William.Memorice la escena que tenia ante mis ojos, Riley dormía plenamente, rodeaba mi abdomen con su brazo, su pierna entrelazada con las mías, su rostro en mi pecho, era la cosita mas tierna que vería en mi vida, sus largas pestañas, las pecas que adornaban sus mejillas, ella dormía tan profundo que no quería moverme para que esto durara mucho mas.
Pero no todo puede ser tan perfecto verdad! Tomas entro en el balcón gritando buenas días, haciendo que Riley pegue un brinco y se incorpore asustada, maldije en mis adentros y mire a Tomas con cara de muerte.
Ella se froto la cara para apartar todo el sueño, me miro y me sonrió, maldita sea esa sonrisa me vuelve loco, estoy consiente de que ayer, le dije que estaba celoso, que no quería ser su amigo y también nos besamos.
Le devuelvo la sonrisa y me incorporo, la abrazo por detrás y le doy un beso en la mejilla, se da la vuelva y toma mi rostro con sus manitas, me mira diferente..
-Buenos días- dice con voz adormilada.
-Buenos días violet .
-Las personas van a pensar que me llamo Violet y no Riley- se reía, la imite.
-No importa, solo yo podre decirte violet y eso es especial.
-Lo se.-se puso de puntitas y deposito un beso en mi mejilla- vamos a desayunar.
Bajamos hacia la cocina, todos estaban desayunando, tomamos asiento mientras todos nos veían y cuchicheaban, no le di mucha importancia, se que ellos no están acostumbrados a verme con alguien.
Llego la hora de irnos, regresar a la ciudad, las chicas desaparecieron, nosotros proseguimos a montar las maletas a el auto.
Estábamos listos para partir, me sentía nervioso Riley y yo no habíamos hablado de lo que paso ayer y la incógnita de eso me tenia de los nervios.
La vi caminando con su bolso y esa sonrisa que derrite a cualquiera, le dio un abrazo a el inepto, después la vi hablando con Tomas, y trague grueso cuando la vi caminando hacia el auto.
Entro y sonrió al verme, en minutos estaba sentada conmigo en los asientos de atrás, todos se adentraron, Tomas y el inepto se sentaron en los asientos de tres y lo agradecí, quería tiempo con ella.
Me compartió una de sus audífonos, recostó su cabeza en mi hombro, alce mi brazo para que se acomodara bien y termine abrazándola mientras su cabeza descansaba en mi pecho, mientras escuchábamos a Adele, mire las gotas de lluvia caer por la ventana, mire su rostro y se había dormido, sonreí como un idiota.
Pasaron dos horas, abrí los ojos , estaba dormido en las pierna de ella, pero en que momento me quede dormido, la música de Adele tiene la culpa, me incorpore lentamente, ella iba recostada a la ventana, me sintió moverme y me miro dándome una de esas sonrisas contagiosas.
Me remordía la conciencia por mi indiferencia hacia ella y el trato que le di estos días, se que no tengo justificación pero me moría de celos, entiéndanme nunca e tenido esto, yo nunca e buscado amor en alguien y mucho menos lo e expresado y eso me hace sentir vulnerable y cuando la vi mojada sabiendo que se había ido con el inepto, los celos me carcomían.
-Como vamos con la lista.-pregunte para salir de ese silencio.
- Deseo #12:escribir un libro.-contesto sacándose los audífonos.
-Y como vas con eso, tienes una idea?
-Creo que si, estoy en proceso.
-Bueno creo que con eso no puedo ayudar- dije acariciando su mejilla, ella hizo algo que no me esperaba, se inclino y me dio un beso corto en la boca.
-No, eso tengo que hacerlo sola, ya tengo varios capítulos.
-Así! de que trata?
-De marcianos.-dijo riéndose de mi cara.
-Bueno, escribas lo que escribas se que me va a encantar.
-Gracias por creer en mi William.-me miro con una nostalgia que no entendí.
-Eso siempre mi violet.
La acerque a mi y la envolví con mis brazos, cayendo de nuevo en la burbuja que se creaba cuando ella y yo estábamos juntos, una donde nada podían hacernos daño o eso pensaba yo.....
~~~~~~~~~~~~~
Llegamos a el edificio, nos despedimos de los chicos, subimos a nuestros apartamentos, nos detuvimos en medio de nuestras puertas, ella me miro como si tratara de decirme algo.
-Quieres...-hablamos los dos al mismo tiempo, sacándonos una risa nerviosa.
-Quieres quedarte conmigo hoy, se que no es tan elegante como tu apartamento pero.....
-Me encantaría- la interrumpí.
Pasamos a su departamento, deje mis maletas junto a la puerta, ella me invito a pasar, desapareció en su habitación por unos minutos y luego volvió.
-Quieres darte una ducha, cambiarte de ropa o nose...
-si.-la interrumpí de nuevo, se veía nerviosa.
Tome la increíble ducha, me pareció intrigante su apartamento tenia plantas hasta en el baño...
cuando salí ella tenia una de sus locas pijamas, esta vez era de rayas blancas y negras, como los uniformes de la cárcel, reí al verla, estaba sentada en el sillón, con una taza en las manos.
Me senté junto a ella, ella acorrucándose contra mi, vimos un Dorama, jamás en mi vida pensé estar en esta situación, no entendía nada, en cambio ella hacia mates con las manos, unas muecas graciosas, repetía las palabras en coreano y se tapaba la cara sonrojada cada vez que el chico le tomaba la mano a la chica, no se cuantas veces rodé los ojos.
Y como es costumbre, mi pequeña se durmió en mis brazos, apague esa pesadilla en el televisor, la tome en mis brazos y la lleve a su cama, la arrope y le di un beso en su mejilla rosada, cuando me iba a dar la vuela, tomo mi mano.
-Quédate, no quiero estar sola.
-Le tienes miedo a el mostro en el armario.-dije abriendo su armario, asiéndola reír.
-No- se hecho a reír- solo quiero dormir en tus brazos.-no se diga mas, ella no me lo tiene que decirlo dos veces.
Me acomode a su lado, ella no perdió tiempo y puso su cara en mi pecho, la abrace tan fuerte como si en cualquier momento despertaría de un sueño, y todo esto fuera una mentira.
No se que nos depararía el futuro, pero tomaría el riesgo, por primera vez le daría mi corazón, por que ella lo valía...mierda si que lo valía.
Cerré mis ojos, recordando todas las aventuras que hemos tenido, y pensando en todo lo que aremos en un futuro, por que si, quería a Riley en mi presente y en mi futuro....
Pero no se lo digan aun, no sean chismosas......
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La Azotea De Las Flores
Teen FictionPor que seguimos dándole tan poca importancia a la frase "no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes." Por qué tenemos la mala costumbre de no aceptar lo que sentimos y de no ver las cosas importantes cuando ya es demasiado tarde. Esta es la his...