Mini Cornamenta:La historia de Halley Potter

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Dedico este capítulo a Tom_Riddle_Envidioso.
Gracias por tus sugerencias y comentarios ¡Espero que te guste el capítulo!
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- Ya hemos llegado-dijo Sirius estirándose mientras salía del coche. La última media hora de viaje había estado bastante bien, los niños se habían dormido y había podido pasar el resto del camino charlando con Remus sobre sus años en Hogwarts.

Miró los asientos de atrás para comprobar a los niños y no le sorprendió que la única despierta fuera Halley, Jean les había contado que Hermione se había quedado despierta de la emoción y Molly les había asegurado que Ron podría dormir hasta con una piedra de almohada.

Sirius sacó a Halley de su asiento mientras le hacía un gesto para que guardara silencio.

- Tenemos que estar callados para no despertarlos-le había dicho señalando a sus amigos.

Remus sacó a Hermione de su asiento y la cargó sin despertarla, Sirius hizo lo mismo con Ron. Halley cogió su peluche y los de sus amigos, sabiendo que los querrían cuando despertaran.

- Halley cielo-le dijo Remus llamando su atención-El parking está bastante ocupado por lo que te tienes que quedar muy cerca de Sirius y de mí ¿Vale? Los conductores no pueden verte hasta que crezcas un poquito más.

Halley asintió y prácticamente se pegó a la pierna de su padre Remus, sin querer que un coche la atropellase. El hotel no estaba muy lejos (había unos escasos quince metros de distancia) pero la pequeña Potter no pudo evitar sentir sus piernas un poco entumecidas tras la siesta.

Entraron al hotel conscientes de que habían dejado el equipaje en el coche, pero sabían que podían ir a por él tras dejar al pelirrojo y la castaña en la cama.

El vestíbulo del hotel era grande y bastante fresco en comparación con el exterior.

- ¡Buenas tardes!-dijo una señora bastante alegre tras el escritorio de recepción.

- Hola-la saludó Sirius-tenemos una reserva a nombre de Black-Lupin.

- ¿Una suite con dos camas dobles?-preguntó la mujer tras ojear un libro.

- Esa sería-dijo Remus sonriendo. Habían decidido que los niños compartirían cama pues aún eran pequeños y estaban seguros de que podrían sacar algunas fotos que resultarían vergonzosas en su adolescencia.

- Es la habitación 244, está en la novena planta-dijo entregándoles las tarjetas magnéticas que servían de llave de la habitación.-Tenéis unos hijos adorables.

- Gracias-contestó Sirius sin molestarse en aclarar que solo eran padres de Halley.

Se dirigieron al ascensor con las llaves de la habitación. Remus tuvo que cambiar a Ron de postura, el niño le estaba empezando a hacer trizas la espalda.

- ¿Quieres pulsar el botón Halley?-preguntó Sirius.

-¡Vale!-la niña presionó el botón contenta. El ascensor tardó unos segundos en bajar, cuando se abrió dejaron salir a una familia con un par de adolescentes y se metieron dentro.

Remus fue quien pulsó esa vez el botón ya que la pequeña no llegaba al número 9. 

Las puertas del ascensor se cerraron dejando a la familia atrapada en una caja de a penas dos metros cuadrados. Halley empezó a sentir que le faltaba el aire, miró las paredes de su alrededor con la sensación de que aquel ascensor se hacía más pequeño con el paso de los segundos...

Las puertas del ascensor se abrieron y la pequeña corrió hacia el exterior, Sirius y Remus se miraron algo extrañados ante aquello pero supusieron que se debía a que su hija tenía muchas ganas de llegar.