ʚ• Capítulo 7 •ɞ

41.4K 4.5K 537
                                    

El pequeño cachorro coloreaba el dibujo de un gatito, mientras su padre se encargaba de realizar algunas llamadas y ordenar el horario del CEO Park.

Hace tres días que Daehyun llegaba a la empresa en las tardes, no pudo hablar con el omega bonito porque tanto él como su padre estaban muy ocupados, solo se quedaba con Hoseok, y no lo malentiendan, al cachorro le cae muy, pero quería convivir con Jimin.

Quería poder relacionarse más con el omega al que veía como una perfecta persona para ser su otro padre.

A pesar de su pequeña edad, Daehyun era un cachorro muy inteligente y aunque no le gustaba cuando su padre llegaba con extraños olores, el de Jimin le encantaba y le ayudaba a dormir.

Así que siendo lo menos ruidoso posible, caminó a pequeños pasitos hasta llegar a la enorme puerta, regresó la vista y para su buena suerte su padre seguía concentrado en el teléfono.

Alcanzando la perilla de la puerta la giró, entró con semblante un poco tímido, y vio al omega rubio concentrado en su computadora.

—Buenas tardes.

Saludó Daehyun acercándose aún más. Jimin lo miró enternecido, sabía que el pequeño estaba afuera, pero en realidad la sobrecarga de trabajo era enorme: ordenes, contratos que firmar, despidos, reuniones y sabía que si hablaba con Daehyun no se iba a querer despegar de él.

Nuestro bebé.

¡Nuestro bebé nos vino a ver!

Rodó los ojos por la exagerada emoción de su lobito, aunque en el fondo él estaba muy entusiasmado.

Girando su silla para que el cachorro tenga espacio, lo invitó a sentarse en su regazo.

—Hola mocoso.

Sonriendo con esa típica mueca tierna, Daehyun tomó lugar entre las piernas del omega, y escondiéndose en su cuello, aspiró el delicioso aroma que desprendía.

No podía evitarlo.

Le gustaba como se combinaba con el de su padre.

Era un aroma a hogar.

—¿Está muy ocupado? —preguntó sintiendo las caricias de Jimin sobre su espalda—. Mi padre me dijo que no lo molestara.

Debemos hablar seriamente con nuestro alfa.

No es nuestro alfa. —Reprendió. Pero su lobito le dio la espalda.

Tan dramático.

¡Ya! Apresúrate y conquístalo.

—Estoy muy ocupado —hizo una pausa para pensar mejor en lo que le diría—. Pero puedes venir cuando quieras, solo si prometes no hacer mucho ruido.

Levantando su rostro, asintió múltiples veces.

—¿Puedo quedarme aquí? —preguntó indicando las piernas de Jimin.

Ahora fue el omega quien movió su cabeza en afirmación.

Mientras Jimin se dedicaba a revisar contratos en la computadora, Daehyun estaba escondido en el cuello ajeno aspirando el delicioso aroma y en absoluto silencio para no molestar.

Ambos sonrieron con sus corazones regocijantes de alegría por la compañía del otro.

No se dieron cuenta como un alfa asustado caminaba de un lado a otro fuera de la oficina, hasta que pudo ver por el vidrio translúcido de la ventana esa hermosa escena.

Entonces, esas dudas que Min Yoongi tenía sobre el tumulto de emociones que lo acorralaban lograron despejarse, esa imagen de ambas personas tan tranquilas también logró calentar su corazón y hacer tomara una decisión.

°.•*¨♡ Alpha and his Puppy ♡¨*•.° YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora