Narra Bill:— Tienes que hacerlo bien Bill— dice Gustaf en un tono serio— De esto depende que recuperes a Emma ... ¿lo sabes verdad?
Yo me encontraba nervioso, incluso mis dedos temblaban y sentía escalofríos.
— ¿Y si Alexander no acepta?— murmuré a punto de un colapso nervioso.
— Es un buen plan Bill, Alexander va a aceptar— responde Gustaf seguro— Pero tienes que ser convincente y esforzarte en actuar lo mejor que puedas. Así y tengas ganas de molerlo a golpes tienes que reprimir tus sentimientos si quieres que esto funcione.
Gustaf y yo nos encontrábamos dentro de su auto.
Estacionados fuera del corporativo de mi hermano Alexander, donde justo ahora él se encuentra trabajando.
Hace apenas una semana fue cuando Alexander nos dió su "noticia", y si él cree que ha ganado y que se va a quedar con MI bebé, está muy equivocado.
Ya pasé mucho tiempo separado de Emma, así que en esta ocasión voy a recuperarla a como de lugar. Emma va a volver conmigo sea como sea. Es mía, su lugar es a mi lado.Durante toda esta semana emocionalmente hablando me he sentido realmente mal. Me rompió el corazón el hecho de que las cosas con Emma no se solucionaran, y a eso agregándole que mi propio hermano me traicionó, sinceramente quedé bastante destruido. Lo único que me sirvió de consuelo fue tener a Gustaf a mi lado, quien no dejó que volviera a caer en mi depresión y me alentó lo suficiente para hacer un último intento de recuperar a Emma.
— ¿Por qué me estás ayudando Gustaf?— le pregunté a mi hermano, viéndolo de manera cautelosa, analizándolo— Luego de toda la mierda que yo le hice a Emma pensé que eras el primero en oponerse. Así que no te entiendo... ¿Por qué no estás feliz de que Emma me haya superado y ahora este con Alexander?
Quiero creer que las intenciones de Gustaf al ayudarme con Emma son sinceras. Pero... no lo sé, luego de la traición de Alexander ya desconfío de cualquiera.
— ¿Quieres sabes porque?— dice a lo que yo asentí— Porque en cuanto llegamos a casa de Alexander ese día pude darme cuenta de que Emma se comportaba de una manera extraña. Era como si temiera a acercarse a ti porque Alexander la vigilaba. Es extraño Bill... pero la forma en la que Emma te vio fue más que notorio que ella estaba feliz de verte, no te quitó los ojos de encima en toda la noche. Dudo muchísimo que ella te evitara porque aún te tenga rencor por todo lo qué pasó entre ustedes. Como dije, se que Alexander está detrás de todo esto. Quien sabe que tanto le habrá dicho a Emma para manipularla.
— ¿Y tú crees que Alexander esté enamorado de ella? — pregunté con miedo, mordiendo mis uñas por la ansiedad— O bueno... quizá solo finge estar enamorado de Emma para quitármela... ¿verdad? Es decir, Alexander siempre ha disfrutado quitarme lo que yo más quiero.
Gustaf me miró con una mueca.
— No te va a Gustar escuchar esto... pero creo que Alexander si está enamorado de ella, y quizá desde mucho antes de que tú y yo nos fuéramos a Estocolmo. Es decir, mira todo lo que ha hecho por ella... compró una gran casa y convirtió esta en un parque de diversiones solo para ver feliz a Emma. En realidad, jamás había visto a Alexander tan interesado por una mujer— abrí mis ojos sorprendido— Pero fuera de eso... sinceramente no creo que Emma esté enamorada de él. Creo que es algo muy obvio y me sorprende que Alexander no lo note. Esta tan fascinado con ella que no nota que el sentimiento no es mutuo, y que solo la está manipulando.
Me da gusto saber que Gustaf también piensa que mi bebé no está enamorada de Alexander.
— ¿Y si Emma no está enamorada de Alexander entonces porque quiere quedarse con él?— pregunté con amargura— Es que no lo entiendo.