TOXIC •SATZU•

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-Debo admitir que me sorprende tu puntualidad- Tzuyu ladeó ligeramente la cabeza al escuchar el comentario burlón de Mina -Sinceramente no pensé que fueras a venir.

-Me has pedido que viniera- Para ella era bastante obvio estar ahí después de que se lo pudieran. No entendía cuál era la razón de la expresión divertida de la japonesa, quién descaradamente se reía de ella.

-¿Acaso estas malinterpretando las cosas?- No quería molestar a Tzuyu y menos cuando sabía que eso podría traerle problemas, pero realmente le parecía curioso y a la ver divertido ver cómo le había hecho caso con solo pedírselo una vez.

-Para nada- La respuesta, para sorpresa de Mina fue rápida -Tú estás saliendo con Son- La japonesa levantó ligeramente una ceja -Y yo estoy saliendo con Sana unnie, así que no. En ningún momento se me pasó por la mente otra cosa que no fuera hacer el trabajo.

Y se sintió satisfecha con esa respuesta, sabía que le estaba diciendo la verdad así que no se preocupó, sonrió suavemente antes de hacerse a un lado para que Tzuyu pudiera entrar.  

-Adelante entonces.

-Permiso- Hizo una pequeña reverencia cuando pasó junto a la dueña de casa, caminando solo un par de pasos antes de detenerse.

-¿Por qué no entras?- Preguntó Mina con confusión al verla detenerse a medio camino, tan solo entrando lo suficiente para que ella pudiera cerrar la puerta -No hay nadie si es lo que te preocupa.

-No es mi casa- Otra vez respondió como si fuera lo más obvio el por qué de sus acciones. Esperando que Mina entrará primero y le indicará a donde debía ir.

-Siento como si estuviera hablando con una chica completamente diferente a la que veo siempre en el instituto- Parecía que no iba a poder dejar de burlarse de Tzuyu y esperaba de todo corazón que está no fuera a molestarse por eso -¿Quieres algo de tomar?- Terminó guiándola hasta la sala mientras le indicaba que se sentará en el sofá.

-No. Estoy bien- Por suerte la taiwanesa se veía bastante tranquila con todo lo que estaba pasando, por lo que simplemente se limitó a caminar a dónde le había indicado, dejando su maletín sobre el sofá antes de sentarse.

-Vale. Entonces empecemos- Mina se sentó frente a la más alta y tomó uno de los libros que había sobre la mesa de centro -¿Investigaste algo?- Solo hizo la pregunta por curiosidad, pero se vió sorprendida cuando vio como Tzuyu asentía suavemente.

-Algo- Sinceramente no estaba segura de lo que había hecho, pero de todos modos sacó un cuaderno y buscó lo que había investigado.

-¿Cómo supiste que tocaba hacer? No te dije nada.

-Shuhua me lo dijo- Con tranquilidad extendió el cuaderno abierto en la parte que estaba lo que había escrito -Aunque no sé si este bien porque no estuve en la clase.

Mina tomó con curiosidad el cuaderno, sorprendiéndose nuevamente al ver la perfecta caligrafía impresa en las hojas de papel. Para ser de otro país, no se le daba nada mal escribir en coreano.

-Bueno. No está mal- Tampoco podía decir que estaba bien porque solo estaba una parte, pero le daría algo de crédito por el esfuerzo -Creo que lo podemos juntar con lo que yo tengo- Ahora fue ella quien extendió el libro que había tomado -¿Quieres leerlo?

-Supongo que si quiero ayudar, lo tengo que hacer- Se encogió de hombros antes de cogerlo y empezarl a leerlo con tranquilidad.

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-¿Por qué no vas tú?- Sana rodó los ojos, bien que un día iba a terminar explotando con su pequeña hermana hormonal.

-Ya te dije que mamá quiere que vayas tú. No saliste de tú habitación en todo el fin de semana- No estaba para juegos así que se acercó y le quitó las cobijas.