°.•*¨♡ Alpha and his Puppy ♡¨*•.° YoonMin

ʚ• Capítulo 18 •ɞ

—Mi padre alfa es muy dulce.

En ese momento se encontraban en el auto, Yoongi conducía a la casa de los padres de su omega, mientras Jimin le revelaba algunos datos de su familia.

Habían pasado dos semanas desde que lo marcó y era hora de enfrentar a sus suegros. Ellos eran personas adultas, tomaban sus propias decisiones, pero era desconcertante, ya que, él era un alfa desconocido ante la familia Park y el omega tenía una marca reciente.

—Yoonie, el bebé quiere hacer pipí. Para en la siguiente gasolinera

Acatando la orden de su omega, Yoongi estacionó el auto y esperó a que Jimin y Daehyun regresaran del baño. Una vez los tres en el auto, retomaron el camino a la casa de los Park.

—No puedo creer que Hobi está embarazado.

—Mis padres están felices —comentó—. Le pidieron dejar a Taehyung y vivir con ellos.

Yoongi se carcajeó, tal vez eso le esperaba cuando su omega estuviera en cinta. Llegando a la residencia, la pequeña familia descendió del auto y entrando, fueron recibidos por el omega mayor.

Cabe recalcar que Jimin solo les comentó que tenía que presentarles a alguien muy importante.

—¡Mi bebé! ¡Quince días desaparecido, Park Jimin! —reclamó Seokjin—. Oh... ¿Por qué hueles a alfa?

Separándose del caluroso abrazo, Seokjin notó como Jimin mostraba su marca, orgulloso.

—¡¿Tienes pareja?! ¡¿Desde cuándo?! —escandalizó observando al alfa detrás de su hijo y al pequeño cachorro, los recordó de la empresa.

—De eso quería hablar.

—Nam está en el comedor, vamos.

Cuando llegaron, los ojos de Namjoon se posaron directamente sobre el cuello de su hijo.

—Bueno... Hagamos esto rápido —dijo acercándose a Yoongi—. Él es mi alfa, Min Yoongi y este cachorrito bonito —apuntó a Daehyun, acariciando su mejilla—. Es nuestro bebé.

Regresando a observar a sus padres, se encontró con una pequeña sonrisa por parte del omega, y una mirada de asombro en el rostro del alfa.

Di algo.

"Sabes que a penas tuve el valor para confesarme a Jimin".

Muévete, Yoongi.

—Yo... estoy totalmente perdido por Jimin —dijo—. Tal vez me falta mucho para ser merecedor, pero prometo mejorar y convertirme en una persona digna de su amor, en todo sentido.

—Y yo también quiero mucho a Minie —añadió el cachorro.

—Oh Yoonie, eres un amor —Seokjin se acercó a ambos—.  Y este pequeño, una ternurita.

Abrazó a su hijo, luego a su yerno y  finalmente al cachorro, mientras Namjoon se acercaba con paso firme.

—Minie —se dirigió a su hijo—. Nunca has sido alguien predecible, pero me alegra que hayas encontrado a tu persona —inquirió acercándose—. Bienvenido a la familia, muchacho.

Las pequeñas encías de Yoongi aparecieron en una sonrisa, se desvanecía de los nervios. Todos terminaron compartiendo un abrazo para luego disfrutar de la cena.

Una semana transcurrió desde que Hoseok se mudó al departamento de su alfa, y puede afirmar que es la mejor decisión que ha tomado, aunque extraña mucho a su hermano, el omega le prometió visitarlo todos los fines de semana.

—¿Será que tu papi se olvidó las llaves? —habló acariciando su vientre.

Cuando preparaban la cena, un antojo de fresas con jalea de maní lo atacó, así que Taehyung como buen alfa que es, salió a conseguir lo que su omega necesitaba.

Levantándose del cómodo sofá, caminó hasta alcanzar la puerta y abrirla. No le agradó que la persona al otro lado, era Choi Hye Yin, la madre de Taehyung.

—Buenas noches, señora —saludó mostrando una sonrisa forzada.

Los ojos de la elegante mujer lo escanearon, observando la marca, parecía que los chismes de la empresa eran ciertos.

—¿Qué haces aquí? —preguntó enojada—. Pensé que te quedó claro, no te quiero cerca de mi hijo.

Hoseok siempre fue una persona pacífica, una vez ya acató las órdenes de Hye Yin, de cierta forma la mujer le intimidaba, pero ahora confiaba en su alfa.

Taehyung le había demostrado que no estaba jugando con sus sentimientos, no era el mismo ingenuo de hace algunos  meses atrás, así que tomando valentía, se enfrentó a la señora.

—Su hijo es mi alfa, me marcó y estoy esperando un cachorro —expresó intentando que su voz suene firme, sin demostrar en realidad cuán nervioso se encontraba—. No hay nada que usted pueda hacer.

La señora parecía que quería golpearlo, su insolencia era totalmente inaceptable, pues Hye Yin siempre recalcaba que no estaban al mismo nivel.

—Tú... Omega ofrecido.

—Basta Hye Yin —la fuerte voz de Taehyung se impregnó en el lugar—. No te quiero aquí.

La mujer dio vuelta y miró a su hijo.

—Este omega es un insolente.

—Largo de nuestro departamento.

El alfa sabía lo obstinada que era su madre, así que tomando al omega de la mano, lo llevó lejos de la puerta para poder cerrarla, dejando a Hye Yin con las palabras en la boca.

—¿Estás bien, Hobi bebé? Te juro que hablé con ella para que no te moleste —dijo con pena—. Lo siento bebé.

Hoseok observó la carita preocupada de su alfa, hace un momento parecía enojado, con sus labios y cejas apretadas, pero ahora solo había una mirada de un cachorrito regañado.

—No pasa nada, cielo —se acercó para picotear sus labios—. Aunque, aún tengo mi antojito.

Alzando la mano y sonriendo leve, Taehyung mostró las cosas sostenidas por una funda transparente.

—¡Mi alfita es el mejor!