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El alcohol y mi bocota no se llevaban bien y cuando dije lo que dije, supe que estaría en problemas

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El alcohol y mi bocota no se llevaban bien y cuando dije lo que dije, supe que estaría en problemas. Esteban huyó tal como imaginé que haría, al igual que esperé que Marisol me atacara a preguntas.

―Boluda, ¿avanzaste a mi hermano? ―No parecía haber rastros de bebida en su voz.

―Estaba en pedo...y bueno, no sé...―Hice un gesto desdeñoso con la mano mientras caminaba por la sala buscando mi cartera.

―¿Adónde vas ahora?

―A casa de mi abuela...

―No, no, no. De ninguna manera, ¡vos te quedás acá, a dormir conmigo y a hablar de mi hermano! ―La Santa Inquisición venía por mí.

―¿No podemos dejar todo cómo está? Fue algo que pasó hace mil años y que, en definitiva, tampoco fue tan importante. ―Caí nuevamente desplomada en el sillón. Me estallaba la cabeza por el alcohol y por el cuestionario venidero.

―Te conozco lo suficiente como para saber que lo dijiste porque algo te quedó pendiente. ¡Tramposa!

―No quedó nada pendiente. ―Ni siquiera me atreví a mirarla.

Marisol no me creyó ni una palabra y en postura de análisis, cruzó sus brazos y se sentó en la mesa de madera maciza frente a mis piernas.

―¿Qué?

―Tu primera vez no fue con él...―Lo afirmó, ella sabía que fue con un chico que conocí en Londres a los seis meses de haber volado para allá.

―No.

―¿Por qué no?

―¿Perdón?

―A ver ―Empezó a mover las manos en torno a su cabeza, organizando sus pensamientos.

Oh no, esto sería eterno y doloroso.

―Cande, soy tu mejor amiga, crecimos juntas y pasamos un montón de mierda juntas. Que me confieses que tenías un crush por mi hermano no va a cambiar la historia, en todo caso me pregunto ¿cómo no me di cuenta? ―Comenzó a reírse con fuerza.

―Maru...dale...dejálo ahí, por favor.

―¿Qué hay de malo en que reconozcas que tenías un enamoramiento adolescente con mi hermano? ―Largó y mi cara me traicionó lo suficiente como para que ella haga una breve recapitulación que transformó sus gestos ―. A menos que...―bajé la mirada, leyendo lo que vendría a continuación ―: ¿vos estabas enamorada, como realmente enamorada de él? Y lo que me da más curiosidad, ¿todavía sentís cosas por Esteban?

―Shhh, che, dejá de decir boludeces.

―Cande, ¿cómo no me lo dijiste?

―Maru, ¡ya pasó! Lo que pasó fue una situación aislada: me gustaba tu hermano, tomé un poco de más la noche de egresados, él estaba sin su novia y me aproveché de esa situación para tirármele encima. Tan fácil como eso. ―Resumí.

"En lo profundo de mi alma" - (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora