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Sirius recordaba a la perfección la primera vez que se conocieron.

Fue a mediados de quinto año y parecía el final de la amistad de los merodeadores, James y Remus se negaban a dirigirle la palabra por lo que le hizo a Snape, el hombre lobo nunca se había sentido tan traicionado como en aquel momento y el animago era incapaz de creer la falta de juicio de su amigo. Sirius se pasaba los días solo, cansado de que nadie lo perdonase, sin a penas comer y dormir... Fue entonces cuando lo conoció.

Recordaba su pelo y ojos castaños, esos que tan claramente había heredado de su padre. Siempre llevaba su mascota con él a todos lados, como si temiera separarse de ella.

También recordaba que después de encontrarse un par de veces y de contarle el enorme vacío que sentía sin sus amigos, este le ofreció una alternativa. En ese momento estuvo muy agradecido, gracias a esa solución sintió que el dolor constante que sentía en el pecho cada vez que sus amigos pasaban de él disminuía... Eso fue hasta que se le fue de las manos, fue entonces cuando supo que lo que estaba haciendo era peligroso pero también fue consciente de que aquello era como el tabaco, fácil de empezar pero difícil de dejar.

Pudo dejarlo un tiempo pero tuvo que recurrir a esa alternativa durante la guerra y después de la muerte de James y Lily. Sólo fue capaz de parar cuando Remus lo pilló, nunca antes vio a su novio tan pálido y con una expresión de tristeza tan profunda como aquella vez, hizo falta mucha terapia con una psicosanadora para solucionarlo.

- ¿Sirius?-volvió a preguntar el joven Scamander mientras se levantaba de la arena.

- Hola Dorcan-dijo Sirius tras salir de su ensimismamiento y levantarse de la arena.-¿Qué haces aquí?

- Me han dado un soplo de que han abandonado varias criaturas mágicas en una granja a las afueras, iba a recogerlas pero no pude resistirme a pasar por la playa. Ya sabes que siempre me ha gustado cómo...

-¡PAPÁ!-ese grito alertó a Sirius, por lo que dejó de escuchar a su antiguo compañero y se giró para ver cómo su hija corría hacia él. Cuando Halley llegó saltó a los brazos e Sirius.

- Hola Mini Cornamenta-dijo abrazándola.

- ¿Tienes una hija?-Dorcan no pudo contener su asombro.

- Soy Halley Potter-dijo la pequeña algo tímida, ahora de pie en la arena tomando la mano de su padre. Los ojos del Scamander fueron inconscientemente a buscar su cicatriz en forma de rayo, cosa que no pasó desapercibida para Sirius.

- Encantado de conocerte pequeña Potter-dijo tras dejar atrás el impacto de conocer a la Niña que Vivió.-Yo me llamo Dorcan Scamander.

Halley le sonrió y luego miró a su padre, que parecía analizar a Dorcan con la mirada.

- Papá Siri tienes que venir ¡Estamos haciendo el mejor castillo de arena del mundo! Tiene foso, puerta...-Sirius sonrió ante el entusiasmo de Halley, se alegraba de haber acertado en el destino de vacaciones.

- ¿Remus está ayudando?-preguntó sin poder evitar imaginar a su novio en bañador, lleno de arena... Desvió sus pensamientos de forma rápida, sabiendo que estaba delante de Halley y que debía controlarse-Ahora voy Halley.

- ¿Puedo ir yo también?-preguntó Dorcan-me gustaría saludar a Remus.

Sirius tuvo que pararse a pensar, su excompañero del colegio hizo que adquiriera una adicción peligrosa de la que le costó mucho salir, si Remus se enteraba de que fue él quien... Pero Remus no lo sabía, Sirius le contó únicamente a James cómo empezó.

Dejando a un lado ese tema Dorcan había sido un buen amigo, al menos según Sirius.

- Claro que puedes venir-dijo después de meditarlo un poco-A Remus le alegrará verte.

Los dos adultos y la pequeña Potter caminaron hasta donde estaban sentado Remus con Ron y Hermione, estos últimos parecían estar esperando a su amiga porque cuando la vieron llegar se levantaron y volvieron a coger las palas y cubos y fueron a seguir construyendo su castillo de arena.

- Mira a quién me he encontrado Remus-dijo el ojigris sentándose en la arena a su lado, dándole un beso en la mejilla.

- ¡Dorcan!-Remus estaba sorprendido pero no pudo evitar sentirse feliz, Dorcan fue una de las pocas personas que adivinó su condición de hombre lobo y, cuando eso pasó, en lugar de alejarse se ofreció a ayudarlo en lo que pudiera (como cogerle los apuntes cada vez que perdía una clase).

- Hola Remus-dijo sonriendo, habían sido amigos un tiempo en Hogwarts aunque cuando hicieron amistades en sus respectivas casas se distanciaron.

- ¿Qué te trae por aquí?-preguntó el hombre lobo.

- Criaturas mágicas, como siempre.-Dorcan no pudo evitar sonreír mirando a Remus, había sido su primer amor aunque esos sentimientos quedaron atrás hace mucho tiempo.

- Podrías comer con nosotros si quieres-dijo Remus-No nos supone ningún proble... ¡Ron no comas eso!-se levantó y fue hacia ellos lo lo más rápido que pudo.

Tanto Dorcan como Sirius no pudieron evitar reír al ver la cara de Remus cuando el cangrejo que iba a morder Ron unos segundos atrás le pellizcaba la nariz.

- Gracias por ofrecerme comer con vosotros pero tengo que irme-Sirius se sintió algo aliviado con esta declaración, no le guardaba rencor a Dorcan pero a su lado sentía que podía recaer-no puedo hacer esperar más a las criaturas-dijo poniéndose en pie, sacudiéndose la arena.-Espero que nos encontremos pronto.

- Podrías venir un día a nuestra casa-dijo Remus, que había vuelto justo cuando el magizoólogo iba a irse-Podrías contarle a Halley historias de Lily, tú fuiste su amigo mucho antes que nosotros por lo que seguro que le podrás contar varias cosas...

- Me encantará, envíame una lechuza con tu dirección.-dijo Dorcan sonriendo.

Los adultos se despidieron, aunque Sirius no pudo evitar sentirse un poco incómodo. Remus se habría dado cuenta de esto si no hubiese sido porque miró a los pequeños que tenían a su cargo.

- ¡Halley!¡Hermione!¡No podéis enterrar a Ron!

Al parecer los tres amigos se habían cansado de hacer castillos de arena.
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¡Hola!

Siento haber tardado en actualizar, acabo de empezar mi último curso y necesito estudiar el cuádruple (y también tengo que hacer miles de trabajos).

¿Qué os ha parecido? ¿Y qué os parece la nueva portada? Es obra de Lady-Darkling

Como me he inventado el personaje de Dorcan voy a dejar al final de esta nota algunas aclaraciones del personaje.

He pensado que podéis dejar en los comentarios preguntas que le haríais a los personajes de esta historia (a cualquiera que queráis) y podría poner un apartado en esta historia titulado Preguntas y Respuestas a los Personajes, pero para hacer eso necesito que preguntéis, no me quiero inventar las preguntas (también podéis preguntar sobre mi si tenéis curiosidad sobre la autora).

¡Espero que os haya gustado el capítulo!💕
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Aclaraciones sobre Dorcan Scamander:

Padres: Newt y Tina Scamander

Casa: Hufflepuf

Amigos: Lily Evans (durante Hogwarts), Remus Lupin (hasta segundo curso y momentáneamente durante séptimo), Sirius Black (brevemente durante quinto curso).

Edad: Veinticuatro años.

Profesión: Magizoólogo

Breve Historia: Entró a Hogwarts a los 11 años, conoció a Lily en el tren aunque nunca se terminó de llevar bien con Snape. Acabó en Hufflepuf e hizo amigos de su casa pero con el tiempo perdió el contacto con ellos ya que prefería dedicarse a los animales. Remus fue su amigo durante los primeros años pero se distanciaron. Conoció a Sirius en quinto y le ofreció una alternativa a su angustia (podéis dejar en los comentarios cuál creéis que es). Fue amigo de Lily Evans durante toda su estancia en Hogwarts pero acabaron distanciándose durante la guerra (Dorcan estaba en Estados Unidos estudiando criaturas).

(Si tenéis más preguntas dejarlas en los comentarios)

Mini Cornamenta:La historia de Halley PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora