BAJO LA LUZ DE LAS SOMBRAS

SE BORRA EL PRIMER PECADO

Tras cuatro meses de búsqueda los demonios altivez y superioridad subordinados de la avaricia dieron con el escondite de nuestros protagonistas, pronto la batalla entre subordinados de ira y soberbia tendría lugar.

Ira y soberbia se encontraban frente a la dama de seudónimo la virgen de lágrimas amargas.

-Ante mi primer pecado-

La dama de cabellos blancos se inclinó frente a la líder.

-Tu incompetencia ha quedado demostrada ante todos querida Stella, me temo que debemos prescindir de vuestro servicio, soberbia, puedes hacer con ella lo que desees, mientras termine por ser borrada-

Dijo la dama dejándoles a solas, luego la dama miró ofendida a soberbia.

-Espero sepas que tengo una propuesta para ti, puedo dejar que te marches en paz y te pierdas, mientras me entregues a tu hija y a la cazadora, como quimeras las necesitare para seguimiento y evolución-

La misma lo miró con enfado y se puso de pie.

-Te podría dejar a la cazadora, pero jamás a mi hija, ¿Cómo puedes llamarse parte de la iglesia si experimentan de esa manera? -

Una detonación de un arma resonó por el pasillo, el cuerpo inerte de Stella cayó al suelo, Loona observó todo en silencio, dirigiéndose rápidamente con Octavia.

-Debemos irnos ahora-

Dijo mientras observaba a Octavia quien era ignorante de la situación actual de su madre.

-No podemos irnos sin ordenes de mi madre. -

En ese momento Loona tomo a Via en brazos y salto con ella.

-Cuando estemos a salvo, te aclaro la situación. –

La joven habría tardado varios días en llegar a un lejano poblado en estados unidos, ya que lo habría hecho sin uso del efectivo o demás, pronto divisó en aquel lugar a un joven quien parecía encantado con los caballos, bajó suavemente a Vía con cuidado de no lastimarla.

-Oye tú, danos un lugar donde ocultarnos, es una orden. -

El joven parecía reconocer a la dama de cabellos plateados.

-Loona, querida has vuelto-

Dijo abrazándola con fuerza mientras la misma se extrañaba de este tipo.

- ¿Blitzo? -

El mismo se separó y la miró con reproche.

-La o es muda ¿Cuántas veces tengo que decirlo? –

Octavia se encontraba caminando muy lejos, lo que menos querría era quedarse estancada con la razón de la separación de sus padres, pronto Loona se percató volviendo al lado de Octavia.

-Espera ¿A dónde vas? -

La misma le señalo a Blitzo.

-Lo siento, pero no voy a tolerar esto, me has traído hasta aquí sin una explicación, nos matarán sin duda por abandono, ¿Qué le diré ahora a mi madre? -

Loona la enfrentó, no podía ocultarle lo sucedido.

-A tu madre la asesinó Zestial, la líder ordenó que se deshiciera de ella, el tipo le ofreció su vida a cambio de la tuya y desistió por ello mismo la mató, si nos quedábamos allí nada bueno nos hubiere pasado, además que por obvias razones no quiero seguir siendo conejillo de indias, allá tú si quieres volver a ese infierno-

Dijo molesta, ahora sin su madre, solo tenía la compañía de su amiga Loona, ya que posiblemente ahora su padre la odiaría.

Por otra parte, se encontraba soberbia contando a sus subordinados,

-Bien, Cherry bomb y tú, nuestra recién reclutada Helsa, necesito por favor vayan a visitar a nuestra amiga la vampiresa Magne, tú también las acompañaras Kattie Killjoy, quiero la cabeza de esa zorra en una bandeja de plata, Milky y Loopty Goffty irán por las que recientemente dejaron el recinto, pero a esas si las quiero vivas, espero no me defrauden o tendré que matarlos antes que hagan lo mismo mis superiores conmigo.

Mientras tanto en Costa Rica nuestros protagonistas se encontraban paseando en el salón del hotel, tantos turistas estrafalarios se encontraban por aquellos lugares.

-Buenas noches hermosa Charlotte, veo que tu novio te dejó sola unos minutos-

Dijo Josh acercándose a la joven dama con galantería.

-Sí, pero no demora, está comprando unos boletos iremos a Tennesy, Stolas tiene conocidos en aquellos rumbos, asi que nos quedaremos con ellos un tiempo, además que Stolas asegura que la inquisición debe estar camino a este lugar. -

El mismo se quedó bastante cerca de la joven rubia.

- ¿Le han dicho que es usted muy hermosa?, ese joven... -

Antes que continuará Charlotte le interrumpió.

-Ese joven no le hizo justicia a su descripción, si ya lo he oído muchas veces-

En ese instante, Josh acarició el rostro de la joven con el dorso de la mano.

- ¿Puede que sea el único que no piense que seas exuberantemente hermosa, ¿se lo has preguntado alguna vez? -

La joven negó de manera calmada.

-Para nada, no debo sacar conclusiones que él no me haya conjeturado, además que sabemos que tal vez él no requiera de simples palabras para demostrarlo, ha dejado todo por estar a mi lado-

El mismo sonrió de manera irónica.

-Claro que lo haría, una joven, hermosa, carismática y adinerada, digo su anterior compromiso era todo menos amor, ¿no ha pensado que este con usted por su estatus social y económico?, además que tendrá su vida asegurada si sigue atado a ti. -

La duda entro en la mentecilla de la hermosa rubia.

-No has perdido tu estatus por estar errante, seguro eres una mejor opción sin dudarlo para alguien tan interesado como ese tipo, solo piénselo querida dama, además que ya le has entregado tu pureza, creo que no tiene nada él que perder. -

Dijo para dejarla a solas en medio de la duda, mientras Angel observaba todo desde lejos, era algo lógico que Josh quisiere cortejar a una mujer tan hermosa como Charlotte y sabiendo de donde venía era obvio que no se podía confiar en el fácilmente, por lo que el joven de facciones delicadas, decidió aventurarse a hablar con Charlotte, pero su andar fue detenido al ver que el sonrisas como él le decía invitaba a la joven a bailar, pronto la serenata de Schubert comenzaba a sonar, mientras Alastor guiaba a la joven quien parecía un poco más recelosa, sintiéndose descubierta con la guardia baja, la mirada severa color rubí no pasaría desapercibida por Alastor.

- ¿Qué ocurre en tus pensamientos que perturba vuestra serenidad mi querida vampiresa? -

La joven se encontró con los hermosos almendrados ojos del joven trigueño.

- ¿Por qué estás conmigo? -

El joven se ruborizó inmediatamente, aun no se acostumbraba a desvelar aquellos sentimientos por muy recíprocos que fueran estos

- ¿A qué viene la pregunta mi hermosa dama? -

La misma detuvo el baile inmediatamente.

-Tu antiguo compromiso fue por interés, ¿Cómo sé que lo tuyo conmigo va por amor y no por la misma razón? -

El mismo la observó bastante ofendido ante la acotación de aquella hermosa dama.

-Pensé que ya lo sabías querida-

Dijo suavemente, aquella duda lo había herido, pero jamás se lo demostraría.

-nada me asegura que me amas Alastor-

El mismo negó con la cabeza. 

-Vaya confianza me tienes querida mía.