Kiara Sánchez es una joven lectora que vive entre libros huyendo de la realidad. Un día encuentra un vídeo extraño de cómo traer a la realidad un personaje literario, ella decide hacerlo pensando que es una tontería y no funcionará, sin embargo, a l...
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Cuando abrí los ojos maldije por lo bajo, otro día más. Recordé haber tenido un sueño muy raro, un maldito chico estaba en mi habitación y decía ser mi personaje literario, me tape con las sabanas deseando que fuera sábado para no tener que ir a la escuela, me asome en cuanto escuché que alguien cerro la puerta. Pestañeé repetidas veces y me talle los ojos al ver al chico salir de mi baño con mi toalla enredada en su caderas.
Mierda, no había sido un sueño.
-Deja de mostrar tus miserias -le aventé una almohada y me cubrí los ojos.
En realidad no tenia nada de miserias.
-¿Miserias? -se burlo - ¿Quieres que me quite la toalla para que veas que no tengo miserias?
Tragué en seco.
-¡Claro que no! Vístete.
-Bien -suspiro.
Después de un minuto ya estaba vestido y me metí al baño para poder darme una ducha antes de ir a la escuela. Tarde todo lo que quise bañándome ya que mi madre se había ido y nadie podría ver a Dante.
-Tengo hambre -gruño Dante.
-Ahorita salgo -le hice saber.
Salí del baño y lo encontré acostado en mi cama jugando con mi muñeco de Draco, suspiré y me senté frente al espejo para peinarme.
-¿A dónde irás?
-A la universidad.
-Hmm.
-¿Hmm que?
-Nada -murmuro.
-Deja a Draco.
-Tu muñeco.
-Se llama Draco.
Lo dejo en la cama y se levanto mirando atentamente lo que hacía con mi cabello. Por un momento me puse nervioso la forma en la que me miraba, no me gustaba que las personas me observarán por mucho tiempo. Me dan ganas de darle un putazo en la cara para que dejara de hacerlo.
-Me gusta tu cabello -opino.
-Gracias -me levante y abrí la puerta de mi habitación y salí sintiendo los pasos de él atrás de mi -Iré a la escuela así que necesito que te quedes en mi habitación y no salgas por nada del mundo.