True Love

35

Narra Seoyeon

HeeJin no deja de llorar, los gemelos hace mucho se había dormido. No quisieron dormir con sus primos, después de hablar con su padre quedaron tristes, por lo cual no se quieren despegar de mí.

Tome una de las camisas de Jimin y se la puse en la mano de Hee a ver si logro calmarla, pero nada. Le había escrito a Jimin a ver si podía llamarla para cantarle, pero no me respondió. Tal vez se quedó dormido o sigue ocupado con lo de su padre.

Arropo a los bebés y con cuidado y dejo unas almohadas a su alrededor y salgo de la habitación Para ver si con un poco de aire se tranquiliza.

El aire es fresco, al aun estar en invierno no hace tanto calor. Me siento en una de las sillas que están cerca a la piscina y acerco a Hee a mi pecho logrando que se calme un poco.

—Ohh perdón, pensé que no había nadie.

—No está bien, solo salí para calmar a HeeJin

—Sí, la oí llorar desde hace rato.

—Lo siento, es primera vez que se separa de su padre por tantas horas. Creo que lo extraña.

—No tranquila, ¿No puede dormir si él no está?

—No, necesita sentir su calor u olor para hacerlo, pero esta vez con la camisa no funcionó.

Él asiente levemente, alza su mirada y se conecta con la mía, le doy una leve sonrisa y vuelvo a ver a Hee, la cual aún sigue comiendo.

—Seoyeon, ¿Él te hace feliz?— pregunta con su voz entrecorta.

Yo vuelvo mi mirada a él —Sí, soy feliz con él, en un buen chico, tiene unos sentimientos muy puros y hermosos. No he conocido a alguien como él.

—Seoyeon, yo de verdad lo siento, no quise lastimarte... Yo te amo... Aún lo hago, eres el amor de mi vida...— dijo con sus ojos cristalinos.

—Jungkook... Yo ya te perdoné, te perdoné por todo lo que me hiciste. Pero lo que tú hiciste no se le hace a la persona que dices ser el amor de tu vida.

Él tiene sus ojos rojos, lo conozco bien y sé que está conteniendo sus lágrimas.

—Tú me hiciste mucho daño, me dejabas sola en casa, llegabas tarde, no me decías a dónde ibas, los fines de semana también te ibas. No sabía nada de ti.

A este punto mi voz no quería salir más. Si bien ya supero a Jungkook, son hay cosas que duelen.

—Me mentiste, me engañaste. Llegaste a golpearme, me maltrataste física y psicológicamente. El que más me dolió de todo estos fue que me culparás de algo que yo no tuve la culpa

El pelinegro tiene ojos rojos, al igual que su nariz. Veo que algunas lágrimas brotan de sus ojos.

— Escucha Jungkook, tal vez ninguno era para el otro, tal vez eso que llamábamos amor, solo es cariño.

Este niega en repetidas ocasiones —perdóname Seoyeon... por...

—Yo ya te perdoné Jungkook, pero tienes que aprender a soltar. En ese tiempo aprendí que cuando la vida te niega algo es porque te tiene preparado algo mejor. Solo debes ser paciente, pronto llegará la persona indicada para ti.

Iba a continuar, pero mi teléfono comenzó a soñar. —Es mejor que descansen, ya es muy tarde— digo mientras me paro de la silla.