ʚ• Extra 3 •ɞ

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VHope.

Park Taehyung nunca había experimentado verdadero interés por los o las omegas. Se podía catalogar como un hombre que no buscaba más que una aventura de una noche.

Un día llegó a la empresa y lo encontró, un omega solo centímetros más bajo, rubio y un poco tímido.

—Él es Jung Hoseok —presentó la secretaria que en ese entonces trabajaba para su hermano—. Su nuevo asistente.

El omega saludó con una reverencia, Taehyung se dio cuenta que estaba nervioso porque intentaba evitar el encuentro de sus ojos y por la forma en que sus manos se movían.

No fue difícil adaptarse a trabajar juntos, disfrutaba de la tranquilidad que el omega le transmitía, su aroma era realmente delicioso.

Lo que le molestaba era que Hoseok únicamente se dirigía a él por temas de trabajo.

Absurdo, considerando que ese era el motivo por el que fue contratado.

Taehyung ansiaba que esas pequeñas sonrisas sean dirigidas hacia él. Anhelaba un poco de atención, un poco de interés, pero también se sentía cohibido por la profunda necesidad que nacía en su pecho.

—¿Has considerado que sea tu pareja?

En una charla con Seokjin, mientras acariciaba sus cabellos en un intento por calmarlo, esa noticia fue directamente a su cerebro dejándolo pensativo.

Lo había considerado, pero su corazón dolía al pensar en el profundo desinterés que el omega mostraba hacia su persona.

Taehyung intentó acercarse, volverse su amigo, parecía un cachorrito detrás de su dueño y eso conmovía a Hoseok, pues aunque al principio se mostraba reacio ante la actitud de su jefe, poco a poco cedió, haciendo oídos sordos a los comentarios maliciosos que se regaban por la empresa.

Y es que él tampco podía evitar lo evidente.

Supo que era su destinado el mismo día en que lo conoció y eso lo asustaba. Hoseok nunca tuvo una vida fácil, desde que sus padres murieron trabajó para poder sobrevivir junto a su hermano y en sus tiempos libres estudiaba en una universidad a distancia, siendo muy consciente que él y Taehyung provenían de mundos totalmente distintos.

Y eso se lo dejó claro la madre biológica de Taehyung. Justo ese día llegaba del cine, el alfa no pudo subir hasta su departamento porque sus padres le llamaron. Cuando llegó, en la puerta estaba recargada una elegante mujer.

Jung Hoseok nunca esperó escuchar tantas groserías y denigraciones hacia su persona. Esa mujer era realmente cruel, y se sentía mal porque pensaba que tenía razón.

Entonces, decidió alejarse totalmente de Taehyung, eliminó las salidas, las sonrisas en el trabajo y los pequeños besos que compartían cuando nadie los veía.

Porque sí.

Ellos había avanzado tanto en su relación que compartieron un sin número de caricias en los brazos del otro. Hoseok lloraba todas las noches recordándose que no era suficiente para estar con un alfa como Taehyung, evitando a toda costa enviar un mensaje pidiéndole que lo perdone y que regrese con él.

La situación de Taehyung no era muy diferente, siempre iba aldepartamento de Jimin o a la casa de sus padres, y para disipar un poco su tristeza se refugiaba en los brazos de ambos omegas, quienes lo escuchaban dejando que sus aromas lo tranquilicen.

Fue Jungkook quien le comunicó al alfa lo que sucedía y este solo pudo explotar de ira. Hye Yin se empeñaba en hacer su vida miserable, pero por ningún motivo lo iba a permitir.

Después de terminar su jornada de trabajo y de observar como un decaído Hoseok recogía sus cosas para regresar a su casa, caminó hasta él y lo abrazó.

Habían anhelado tanto un pequeño toque, lágrimas descendieron por los ojitos del omega, y se permitió disfrutar de esos cálidos brazos, sin oponerse, aunque sea por unos cortos minutos.

—Sé todo lo que te dijo Hye Yin y supongo que no vas creer en mí si no te cuento todo lo relacionado con esa mujer.

Hoseok lo miró con nerviosismo, pero se quedó a escuchar como la omega había sido una mala madre y mala persona. Se sintió tan mal por todo que terminó dejando escapar grandes sollozos.

—No te merezco —dijo, sus puños se aferraban al saco del alfa, demostrando que lo que menos quería era alejarse.

Taehyung se concentró en besar suavemente esos labios en forma de corazón, esperó a que se calmara y le prometió que estarían juntos, pondría una marca en su bonito cuello y lo amaría hasta el último día de su vida.

[🐯 ♡ 🐿]

El alfa no pudo evitar que una sonrisa naciera en sus labios al recordar la historia con su precioso esposo, se levantó de la cama y caminó hasta la siguiente habitación.

Encontró a Hoseok cambiando los pañales del niño de tres de años que dormitaba con su dedito siendo succionado por su boca.

—Hoy me tocaba a mí.

El omega dio un brinquito del susto.

—Bobo —murmuró ante la sonrisa en el rostro del alfa, quien se acercó a besarlo—. Ayer llegaste muy cansado de la empresa, no quería levantarte —se zafó del agarre para continuar atendiendo al pequeño.

Fruto de su amor nació un precioso niño, Daehwi, idéntico a su padre alfa.

Un verdadero monstruito que era adorado por ambos padres.

—Seokjin dijo que podría cuidarlo, sabes que no quiero que vuelva a ir a la guardería.

Taehyung asintió, su hijo había contraído una fuerte infección producto de mala atención, y desde ese momento lo dejaban a cargo de sus abuelos o de Jungkook.

—Míralo, es tan dormilón como tú.

El alfa apuntó hacia el pequeño, quien intentaba cerrar sus ojitos para no despertar por el ruido que provocaba la conversación de sus padres.

—¡Alfa! —chilló, provocando que el bebé despertara—. Te quedas a cargo por molestoso.

Hoseok escapó de ahí, dejando a su esposo con un pequeño bebé de mal genio.

Lo último que escuchó fue como su alfa gritó que en la noche se las pagaría.

Algunas cosas jamás cambiarían.

Algunas cosas jamás cambiarían

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°.•*¨♡ Alpha and his Puppy ♡¨*•.° YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora