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Eren

Ahora, verla bailar sería su actividad favorita.

Llevaba un rato observándola, se había cansado así que él regresó a la esquina junto con Annie y tomó una bebida. Estaban recargados contra la pared.

Mikasa bailaba y cantaba junto con Sasha e Historia, Connie se unía entre lapsos y después se perdía entre la gente. La azabache parecía llevarse muy bien con la rubia bajita, estaban tomadas de las manos mientras eufóricamente daban pequeños saltos al ritmo de la canción.

—¿No te piensas unir? Ya llevas un rato acá —dijo Annie.

—Solo me quedaré un poco más —le dio un sorbo a su bebida.

—¿Y Armin?

Parpadeó, Annie casi nunca pregunta por nadie.

—Tuvo que salir, fue a visitar a su abuelo.

La chica no hizo ni un comentario más al respecto y siguió con su vista hacia el frente.

—Deberías a cercarte, apuesto que para Mikasa es aburrido solo verte acá —después de eso, Annie camino entre la multitud y desapareció. De seguro había ido al baño.

Y como había dicho, se quedó un rato más observando a Mikasa, terminó su bebida y se quedó pensando en que pronto debería ir a visitar a sus padres o ellos vendrán a él.

—No es divertido si solo te quedas ahí —era Mikasa, lo tomó desprevenido—. Solo baila una canción más conmigo y dejo de molestarte —se pego a él.

Eren sonrió.

—Está bien.

Mikasa lo tomó de la mano y lo llevó hacia donde estaban los demás, lo cual no era muy lejos. Pudo ver cómo ella tropezó en el camino.
La azabache comenzó a moverse a su alrededor y sabía que, apenas estaban comenzando una relación pero estaba muy contento de que haya sido con ella. Sintió un cuerpo chocar contra él, se giró para ver a Historia.

—Lo siento, mucha gente —señaló y después se rio— ¿Has visto a Ymir?

Negó, tenía un rato que la chica había dicho que iba a saludar a unos amigos y ya no regresó.

Es Ymir, pero ¿debería empezar a preocuparme?

Un chico tropezó con Historia y ella se disculpó rápidamente.

—Te perdono si bailas conmigo —el tipo la abrazo por detrás, pegando su cara contra la mejilla de ella, por su agarre se podía ver que la estaba lastimando. La cara de Historia cambió drásticamente, tenía miedo.

—Oye suéltala, no quiere bailar contigo —le dijo Eren.

—A ti que te importa, ya estás con otra chica —señaló con la vista a Mikasa, la cual no se había dado cuenta de lo que estaba pasando— ¿o quieres intercambiar?

Frunció el ceño.
Definitivamente es un idiota.

—Te dije que la soltaras —quiso sonar más imponente, pero con la música no supo si logró el cometido.

—Metete en tus asuntos Jaeger.

Ah entonces si lo conozco, con razón su cara de idiota me era familiar.

Mikasa dejó de bailar cuando no sintió a Eren con ella, se percató de la situación. Ambos vieron cómo el tipo le dio un beso a la rubia en el cuello y la mirada horrorizada de ella, el castaño comenzó a sentir su sangre hervir.

Y yo que pensé que sería una noche tranquila, pero bueno, a quien le dan pan que llore.

Le soltó un puñetazo, Historia se agachó y corrió a los brazos de Mikasa. Su mano le dolió al instante, tenía un rato que no golpeaba a nadie. La sacudió como si eso fuera a quitar el dolor.

Nadie te va amar como yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora