Entre secretos y mentiras [SPOP AU] ~PAUSADA~

27. Mi...Mi mamá

Un poco de luz se filtró por la tela que cubría sus ojos haciéndole saber que alguien había llegado.

—Vamos bébete esto que mi jefe no quiere que te mueras —le dijo una voz algo masculina mientras le empinaba sin cuidado una botella de agua—... No aún.

El cerebro de Hordian básicamente ignoró lo último, su necesidad de beber algo era más que urgente. La falta de cuidado por parte de su custodio hizo que parte del agua cayera sobre su ropa. Aun llevaba puesto el traje que llevó a la fiesta de su sobrina, que había tenido lugar hace... ¿Tres días?¿Tal vez cuatro?... No tenía una manera de saberlo. El tiempo parece pasar de una manera diferente cuando el único sentido que puedes usar es el oído.

—¿Qué día es? —preguntó Hordian a duras penas, su garganta había estado tan recesa que le costaba trabajo hablar.

—Que te importa —le respondió con desprecio.

Si su custodio ni siquiera había querido responder a esa simple pregunta dudaba que atendiera a su siguiente suplica, pero aun así lo intentó.

—Necesito hablar con mi hermano —le rogó Hordian—. Explicarle que esto es un mal entendido, por favor dile.

Ni siquiera obtuvo respuesta. Al escuchar unos pasos alejarse de él gritó:

—¡Espera!

Pero como era de esperarse fue totalmente ignorado. Rápidamente la puerta se cerró de golpe, sin más Hordian volvió a quedarse solo y lleno de dudas en aquel desconocido y oscuro lugar.

■■■

La castaña tomó una gran bocana de aire ruidosamente. Adora se despertó enseguida tras escuchar aquello y sentir a Catra moverse bruscamente.

—Hey cariño —le dijo la rubia dulcemente acariciando su cabello. La joven Prime estaba acurrucada contra el pecho de su novia— ¿Todo bien?

—¿Qué pasó anoche? —preguntó Catra haciendo una mueca por el dolor de cabeza.

Con los ojos entreabiertos miró a la ventana, por la cantidad de luz del sol que entraba por esta seguro era más de medio día.

—¿Qué haces aquí? ¿No deberías estar en el trabajo? —preguntó Catra confundida. Otra punzada de dolor no tardó en atacar su cabeza.

—Bow va a cubrirme. Yo no me voy de tu lado hasta que estés mejor —dijo y dejó un beso en lo alto de su cabeza.

Catra sintió su corazón brincar de alegría por un momento. Hasta que después de otro dolor de cabeza recordó borrosamente algunas cosas de ayer.

—Lo siento por todo los problemas que te causé ayer —dijo totalmente avergonzada escondiendo su rostro en el cuello de la contraria.

—No tienes por qué disculparte. Yo estaré para ti siempre que me necesites ¿Lo sabes verdad? —le dijo Adora aun sin dejar de acariciar su cabello.

No sabía que tanto recordaba Catra de todo lo que le había dicho anoche, pero no perdería la oportunidad de recordarle a su novia todas sus palabras.

—Claro que lo sé anoche no parabas de decirlo, y realmente lo aprecio —admitió dejando un beso en el cuello de la rubia, causándole cosquillas—. Yo también estaré siempre para ti, princesa.

Adora no logró responder nada, solo sonrió ampliamente. La alegría de saber aquello no se podía expresar en palabras. Qué bello es el amor, pero sin duda lo es aún más el amor correspondido.

Un pequeño quejido de malestar se escapó de los labios de la actriz.

—Juro que nunca me vuelvo a emborrachar como anoche —rio sin un atisbo de gracia.