♡•°𝑹𝒆𝒂𝒍𝒔 𝑫𝒓𝒆𝒂𝒎𝒔°•♡ (𝐌𝐚𝐭𝐭 𝐱 𝐌𝐞𝐥𝐥𝐨)

𝟬𝟲

[Omnisciente]

Mello iba caminando por varias calles con la mirada perdida.

Para el no era nada fácil asimilar lo que había pasado esa noche. Aun no podía creer que de verdad se había acostado con alguien de la fiesta.

Llegó a la puerta de su casa y con las manos algo temblorosas cogió sus llaves y abrió la puerta, acto seguido entró a su casa cerrando esta una vez estuvo dentro.

Miró su casa de arriba a abajo, planteándose que haberse quedado en ella en lugar de ir a la dichosa fiesta habría sido la mejor opción.

Tomó su móvil y miró la hora, eran las 12:27 de la mañana, como era de esperar se había perdido las clases. Se fijó también en la batería que le quedaba y vio que estaba a punto de agotarse.

Optó por subir a su cuarto a poner a cargar el móvil. Se sentó en la cama y cogió el cable, lo conecto al movíl y a su vez al enchufe, haciendo así que este comenzase a cargarse.

Dejo el móvil en su mesita de noche y se quedó mirándolo por unos minutos, necesitaba hablar sobre esto con alguien, necesitaba contárselo a sus mejores amigos. Pero le daba miedo decírselo, por parte de Near no pasaba nada pero Elle... Él les había avisado de lo que podía pasar en la fiesta y en cuanto Mello le contase el problemita que tenía encima, seguro le iba a reñir de todas las formas posibles.

Aun sabiendo esto, decidió coger el móvil y buscar los contactos de ambos, aunque había clase, estaba seguro de que ninguno de los dos habría ido...los conocía bien y lo pasaban mal en resaca.

Primero llamó a Near, lo difícil siempre iba para el final ¿No? Cuando escuchó que los pitidos dejaron de sonar supuso que el peliblanco ya había cogido el teléfono y se dispuso a hablar.

– Hola Near

– ¡Mello! – Dijo este con tono sorprendido – ¿Como estás? estábamos preocupados, no volviste con nosotros de la fiesta y no contestabas las llamadas.

– Ya ya lo sé, es que estaba dormido, lo siento – Dijo el Rubio algo nervioso – Oye te llamaba para saber si puedes venir esta tarde a mi casa..

– Mello no creo que pueda, sabes como son mis padres, no se si...

Mello no le dejó terminar la frase y empezó a hablar él – Porfavor Near, convencelos de alguna forma, necesito que vengáis. Es urgente.

– Bueno, si es tan urgente creo que podría llegar a convencerlos de alguna forma.

– Muchas gracias Near, de verdad – Dicho eso ambos se despidieron del otro y cortaron la llamada.

Mello buscó entre sus contactos el número de Elle y tras meditarlo unos segundos le dió al botón verde para comenzar a llamarlo.

No tardó ni 15 segundos cuando Elle ya se lo había cogido.

– ¡Mello! – Gritó el pelinegro al otro lado de la linea sorprendiendo a Mello.

– Hola Elle, ¿Como estas? – Dijo intentando calmar al contrario

– Ni cómo estás ni nada ¿Qué hacías que no respondias el móvil? ¿Sabes lo preocupado que estaba?

– Ya ya, puedo entenderlo, perdón estaba dormido. Ayer estuve un par de horas más que ustedes en la fiesta y llegue a mi casa muy cansado – Mintió el rubio como pudo. Prefería contarles la verdad en persona.

– ¿Entonces estas bien? ¿No te pasó nada?

– Sí, estoy bien, tranquilo, te llamaba para saber si podrías venir a mi casa esta tarde, tengo algo que contarte. Es urgente.

– ¿Urgente? ¿Cómo que urgente? ¿Qué pasó?

– Te lo contaré en persona, Elle por favor necesito que tú y Near vengáis, porfavor – Mello dijo eso en todo de súplica, de verdad necesitaba desahogarse con ellos.

- Bueno bueno, tranquilo. Claro que iré, no te preocupes, estaré allí a las seis ¿Sí? - Elle intentó tranquilizar a Mello, este de verás se escuchaba preocupado.

– Gracias, en serio gracias, luego os veo – Dicho eso terminó con la llamada y ya si dejó su móvil en la mesita de noche.

Se levantó de la cama algo mas calmado al saber que sus amigos iban a venir a la tarde. Ellos siempre le ayudaban.

(•••)

Eran las seis menos diez, Mello estaba sentado en un sillón con el móvil en la mano.

No estaba viéndolo, solo le daba vueltas y lo pasaba de una mano a la otra, gesto que mostraba claramente lo nervioso que estaba.

Pasados unos minutos el timbre de su casa sonó un par de veces indicando que Near y Elle ya habían llegado.

Cogió aire, se levantó del sillón y camino hacia la puerta, la abrió y al ver a sus dos amigos sonrió.

– Hola – Dijo moviendo la mano y les dejó entrar, los tres se fueron a sentar al salón y tanto Elle como Near se quedaron mirando a Mello una vez ya estaban allí.

– ¿Y bien? ¿Qué es lo que pasa? – Dijo Elle algo ansioso

– Eso, dinos Mello, ¿Por qué tanta prisa por quedar hoy?

– Pues veréis...– Tras tragar saliva un par de veces, Mello decidió hablar – Recordáis que ayer yo no volví con ustedes de la fiesta, ¿No? – Ambos asintieron y dejaron a Mello continuar su explicación – Pues en el tiempo que no estuvisteis, yo Empecé a beber.

Mello juntó sus dos manos y empezó a jugar con sus dedos, sentir las miradas de ambos en él, esperando a que terminase de contar lo que le pasaba solo hacía que estuviera mas nervioso.

– Bueno eso bebí y bebí, hasta que llegó un punto en el que ya no era consciente de casi nada de lo que hacía.

– Esto pinta mal – Susurró Near a Elle

– Sí, muy mal – Elle se acercó a Mello y le miró aun mas fijamente – Sigue.

– Pues yo, pasaron ciertas cosas, de las cuales no estoy orgulloso, pero pasaron.

– ¿Puedes porfavor decir lo que pasó en la fiesta de una vez? Nos estas poniendo nerviosos – Dijo Elle señalándose a él mismo y luego a Near.

Mello volvió a tomar aire y se llevó unos segundos pensando como decirles lo que había pasado de forma sutil.

Al no encontrar como decírselo de ese modo optó por simplemente soltarlo de una vez – Me he acostado con un chico y no se quién es.

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Minlu_02