Prólogo

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Dante miro al amor de su vida sin poder creer lo que estaba pasando en ese momento, todo parecía estar bien entre ellos y ahora Riley lo estaba terminando porque no podía seguir juntos

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Dante miro al amor de su vida sin poder creer lo que estaba pasando en ese momento, todo parecía estar bien entre ellos y ahora Riley lo estaba terminando porque no podía seguir juntos. Sostuvo su mano con fuerza para no dejarla ir, aunque eso no serviría para nada. Estaba claro que era el amor de su vida pero a veces el amor de tu vida no se queda en tu vida.

—¿Hice algo malo? —pregunto con preocupación.

—No —dijo entre sollozos — Eres un gran hombre pero...

Siempre había un pero.

—¿Pero?

—No estamos hechos para estar juntos, no te merezco.

Él lo sabía, sabía que ella era un persona insegura y Dante trataba de ayudarla en eso, apoyarla con su amor pero a veces el amor no es suficiente.

—Yo te amo —pronuncio con dificultad.

—Yo a ti no —aquello fue como una apuñalada al corazón de Dante — No me amo ni siquiera a mi, ¿Cómo esperas que te ame?

Él se quedó en silencio tratando de no derrumbarse frente a ella, tenía que ser fuerte, era lo único que le quedaba.

—Esta bien, lo entiendo.

—Lo siento...

—Cuidate, Riley —se limito a decir.

—Dante —suplico.

No quería que las cosas quedarán mal entre ellos.

—Hasta nunca.

—¿Hasta nunca?

—Es lo mejor —trato de sonreír. 


Me recargue en el respaldo de mi silla y mire nuevamente el final. Mordí mi labio y di en publicar, ya estaba, había terminado la novela y sabía perfectamente que mis lectoras llorarían por el final, después de 40 capítulos llenos de amor y sufrimiento, más sufrimiento que amor pero buenooo, me ponía un poco triste que Dante tuviera ese final, era el tipo de personaje literario que te crea espectativas altas en el amor.

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