❝Rude Love❞ ; HYERIM

13 ⧽ Trabajo en parejas.

°°°『🍒』

El hecho de estar sola no era nuevo para mí, y la actitud distante de Hyeju ya no me sorprendía. Pero Yeojin me hacía demasiada falta; Prácticamente estuvimos juntas la mitad de nuestras vidas, éramos como hermanas y no tenerla a mi lado era algo a lo cual me iba a costar acostumbrarme. Por lo menos volvió a ir al colegio, y eso me permitía verla más seguido, aunque no era como antes.
A su vez, Hyeju se volvía cada día más fría conmigo. No entendía el por qué, pues por un momento llegué a creer que no le caía tan mal, pero me equivoqué.

Como era de costumbre, la profesora de historia entró al salón colgando los mapas de Asia de un pequeño gancho que había sobre el pizarrón. La saludamos como corresponde e inmediatamente el salón se silenció en cuanto comenzó a hablar.

—Muy bien, —dijo casi una hora más tarde, a sólo tres minutos de que suene la campana— les tengo una sorpresa.

Todos comenzaron a cuchichear entre sí por lo que ella tuvo que golpear fuertemente contra su escritorio para que se callen.

—Es un trabajo en pareja sobre el tema que estuvimos viendo. Quiero que den una exposición oral el próximo lunes, pueden traer láminas o lo que sea necesario para su clase.

Vi como algunos se ponían felices y otros se quejaban ante la propuesta.

—Pero hay una condición. Yo eligiré las parejas. —ahora sí todos se quejaron— ¡Hagan silencio! no importa cuánto se quejen porque ya lo decidí. Haremos esto rápido: Im Yeojin y Yang Jeongin. Choi Soobin con Han Jisung. Yabuki Nako y Ning Yizhuo. Felix te toca c...

Así fue nombrando uno por uno. Como dije, algunos estaban conformes mientras que otros preferían golpearse la cabeza contra la pared.

—¿Quedó alguien sin compañero?

Tímidamente levanté la mano, sorprendiéndome al ver que alguien más la había levantado también.

—Oh, bien. Entonces Choi Yerim y Son Hyeju. Terminamos.

'Increíble...'

⟿

Mis manos sudaban. Habíamos quedado de encontrarnos en la biblioteca el jueves por la tarde así que me senté en un banco a esperar que ella llegara. Miraba el reloj de mi muñeca una y otra vez, viendo como las pequeñas agujas se movían. ¿Habría venido muy temprano quizás?...
Finalmente dieron las seis de la tarde, Hyeju ya debía de haber llegado. Me levanté de mi asiento y recorrí los pasillos hasta llegar a la entrada. Y allí estaba, apoyada contra el marco de la gran puerta, con sus jeans rotos y su camiseta negra... se veía tan linda con tan poco. Le hice una seña con la mano para que pudiera verme y ella se acercó.

—Hola. —dije cuando llegó a mi lado— Reservé una mesa en el fondo, ¿vamos?

Asintió y ambas nos dirigimos a dicho lugar. La mesa se encontraba bastante alejada del resto. Cada vez que venía la elegía porque me parecía muy tranquila y perfecta para concentrarme.

—Muy bien. Estuve buscando algunos libros de geografía e historia y emm... no sé por... por donde quieras empezar...

—Haz como quieras, me da igual.

—P-pero el trabajo tiene que ser de a dos... —reclamé.

—Está bien. Si necesitas ayuda en algo sólo dime.

Se recostó en la silla y puso uno de los libros sobre su cara. Me quedé perpleja. No era algo nuevo que me usaran para hacer todo el trabajo, y aunque sentí feo que precisamente ella también lo hiciera, sinceramente no podía enojarme con ella por eso. Tomé una de las enciclopedias y comencé a leer.

Debió de haber pasado una hora y media, y ya me ardían los ojos del cansancio. Miré a Hyeju; Se veía muy tranquila mientras dormía. Realmente se notaba que tenía muy poco interés por, bueno, por todo. Lentamente me acerqué a ella y quité el libro de su cara. Mi corazón no pudo evitar acelerarse al ver lo tierna que lucía. Un leve bostezo se escapó de mi boca.

—Quizás deberías dormir también. —me dije por lo bajo— Sólo unos minutos...

Tomé asiento en mi silla, usé mis brazos de almohada sobre la mesa y mis ojos comenzaron a cerrarse de a poco, hasta que perdí la consciencia.