DESPUÉS DE ÉL | Jack R.

11

JACK ROSS

El chico qué supuestamente había secuestrado a mi chica acababa de despertar, los demás se encargaron de atarlo por si en cualquier momento hace el intento de escapar.

Su nariz estaba rota, me preguntaba cuanto de fuerza aplicó June para rompersela así.

– ¿Qué estoy haciendo aquí? – preguntó desorientado. En cuánto escuché su voz, me acerqué a él con rapidez y estampe mi puño sobre su nariz haciendo qué se quedara mucho peor qué antes.

– Ross. – me advirtió Caleb. – No queremos hacerte daño. Pero te recomendaría que nos dijeras ahora mismo dónde está Hera.

– Yo si quiero hacerte daño. – hablé recibiendo miradas de todos. – Me callo.

Adán soltó una sonrisa seca pero no contestó en ningún momento a la pregunta de Caleb.

– Te estamos haciendo un favor, no torturarte hasta qué respondas. Hazlo. – demandó Caleb inclinándose hacía él, pero cuándo menos lo esperó le soltó un cabezazo. Los demás chicos agarraron a Adán para que no volviera a atacar. Caleb se pasó el brazo por su nariz y suspiró. – Tu te lo has buscado sólo.

Y dicho esto salió del lugar sin hacer ruido haciendo qué los demás chicos supieran qué hacer, yo me quedé parado por un momento debatiendo en qué hacer o dónde ir, por lo que seguí a Caleb.

– ¿Qué le hacen? – pregunté.

– Lo qué se ha merecido. – contestó limpiando de nuevo su nariz por la qué salía sangre. Hoy es el día malo para las narices.

Después de algunos minutos los chicos salieron de ahí.

– ¿Ha hablado? – preguntó Caleb con ansías, siento qué le tenía bastante aprecio. También debería de ponerme celoso por éste.

– Sí. Ella escapó, le estampó un plato de cristal en la nariz. El dolor lo dejó inconsciente, ya no recuerda nada más. – informó uno de los chicos.

Cooper salió del baño, ya qué entró para ya sabéis, no importa. Y nos miró buscando una explicación.

Caleb suspiró, se notaba bastante que estaba nervioso. – Repartiros, buscaremos de nuevo.

Todos asintieron y salieron del lugar. Yo me quedaría buscando con Caleb y Cooper.

Decidimos buscar cerca de las casas por si por el miedo, decidió buscar ayuda en alguna de ellas. Pero nada, ningún rastro.

– Hay movimiento en el bosque. – se escuchó cómo una persona habló por el walkie-talkie.

– ¿Qué tipo de movimiento? – preguntó Cooper.

– ¿Humano?

– ¿Pero es la chica idiota?

– Ah, no sé aún. Íbamos a buscar.

– Rápido. – y terminaron de hablar. Dónde estás June. – Vamos al bosque.

Suspiré y los seguí, se que es profesional y todo lo que quieras pero me ponía nervioso no tener ninguna pista sobre ella.

– No os separeis demasiado. – nos advirtió. Ambos asentimos y me separé de ellos un poco.

Iba caminando cuando algo hizo qué perdiera el ritmo, me agaché encontrando el collar de June. En el suelo. En medio del bosque. Todas las posibilidades de encontrarla con vida eran cada vez mas difíciles, suspiré y pasé mis manos por mi cara. Cooper se acercó a mí y me vio en el suelo.

– ¿Qué pasa? – me preguntó a la misma vez qué me levantaba del suelo.

– Es suyo, lo acabo de encontrar aquí. En medio de un bosque. – le contesté enseñándole el collar. El lo agarró y lo miró.

– Tranquilo, la encontraremos. Tu la conoces sabes cómo es. – me alegró. – No dejará que nadie se le acerque. Ya ves cómo a dejado a Adán.

Yo reí asintiendo, tiene razón ella tiene qué estar bien, estará bien.

...

Varías horas buscando y no encontramos nada. Todavía no puedo creer qué lleve casi cuatro días sin ella, esto se está haciendo un infierno para mí. Qué le diría a Eros si su hermana no aparecía.

– Espera veo algo. – habló uno de repente haciendo qué saliera de mi trance y lo mirara con una ceja alzada.

Un poco cerca de aquí se veía cómo dos hombres iban literalmente corriendo persiguiendo a dos chicos, espera. ¿June?, ¿Mike? Qué cojones hace con Mike.

Enserio, la acabas de encontrar y te preocupas por eso.

La felicidad me consumió al verla sana y salva a punto de llegar a mí, a punto de abrazarla y decirle qué todo estaría bien.

Ambos venian corriendo yo estaba a punto de correr pero Caleb me paró poniendo su mano sobre mi pecho, su mirada seguía hacía delante. Pero, ¿por qué no hacen nada?

Cuándo estaban a punto de llegar hacía nosotros, June se paró de repente y miró hacía su derecha. Mike no sé dió cuenta de qué se paró y siguió con su camino hacía nosotros.

¿Qué haces June?

Pero volvió a mirar hacía nosotros y siguió corriendo dejando a los hombres atrás qué curiosamente pararon sin explicación.

Estaba a punto de llegar a la carretera pero alguien se tiró sobre ella haciendo qué ambas personas cayeran al suelo; Adán.

– Se ha escapado. – gritó un chico saliendo con velocidad del lugar dónde vino Adán y su ojo estaba morado.

Me solté del amarre de Caleb, ellos seguían peleando, ella seguía abajo de él intentando quitárselo de encima. Pero cuándo estaba a punto de llegar aquí, un coche venía sin medir su velocidad. Caleb volvió a pararme, entonces pasó algo qué nunca querría, el coche impactó.

Aparté la mirada con lágrimas en los ojos, el hombre del coche no pudo parar antes, se llevó a alguien por delante.

– June. – murmuré a punto de llorar y entrar en colapso.

Lo siento por esto jsjdjdjd prometo qué tendréis un capitulo más tarde

Tenía previsto subirlo el viernes pero me adelanté. Ya casi vamos a mitad del segundo libro.