Entre secretos y mentiras [SPOP AU] ~PAUSADA~

6. Pasar la noche

Al día siguiente cuando se despertó la rubia sentía el cuerpo pesado y sumamente cansado. A pesar del malestar, sin darse cuenta estaba sonriendo al recordar los hechos del día anterior. Se vistió con rapidez pues se le hacía tarde y decidió saltarse el desayuno.

—Buenos días —le dijo Bow a Adora cuando esta llegó a la estación.

—Buenos... —El saludo de Adora fue interrumpido por su propio bostezo.

Curioso, Bow observó detenidamente a su amiga y notó algo curioso.

—Parece que lo que estuvo bueno fue lo que pasó anoche ¿no? —bromea con Adora mientras señala hacia el cuello de esta.

La rubia algo confundida saca su teléfono celular para verse en el reflejo de este encontrando un gran chupetón en la base de su cuello.

—Maldita sea Catra —murmuró la oficial para sí misma mientras guardaba tu teléfono para abrochar cada uno de los botones de su camisa escondiendo el hematoma.

Al escuchar el nombre de la actriz el joven ató cabos.

—Supongo que la foto es de ayer, buena manera de usar tu día libre por cierto.

—¿Qué foto? —preguntó Adora totalmente extrañada.

Bow saco su teléfono mientras le contaba a su amiga.

—Ayer en redes sociales vimos una foto tuya: Ibas por la calle y un auto negro estaba al lado tuyo, dicen que es el auto de Catra Prime.

Mientras el joven buscaba la foto la pobre rubia se hacía una idea de cuando fue esta pudo haber sido tomada.

—Qué raro, no la encuentro por ningún lado —dijo Bow extrañado.

Aquello le pareció raro a Adora, pero no le dio importancia, sobre todo cuando Frosta apareció frente a ellos y les preguntó con cierta emoción.

—¿Chicos recuerdan al vendedor que se les escapo hace unas semanas?

Ambos oficiales asintieron un tanto extrañados.

—¿Lo atraparon? —preguntó Adora recordando el enojo que sintió cuando se le escapó aquel sujeto.

La emoción de la más joven se vio comprometida.

—En realidad no —aclaró antes de continuar a narrar lo sucedido—, pero lo volvieron a ver y aunque otra vez se escapó pudimos arrestar a una compradora.

Adora se sintió realmente feliz por las noticias, en teoría solo necesitaban interrogar a la compradora y seguramente así darían con el paradero del escurridizo rubio.

—¿Qué hicieron con ella? —Preguntó ansiosa la rubia— ¿Podemos interrogarla?

—Si, por eso venía a buscarlos, la inspectora Huntara quería que fuera tú quien te encargaras de eso —le explico la policía Nieves.

Aquello no hizo más que alegrar a Adora, sabía que al llevar poco tiempo en esa ciudad y en esa estación tendría que ganarse la confianza de sus superiores. Pensar que la inspectora confiaba en ella la hizo sentir tan realizada.

—Sígueme, te llevo a donde la tenemos detenida —le dijo Frosta.

Se despidió de Bow con un asentimiento y siguió a su compañera.

—¿Qué mercancía adquirió? —preguntó Adora en el camino.

—Poco más de un kilo de marihuana —dijo Nieves como si nada.

La rubia no pudo evitar abrir la boca en sorpresa. Un kilo era demasiado para alguien que solo consumía, ese hecho hizo que la mente de la joven se pusiera a pensar en miles de escenarios alternos mientras seguía caminando detrás de la policía.