-bueno... Por donde comenzaré-mencionó el joven beta David, tomó un panecillo y le unto una buena cantidad de mantequilla, recostó su espalda a la suave silla cubierta de una bonita seda.
-habla ya-ordenó Alba, tomando un sorbo del fino té, el hombre que estaba frente a ella rápidamente comió tal bocadillo y preparo su voz.
-pues... Yo fui la mano derecha del joven heredero Otto, ambos éramos amigos, pero descubrí algo que no debía y casi me degollan-narro el hombre con dramatismo.
-¿que fue lo que descubriste?-ansiosa preguntó y el joven de inmediato le cambió la mirada, ahora tomó una postura más sería y miró al rededor, se levantó de la silla y camino hasta la puerta asegurándose de que estuviera cerrada y sin nadie por ahí, al ver que la privacidad era absoluta, volvió a su lugar.
-es algo muy aterrador-dijo tratando de aclarar su voz, cada vez que recordaba eso su piel se eriza a-la familia imperial tiene una relación con un ser monstruoso.
-¡¿que?!-preguntó anonadada Alba ante tal confesión.
-lo se es difícil de creer pero estoy seguro de lo que le digo, esa familia por años están asociados con un ser muy aterrador-dijo con voz angustiada, David indagaba mucho en sus recuerdos pasados-le llaman padre a esa cosa, Otto al heredar el trono también en secreto heredará el apodo de mayor y guiará la secta ¡todos le hablan a esa cosa en la oscuridad de la noche! Es algo humanoide totalmente negro pero sumamente maquiavélico.
Alba se quedó en silencio escuchando todo atentamente-pero... El les da poderes o algo sobrenatural?-preguntó con seriedad.
-no lo se pero... Cada ves que nace un bebé en la familia, lo llevan ante ese ser al que le llaman padre y sacrifican a veces perros o personas-dijo tocando se su cabeza ante tales recuerdos abrumantes-esa vez presentaron al primo de Otto y después sacrificaron a una mujer...aun puedo escuchar los gritos desgarradores.
-¿sabes que relación tienen la familia imperial con el rey Gregorio?-preguntó con más desesperación alba y el hombre parecía pensarlo.
-Otto y Gregorio parecían llevarse bien en su juventud, muchas veces los tres pasábamos las tardes en el campo, pero algo más profundo no tengo idea.
-ah~ esta bien continua comiendo y mañana regresa tendrás el puesto que quieres.
-¡¿en serio?! Gracias duquesa y esperare mi follada-y sin mas Alba se marchó del salón para caminar a su oficina con más preguntas que respuestas.
[.....]
Querido hermano
El príncipe Otto me ha tratado con gran amabilidad, todos son amigables.
Ayer Otto me dio un beso, me dijo que me amaba y rompió compromiso con la joven aristócrata, y el emperador nos ha dado su bendición para casarnos.
Estoy tan feliz aunque me siento inquieto, el príncipe Otto se va a medianoche cada sábado, cuando regresa casi es el amanecer y siempre trae un aroma a cenizas, se recuesta a mi lado susurrándome que yo era el elegido.
Por favor hermano respóndeme esta pregunta ¿debería preocuparme por eso?
he estado aquí 4 meses, el hijo de alba esta muy grande y gordito, ya no llora durante el día, además que juega un poco con los demás niños de la servidumbre, aunque todo es es en secreto ya que a Otto no le gusta, dice que la sangre real debe mantenerse pura.
El joven Otto es muy tierno conmigo, me mima mucho al igual que a Asher aunque no sea su hijo legitimo, dice que en presto nos casemos me hará llevar a su hijo, ya no limpio su habitación, si no que ahora tengo un bello lugar donde quedarme, la cama es suave y esta una cuna para asher, vivimos cómodamente.
Ahora me despido, ya que tengo clases de etiqueta, mi profesor es muy estricto con los horarios y pronto también asher despertara de su siesta.
Con amor Yannick.
El alfa al terminar de leer la carta la dejo en su escritorio suspirando pesadamente, quería sentirse feliz por su hermano pero simplemente no pudo hacerlo, de sus ojos brotaron lagrimas de amargura.
La puerta de su estudio se abrió estrepitosamente y este giro su rosto mirando al intruso de mala manera-no mires así a tu madrastra muchacho-regaño Eva cerrando la puerta de la habitación.
-pues toca antes de entrar-dijo Gregorio y sin mas tomo la carta para extendérsela a la mujer-se que viniste por esto, léela y regrésala cuando termines.
-ni siquiera ser padre te a quitado la amargura-dijo la mujer entre dientes arrebatando la carta para ella comenzar a leer de pie al lado del escritorio-mi bebe, mi pobre bebe-sin mas la mujer comenzó a llorar sintiendo lastima por la ingenuidad de Yannick.
-criaste un hijo muy ingenuo-reprochó Gregorio a la mujer que lloraba, este ofendida lo miró.
-si... Crié un hijo ingenuo mientras que la reina y el rey criaron un maldito cuervo, además tu tenias que proteger a Yannick y ni siquiera eso pudiste hacer aun siendo el rey-con enojo atacó al alfa-eres la perdición del reino, la corona te hace flaquear ¿no? ¡No puedes dirigir a un país!
-¡silencio!-ordenó golpeando el escritorio con su puño-tu solo eres una vagina más que aprecio mi padre, y Yannick es el producto de eso, yo no soy mi padre al que puedes manipular, tu en mi corte no tienes poder alguno ¡entendiste!.
Eva ofendida lanzó la carta al alfa y se marchó de ahí dando un azote a la puerta.
Gregorio molesto se levantó de la silla y camino por el castillo hasta que llegó a un lugar demasiado descuidado, abrió la puerta y sin más entró.
-despierta te-ordenó mirando al hombre delante de él, este claramente estaba muy descuidado, sus cabellos le cubrían la cara y estaba muy sucio de barro y eses.
El hombre como pudo se puso de pie y la cadena que lo tenía atado hizo un poco de ruido, el alfa lo miró con desagrado y asco total.
-¿que planea hacer tu hermano?
ESTÁS LEYENDO
El Harem De La Duqueza Girard
Narrativa generale-acepto tus condiciones-dijo una joven mujer alfa moribunda, aquel espectro sonrió altenero, ambos estrecharon sus manos cerrando el trato. -recuerda que tu alma ahora me pertenece-hablo la sombra para desaparecer entre la oscuridad del bosque. -¿...
