Choi Beomgyu es un bipolar Omega, estando fuera de los estándares de "Omega perfecto" por ser un 'chico rellenito' y sobre todo 'bajito'. A pesar de los hirientes comentarios y burlas a su físico, jamás quiso dar importancia. Su amor era todo tipos...
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Beomgyu sentía que iba a desmayarse y su corazoncito no hacía otra cosa que latir de forma irregular, sus manos sudaban y quería mirar a Kang, su Omega lo deseaba.
... Ambos estaban muy sumidos en sus pensamientos. El castañito por querer huir y Taehyun golpeándose internamente para sacar las palabras adecuadas, estaba tan nervioso.
— Beomgyu...
— ¿Podemos ir al patio?
Beomgyu interrumpió, mordiendo sus labiecitos por inercia y mirando con ojitos tímidos al Alfa. Necesitaba aire fresco, y quizá.. Hablar con su papá sobre aquellas emociones que Taehyun le provocaba. Su Omega quería ronronear al aroma del rubio, quería envolverse como una manta y dormir. Taehyun no pudo negarse a tan tímida petición, asintió y su Alfa le dio una idea.
¿Qué mejor que estar más cerquita del castaño?
Con una sonrisa, bajo su diestra a la cintura de Beomgyu y sentirlo congelado a su más mínimo tacto... Sin importarle nada más, caminaron hacía un pasillo que Taehyun conocía bien y Beomgyu no. El Omega estaba soltando su aroma mientras el oji-azul se acerbaba más.
— Ta-Taehyun... — Inspiró hondo, deteniéndose y encarar al Alfa — ¿Q-qué crees que haces?
— Vamos a caminar. Beomgyu inconscientemente abulto sus labios, juntando sus cejas y verse molesto.
— Eso ya lo sé — Espeto, enojado — ¿Puedes soltarme?
— No quiero.
— Kang, suéltame ahora — Taehyun soltó una risa a los suaves golpecitos del Omega. Beomgyu chillo al sentir su espalda chocar con el pecho del mayor, poniéndose nervioso a la respiración cerca de su cuello — ¡E-estas muy cerca, tonto!
Taehyun ronroneo embelesado por el menor, beso aquella piel suavecita y sin darse cuenta, su Alfa envolvió el cuerpo ajeno y lo junto más al suyo. Beomgyu trago sonoramente, negándose a los profundos ronroneos que querían escapar de su pecho. Haciendo todo lo posible por querer zafarse de los ágiles brazos del rubio, fracaso en cada intento. Lloriqueando internamente por su débil fuerza.
— ¿Por qué no miras al frente? Taehyun mantuvo su rostro oculto en el cuello del bajito, y sus manos sostenían la cadera del mismo. Inspirando ese dulce aroma y mezclarlo con el suyo, sentía a su Alfa aullar y volverse un cachorro juguetón de tener al bonito en sus brazos.
Un ronroneo se escuchó.
Beomgyu tapó sus cachetitos rojizos, avergonzado. Escuchando cada vez más los ronroneos del Alfa, ¡No podía creer la ternura de Taehyun! ¡El capitán de fútbol era una masita adorable! Nunca había visto un Alfa actuar de aquella manera tan tierna y dulce.
Ni su padre y hermano tenía esa actitud, y eso que a veces eran algo empalagoso. Miro a su alrededor, sorprendido por darse cuenta de que yacían parados en el patio.
