Capitulo. 32

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Lucia

Siento el corazón en la garganta cuando veo tanta gente en la sala de emergencia, luego de una llamada de los superiores la mayoría del personal bajo ya que hubo un accidente con mas de 30 heridos, Ashton da indicaciones a cada uno, mientras las camillas van entrado una por una, el sonido es agobiador, las sirenas, los quejidos, la gente gritando, llantos y parientes preguntando por pacientes.

Veo entrar a una chica con la pierna casi en el aire, el hueso femur esta visible y los de primeros auxilios tratan de evitar la hemorragia. Mientras los demás le dan oxigeno

—Yo me encargo—Ashton da un paso adelante y empieza hacer un torniquete—Gasas y ligas grueso numero 5—Se las entregan y sigue. La hemorragia para un poco y la chica grita—50 mg de morfina ¡Ya! —Habla y se la coloca en el brazo mientras sigue enfocado en la pierna, la herida es increíblemente grande. Entran mas camillas—Mairena—Hazte cargo—Señala una camilla sin dejar de apretar la pierna—Julian y Gabriel adelante a la sala 56—Murmura viendo la siguiente que entra. Esta enfocado en la chica pero aun sigue dando instrucciones a todo el equipo, me tiene a sus pies, verlo ejercer su jodido puesto es de las mejores cosas que puedo apreciar—Sullivanth tu turno—Habla cuando entra un chico con la frente abierta y me obligo a salir de mi burbuja de enamoramiento para acatar la orden—Estare en la sala 2 si necesitan algo, Garcia quedas a cargo de todo—Le dice a su mano derecha mientras avanza con la camilla

Me encamino a el y empiezo con el protocolo estipulado, con ayuda de los enfermeros logramos cerrar la herida. Me llevo como dos horas en todo eso y el sigue aturdido y con varios síntomas que me toca mandar hacer exámenes e internarlo. Salgo de nuevo y Ashton ya no esta, supongo que sigue en operación de emergencia, ya no esta tan lleno como antes pero aun hay gente, veo a Rosa ayudando a una chica en lo que me quito los guantes.

—El director es muy eficiente, quiero que me opere a mi—Logro escuchar y las veo de reojo. La enfermera que ayuda Rosa habla animadamente de mi novio.

—Es perfecto—Dice Rosa—Viste lo lindo que se veía salvándole la vida a esa mujer ? Escuche decir que esta salvando su pierna, una pierna que estaba casi perdida, es un jodido dios

Trato de aguantarme las ganas de ir donde ellas y callarlas de una maldita vez, me molesta que hablen de lo que es mio, pero hacerle un escandalo a ellas conllevara problemas para el que es director. Asi que no puedo, no puedo ser inmadura.

Termino de limpiarme y busco la salida para irme a mi puesto.

—Escuche que esta buscando a su esposa—La enfermera habla y me tengo que quedar quieta en mi puesto escuchando mas—Y quien no? La mujer es perfecta como el, yo vi las fotos antes que las sacaran de todas las redes, aparte de eso era de muy buena familia

—Supongo que es la mujer que merece, el no debe estar con una cualquiera, con una que no tiene ni donde caerse muerta—Ambas rien y tragándome el orgullo salgo de aquel lugar.

Me siento en una de las bancas con el sol en su punto mas fuerte. Tengo una obsesion con tomar sol, siento que es lo mas relajante y me ayuda para todo. No se de que me molesta tanto escucharlas si es la verdad, al ser su novia eso es algo que pasaría, tarde o temprano todo mundo iba hablar de la mala combinacion que somos y se que me falta mucho mas, mas porque aun no nos han visto del todo juntos, todavía no la hacemos publica y se que pronto va a pasar, si algo he aprendido de el es que no va a ocultarme. Veo el reloj que cargo en la muñeca, han pasado solo 30 minutos y tengo que volver, los exámenes de mi paciente deben estar listos desde que los mande hacer.

—Rojita—Me levanto cuando escucho su voz—Escuche que estuviste ocupada toda la mañana, lo cual es una pena. Te estuve buscando porque quería invitarte a tomar algo

Inefables [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora