta la noche anterior, que ella no había leído, ni dado cuenta que se encontraba ahí.



[...]

Bien joven, solo tiene que darle a esas tres latas, y ganas el peluche de allá —el señor señaló a los peluches que se encontraban arriba de ellos, uno era una combinación de un unicornio y un lobo, y otro de un búho con un gato.

Los ojos de ____ brillaron, definitivamente quería el segundo.

—Bien, fácil —Edric soltó confiado, hizo algunos movimientos con la pelota antes de lanzarla, la lanzó y solo hizo caer 1 lata.

—Suerte para la próxima, ¡siguiente!

—¡Espere! Quiero otro intento —exclamó colocando otros caracoles en la mesa, el señor sonrió y le dio otra pelota.

cumplidos; edric blight Donde viven las historias. Descúbrelo ahora