Trouble's gonna follow where I go

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Mikasa

Eran las siete en punto, aún había tiempo.
Trató de terminar de ponerse su labial rojo mientras cantaba, lo cual lo estaba haciendo una misión imposible, pero es que esa canción le gusta.

I got you, moonlight, you're my starlight I need you all night, come on and dance with me...

—¿Ya estás calentado para al rato? —preguntó Eren mientras atravesaba la sala.

Junto sus labios para tratar de esparcir el color bien. Estaba maquillándose justo a lado del baño, no demoró mucho, solo un poco de base, máscara de pestañas, rubor y su labial. No despegó su vista del espejo mientras se analizaba.

Bien. Creo me veo bien.

Estaba orgullosa de su trabajo, aunque no  usó mucho maquillaje. Movió un poco su cabello, no era largo, le llegaba a la barbilla.

Tal vez me haga falta un corte. Lo tendré en cuenta.

Giró su cabeza para ver a Eren, pero en su lugar de contestarle solo asintió.

—¿Ya estás lista?

Se miró de nuevo en el pequeño espejo y después miró su ropa; pantalón negro con un top de rayas amarillo mostaza y magenta oscuro.

Bien.

Y sus zapatillas negras, no muy altas de punta de aguja. Brutal.
Sintió los brazos del castaño alrededor de su cintura, no se percató en qué momento se acercó, pero tampoco le molestó. Se recargó sobre él colocando su cabeza en su pecho. Como le gusta estar así de cerca con Eren.

—Te ves hermosa —le depositó un beso en la mejilla.

—Gracias —Mikasa lo miró directo a los ojos y sonrió. Podría acostumbrarse fácilmente a esto—. Tú también te ves muy bien.

Él traía una camisa de vestir azul marino con un pantalón negro al igual que ella. La azabache mordió su labio inferior, realmente le gusta Eren y está muy contenta de que sus sentimientos sean recíprocos. Por eso, no se sorprendió que después de su segunda cita se siguieran viendo los dos fines de semanas que estaban entre su salida de hoy. Pero no les fue suficiente, querían verse más y el destino jugó a su favor, porque este fin de semana es largo por la suspensión de clases que tendrán el lunes por ser día festivo.

Eren fue el que sugirió que se quedará en el departamento después de la fiesta y después dijo "quédate los tres días". Armin visitaría a su abuelo, así que tendrían el lugar para ellos dos nada más.
Mikasa se sorprendió, era cierto que querían pasar más tiempo juntos, pero sabía lo que incluía el quedarse tres días sola con él. 

Aceptó.

Le dijo a Levi que se quedaría en casa de Sasha, quién la "había invitado a una cena familiar y después a un fin de semana de chicas". Casi no la deja salir porque justo unos días antes, Mikasa dejó de cubrir su tatuaje. Levi pegó un grito en el cielo, pero comprendió el porqué de su acción y dejarla irse el fin de semana era bueno para ella, casi siempre estaba encerrada en casa.

La avisó a Sasha de sus planes por si a su primo se le ocurría llamar, lo cual dudaba, pero tampoco descartaba. Aún no se sentía lista para decirle sobre su relación con Eren y menos adonde iba a estar ese fin de semana, así que por de mientras mentirle era una buena opción, pero solo por esta vez.
Recordó cómo su amiga puso un par de condones en su mochila mientras le decía que no solo se estaba cuidando de prevenir un embarazo. Lo cual agradeció aunque no verbalmente.

Nadie te va amar como yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora