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La relación que lograron formar ahora mismo era super sana y bonita. No podían estar más felices.
V.- Venga Conway ayúdeme a preparar una cena de aniversario. Es su hijo, usted lo conoce mejor que nadie-. Le suplicaba mientras caminaban hacia el despacho del superior
C.- Y es tu esposo capullo, ahora me vas a decir que no lo conoces?-. Hablo mirándolo fijamente a los ojos.
V.- Claro que lo conozco, pero decorar toda la casa va a ser mucho trabajo para mi solo, aparte le quiero dar una sorpresa super grande.-
C.- Pues pídele ayuda a Horacio, yo estoy muy ocupado para hoy y mañana-.
El comisario se dio por vencido y le mando un mensaje al amigo de su pareja, realmente no le quería pedir ayuda a él pero no tenía otra opción. Recibió una respuesta muy rápida, el de cresta lo ayudaría. Solo suspiro esperando que el sub inspector no le coqueteara como lo hacia siempre que el rubio no estaba presente.
Se metió a su patrulla "Putin" y tomó rumbo a su hogar. Al llegar vio al de cresta apoyado en la puerta esperando a que le abran.
V.- Priviet Horacio, no pensé que llegaría tan pronto-. Intento abrir pero el chico se acercó para saludarlo con dos besos.
H.- Salude bien comisario bombón. Y llegue pronto para poder ayudarlo bien, mi hermano esta con los mecánicos ahora. Ya sabe que Armando le tiene ganas
V.- Soy Volkov o Comisario para usted y no hable mal de mi esposo. Igualmente gracias por la ayuda. Venga pase-. Le comento como quería decorar todo, quería un hambiente muy romántico para la noche.
Estuvieron decorando por unas 2 horas y alfin habían terminado, ahora el comisario estaba exhausto sentado en el sofá y Horacio parado a un lado.
H.- A Gustabo no le gustan las cosas románticas pero bueno, no sabe apreciar las cosas buenas. Yo podría hacerlo muy feliz, sabe?-. Poco a poco fue agachando para acorralar al contrario, Viktor frunció el ceño y sintió como se le sentaba en el regazo. Coloco sus manos en el pecho contrario para empujarlo pero en ese momento la puerta fue abierta dejando ver a un sonriente rubio.
Al ver la malentendida escena solo se quedó frío, palidecio rápidamente y cerró la puerta como si hubiera visto algo prohibido.
Volkov empujó bruscamente al chico causándole un golpe grande y salió corriendo de su casa.
Sus piernas eran considerablemente más largas que las de su pareja, sabía que lo iba a alcanzar fácil.
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