28.Paragua y botas.

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Riley.

Desperté tirada en el suelo, anoche después de despedirme de William, vine a la azotea a leer un libro y a regar mis queridas plantas, me volví a incorporar y me estire, el suelo no suele ser cómodo en el transcurso de la noche debí darme vuelta y caer a el suelo.

Mi día mejoro al ver por los cristales de la azotea, estaba oscuro, iba a llover.

seguro estaras pensando que en vez de William ser un marciado en realidad lo era yo, quien diría que su día mejoro por que el cielo se ve como si fuera a caer un diluvio, lo se, mi amor por lo extraordinario a veces es demasiado y es que amo la lluvia, veo a las personas correr cuando ella se aproxima, se esconden y se enojan cuando ellas les toca.

Pero y si nos detuviéramos un momento, dejáramos el afán matutino y por un milímetro de segundo nos paráramos a disfrutarla, Lo se, es mucho pedir y no pretendo hacer que todos amen la lluvia como yo, hay personas que no pueden ver la magia que hay a su alrededor y se conforman con lo ordinario,

Me despedí de la azotea y baje a mi departamento con afán, estos días me había atrasado con la universidad, las tantas aventuras con William, me despistaron.

Llegue a la cocina, tome mi asqueroso batido de proteína y mis vitaminas, desayune, me di una ducha caliente y me puse cómoda.

opte por un overol rosa de tela, pantuflas de conejo y  una pañoleta en mi cabello, creo que me veía como una señora, pero me encantaba, así que al diablo los demás.

Me prepare y me dirigí a mi estudio, me puse manos a la obra, tenia que hacer una tarea de dibujo, de escultura, una redacción de historia del arte y un proyecto de dibujo, tenia ardo trabajo.

una hora después había terminado la mitad del trabajo, reparando mi vista por mi escritorio vi mi libreta de listas y la abrí, revise la lista y sonreí al ver las que ya habíamos hecho, vi la que seguía y no pude aguantar la risa, era el día perfecto para eso.

#8.Bailar bajo la lluvia.  

Mire la muralla de tarea que tenia apilada y me debatí si hacer los deberes o ser completamente feliz el resto del día. me debatí por varios minutos, la decisión era dificil..no a quien engaño, lo decidí a la primera, quería bailar bajo la lluvia, la vida es corta, si dejáramos de pensar tanto y solo viviéramos.

¿Qué habrían escogido ustedes, sin mentir?

Tome mi teléfono y di llamar a William, no sabia nada del marciano desde a noche.

espere.....

William: Hola Violeta, buenas tardes! -dijo, se escuchaba atareado.

Riley: estas ocupado, no quiero importunar.

William: Nunca estoy ocupado para ti.

Riley: a que hora sales del trabajo?

William: a la hora que quiera, mi querida violeta recuerdas que yo soy el jefe?

Riley: hay perdón señor importante, se me olvida que eres el señor estirado.- dije en son de burla.

William: jaja que graciosa, te veré en media hora, aunque no creo que podamos hacer mucho esta lloviendo a cantaros.

Riley: no te preocupes tengo algo en mente, nos vemos.

Dicho eso colgué con una sonrisa malvada, el no sabia lo que le esperaba.

Mire a mi alrededor, torcí mi cara al inspeccionar mi departamento había un poco de reguero, me encamine a ordenar y limpiar un poco, termine exhausta eran las 4 de la tarde, no paraba de llover, cambie mis pantuflas por botas, me senté en el sillón con un te y mis audífonos, quería elegir una canción que pudiéramos bailar, pensé en que tal vez diría que no, pero el me prometió ayudarme con la lista, así que no tiene escapatoria.

 La Azotea De Las Flores Donde viven las historias. Descúbrelo ahora