°.•*¨♡ Alpha and his Puppy ♡¨*•.° YoonMin

ʚ• Capítulo 19 •ɞ

—Daehyun, quédate ahí —pidió tomando su celular. Quería una foto, el cachorro estaba recostado en la cama, él se había levantando al baño y suponía que Yoongi estaba en la cocina—. Sonríe bebé.

Jimin amaba tomar fotografías de Daehyun, se visualizaba él con unos años más, sosteniendo el álbum de fotos con su alfa abrazándolo y recordando cada momento de su pequeño cachorro.

—Tan bonito —halagó viendo la foto—. Tengo que cambiarte.

Jimin casi todas las noches se quedaba en el departamento de Yoongi, veían alguna película y ayudaban a Daehyun con sus deberes, luego iba a la habitación para compartir una sesión de besos, en algunas ocasiones, el cachorro llegaba pasada la media noche, tenía miedo y quería dormir con sus papis.

Al siguiente día, Yoongi se encargaba de preparar el desayuno, mientras él vestía a Daehyun.

Cuando terminaba, se colocaba rápidamente su traje y se arreglaba, incluso Yoongi le había dejado gran parte del clóset para sus pertenencias.

Más tarde caminaba hasta la cocina para compartir un beso con su alfa, y luego disfrutaban de la comida.

Se plantearon la posibilidad de mudarse juntos, pero necesitaban una casa más grande. Habitaciones para sus futuros hijos, un patio donde Daehyun pueda jugar y un despacho para cuando el omega tuviese exceso de trabajo.

Para Jimin fue fácil conseguir la casa, pero Yoongi se mostraba apenado.

Su alfa era un hombre con un aspecto físico fuerte, pero también era sensible, un poco sumiso en ocasiones y fácil de leer. Jimin podía observarlo a los ojos y saber que algo lo molestaba o entristecía.

Cuando hablaron sobre la casa, Yoongi le expresó que lo que más quería era mudarse con él y hacer su vida de pareja, pero también deseaba colaborar con los gastos más grandes, por eso le pidió esperar hasta que pueda juntar un poco más de dinero.

Jimin aceptó, no quería por ningún motivo que su alfa se sintiese insuficiente. Es por eso que la mayoría de veces el omega se quedaba en el departamento de Yoongi, además facilitaba la llegada a la escuela del cachorro y a sus trabajos.

—Pórtate bien, mi amor.

El cachorro los abrazó a ambos, dejó un besito en sus mejillas, y entró a su escuelita, cuando desapareció de la vista de sus padres, Yoongi tomó la mano de su omega para caminar hasta el auto y dirigirse a la empresa.

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—¿Hay muchas cosas?

—Algunas reuniones, contratos que firmar y proyectos que aprobar —respondió Yoongi a su interrogante mientras caminaban, estaban por llegar al despacho.

—Tal vez podría usted hacer un espacio, es que tengo una cita con mi alfa —pidió con tono juguetón.

—No hay problema, en cualquier momento puede encontrarse con su alfa, despejaré la agenda.

Yoongi observó su escritorio, ni Hoseok ni Taehyung habían llegado aún, posiblemente faltarían, pues los síntomas del embarazo estaban atacando al omega sin piedad.

Yoongi sintió el aroma de su omega chocar directamente contra su nariz, cuando conectaron sus miradas, los ojitos de su omega estaban sorprendidos, el aroma se potenceaba poco a poco, podía sentir la excitación que palpaba en el aire y cuando Jimin caminó hacia su silla giratoria, agarrándose inútilmente del escritorio para no caer, con su trasero respingón luciendo esos pantalones negros totalmente mojados, el alfa sabía lo que sucedía.

El celo de su omega.

Oh Jimin, lo castigaría por ser tan despistado.

—Alfa —llamó jadeando.

Se había recostado en la silla e intentaba desabrochar sus pantalones. Cuando lo logró, torpemente jaloneó hacia abajo, su mano viajó por la abertura de estos, tanteó rápidamente su pene, antes de delinear con sus dedos su entrada mojada, por momentos se alzaba para despegar su trasero de la silla y tener libertad para acariciarse con más ansias.

Yoongi tenía un problema serio en sus pantalones, la imagen de su omega excitado y comportándose de esa manera tan sucia era un estímulo directo para su entrepierna, pero tenía que pensar bien antes de hacer algún movimiento.

Pero cuando vio como su omega se giró sobre la silla, quedando con su pecho recostado sobre el respaldar, sus rodillas encajadas en la tela acolchonada del asiento y con su trasero alzado en su dirección todo se fue al carajo.

Para ese momento, el omega había metido un dedo en su agujero, dilatándose, el lubricante natural chorreando por montones. Sollozaba mostrando su sufrimiento por no poder encontrar ese punto que lo hacía ver estrellas.

Yoongi se acercó hasta el omega, con su gran mano acarició las nalgas desnudas, antes de tomar el pequeño dedo, y llevarlo directamente a la boquita entreabierta, haciéndolo probarse.

—¡Alfa! Mgh~.

Reemplazó con su propio dedo llenando el vacío que Jimin empezaba a sentir en su agujero. Sintió el apretado interior, el lubricante estaba haciendo un magnífico trabajo, pues se deslizó sin problema.

Mientras encontraba ese punto que haría a su omega delirar, Yoongi tomó con poca dificultad el teléfono, marcando a recepción.

—Que nadie suba al último piso, cancela toda la agenda del CEO y comunica que quien se acerque a la oficina será despedido.

Colgó rápidamente antes de escuchar la respuesta, y lanzó el teléfono sin tener cuidado.

—Ahg~. ¡Alfa! O-otro dedo. Ahg~. Duele. Quiero más.

Yoongi observó como su dedo penetraba al omega, el sonido que hacía al golpear el lubricante era tan lascivo. Complacería a su omega y luego vería como sacarlo de la empresa.

Pero por el momento, disfrutaría del delicioso hombre que tenía en frente.