⭔O.M.C.A. (Updyke × Reader)⭔

XIV - ¿Es lo correcto?

. . .

Era de madrugada, pero ni siquiera la fría luz de la luna o la tosca niebla acechante antes del amanecer eran un obstáculo para la meta de nuestra querida protagonista.
¿Y cuál era esa meta?

Fácil, salir del hospital.

Le habían dado de alta, así que ahora estaba escapando de esa prisión de paredes blancas y máquinas por doquier. Corría a gran velocidad hacia el cuarto del director de la fundación.

¿Cómo estaba allí? Bueno…

Updyke la había llevado allí, era el sitio más seguro que había en su mente.
Además, sólo allí sabrían el cómo atender a su mejor cazadora.
¿Más razones?

Una vez que estaba frente a la puerta dió una gran patada, abriéndola casi de inmediato. Sabía que eran las 3am, así que Matthew debía estar apenas a una hora de irse a su casa para descansar y volver luego al medio día.

– ¡¡MATTHEW!! – exclamó la demonio.
– ¿Hmm? ¿¡(T/N)!? ¿¡Cómo saliste!? –
– Me dieron de alta. –
– Oh… ¿Qué necesitas? –
– Dame algo para cazar. AHORA. –
– Oh, ¿Algún monstruo? –
– Monstruo, demonio, anomalía. Lo que sea. –
– Oh, ok ok. – Matthew sacó algunos papeles y se puso a leerlos, acomodándose mejor sus lentes. – Hmm… han habido avistamientos de presuntos fantasmas a unos tres kilómetros de aquí. Seguro hallas algo. – Matthew le dió los papeles con la dirección.
– Bien, gracias. –

Y tal como llegó la cazadora corrió hacia su habitación en la organización, tomando su armamento de repuesto -que básicamente eran sus armas típicas, pero por dos¿- y corrió hacia la dirección que decía en los papeles que le había dado Matthew.

Estaba lista para volver a su trabajo, tanto que incluso se veía desespero en sus ojos heterocromáticos, sumado a su apuro para llegar a aquél sitio.

Apenas salió de la corporación se rodeó de su característica llama, elevándose en el aire y volando cual cohete hacia la dirección indicada. Mientras aleteaba con sus alas apoyadas en sus brazos veía la ciudad debajo de sí.

Al estar a 3000ft (914.4m) de altura podía ver perfectamente toda la ciudad, viendo que muchas cosas habían cambiado. Algunos edificios que antes estaban en construcción funcionaban perfectamente, y otros eran derrumbados.
Las calles estaban pavimentadas de nuevo, y los faroles tenían sus luces renovadas.

En general la ciudad se veía renovada, avanzando con tranquilidad aún y cuando la noticia de que la famosa 'cazadora del infierno' había caído presa de un terrible ataque y casi muere por ello estaba en todos lados.
Parece que, al final, no es tan relevante como pensaba.

Hmm…

…

Una lástima.

Cuando estaba a unos 500ft (152.4m) de su objetivo dejó de volar, dando un último aleteo antes de lanzarse en picada hacia un callejón cercano al sitio. Cayó a una velocidad increíble, tanto que ni siquiera algún medidor de velocidad podría calcular con exactitud aquella velocidad.

Antes de tocar el suelo dió un gran aleteo seguido de otros aleteos mas suaves para frenar lo más silencioso posible. Puso sus pies sobre la tierra y sacó su dúo de guadañas.