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Cuando decidieron empezar a trabajar como sapos para el Superintendente Conway jamás pensaron que llegarían a más que eso.
Pero hey, ahí estaban, en su primer día como alumnos del cnp. Si bien a Gustabo no le hacía especial ilusión aquello se sentía sinceramente feliz de ver a Horacio con esa sonrisa tan deslumbrante.
H.- ¡Anímate perla! Es nuestro primer día combatiendo a los malos. Los vamos a hacer comer picha, ¿a que si?-. Pregunto alegre
G.- Claro osito-. Respondió no muy seguro
Su primer día se animo cuando les tocó hacer patrullaje y se la pasaron cantando a todo pulmón aquellas canciones que pasaban por la radio. Amaba estar en binomio con el de cresta, se sentía como un puzzle que encajaban a la perfección. Sin él se sentía incompleto, pero juntos eran dinamita.
[...]
Los días se hicieron semanas y las semanas meses. Ahora mismo llevaban 4 meses como alumnos y Gustabo cada vez se sentía un poco más desanimado.
En un principio todo era color de rosas, patrullaba junto a su amigo, hacían papeleo, atracos, todo juntos. Pero con el pasar del tiempo los agentes empezaron a tener preferencia por el carismático chico de cresta y lo invitaban a beber o a estar junto a ellos todo el tiempo.
Y crean o no al rubio le dolía ver como se quedaba de lado...
J.- Alumno Garcia venga a mi despacho-. Se oyó por la frecuencia de radio y el chico bufo.
G.- Agh, 10-04 en camino-. Apenas iba a morder un delicioso donut cuando lo interrumpió, joder.
Subió de mala gana las escaleras y al llegar al despacho entró como si fuera suyo, sin tocar.
J.- ¡Pero que coño haces capullo! Llama antes de entrar como su fuera tu puta casa-. Espeto molesto y Gustabo simplemente asintió y se sentó frente el.
G.- Para que me llamabas super? Me va a ascender, a que siii-. Lo último no sonaba a pregunta si no más bien a afirmación. Conway solo se echo a reír como loco.
J.- Llevas cuatro putos meses como alumno Gustabo, no te vengas arriba. Te llame para saber que coño te pasa...
Gustabo lo miraba confundido, según él no le pasaba nada.
G.- ¿Qué me pasa? Pues no lo sé, ¿a qué se refiere viejo?.
J.- Me vuelves a llamar viejo y te degrado a parquimetro andante. Y me refiero a que te paseas por comisaria como cachorro abandonado, llevas más de un mes de esa forma-. Por fuera se lo notaba indiferente, más por dentro estaba genuinamente preocupado.
G.- Oh... yo pues, nada ya sabe lo de siempre. Aquí no tengo amigos y los compañeros me quitaron al único que tenía. Supongo que eso me tiene un poco mal-. Se sinceró ante su mayor, no sabia el porqué pero le transmitía cierta aura de confianza.