Fluff-tober 2021

Día 4. Beso indirecto.

Hermione estaba en una fiesta ilegal en la sala común de Gryffindor y aunque en esas circunstancias otros días se habría puesto muy estricta con los horarios, la precaución y la no entrada de alcohol (causas francamente inútiles, pero nadie la puede culpar por intentarlo) en esa ocasión estaba decidida a pasarla bien, últimamente había querido dejar de ser tan estricta y relajarse un poco, lo que le había ganado un par de miradas extrañadas y hasta preocupadas de sus amigos, pero también una mirada juguetona llena de aprobación. Justo lo que ella había buscado.

Así que Hermione estaba en esa fiesta con toda la intención de demostrarle al dueño de esa mirada que ella también podía ser relajada y divertirse con los demás, aún si está reprimiendo las ganas de aconsejar a Harry sobre soltar la botella de whisky de fuego y alejarse del cuadro de la dama gorda, sería inútil evitar que fuera a las mazmorras por cierto rubio e intentar detenerlo definitivamente no era divertido. Todo estaba saliendo según su plan, Fred no le quitaba la vista de encima, la estaba viendo como algo más que la amiga de su hermano y Hermione sentía que podía explotar de la emoción.

Siguió en su lugar tomando una extraña bebida que le había preparado Ginny, con sabor a fresa, con ganas de bailar, pero no atreviéndose a unirse a los muchos chicos y chicas que bailaban al centro de la sala común.

Sentía la cabeza ligera cuando por fin Fred se le acercó.

— ¿Te estas divirtiendo? — Preguntó el pelirrojo, sentándose en el reposabrazos del sofá donde Hermione se encontraba. Paso un brazo por el respaldo del sillón y la morena pudo sentirlo contra su cabellera tupida. 

— Bastante— contesto, nerviosa por su proximidad. 

El chico de 17 años se inclinó sobre ella para hacerse oír sobre el bullicio, aunque no era necesario. 

— ¿Qué tal la bebida? Ginny las ha estado repartiendo a cualquier incauto. — Dijo sonriendo, y oh tenía una sonrisa tan bonita, después bajo la voz como si le estuviera compartiendo un gran secreto, — Escuché que tienen algo más que ponche. 

Hermione rio, porque sentía que lo que Fred había dicho era muy gracioso, — No me sorprendería descubrir que George y tú la han ayudado a prepararlas.

Fred se llevado la mano al pecho, mostrando una indignación tan exagerada que era obvio que era falsa, la castaña soltó una carcajada.

— Toma un poco entonces. — Desafió, mientras le ofrecía su vaso con la bebida rosa. 

— Me ofende tu desconfianza 'mione.

Hermione sintió su corazón dar un vuelco al oír el apoyo con el que la llamo. El pelirrojo tardo unos instantes en tomar el vaso y beber justo donde estaba la leve marca de labial rosa en el, Hermione sintió que su corazón se saltaba un latido antes de comenzar a andar como loco con la mirada que Fred le dirigió al beber de su vaso. Cuando le devolvió la bebida, reafirmando su inocencia, Hermione aseguro creerle aun conmocionada por lo que acababa de pasar.

Platicaron mucho y en algún momento de la noche Fred la convenció de bailar un poco. Hermione se sentía en el séptimo cielo, entre los brazos del chico y estaba convencida de que dejar de ser tan estricta de vez en cuando tenía muchas ventajas.