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Cuando se es un híbrido muy pequeño el peligro está en todos lados, incluso puede vivir bajo el mismo techo sin que lo notes.
JiMin, un esponjoso híbrido de hamster tiene que huir constantemente de las garras filosas que posee su gran amor, Yo...
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El esponjoso roedor corría sobre el pecho del peludo gatito que intentaba con todas sus fuerzas dormir su preciada siesta de apenas tres horas, sin embargo JiMin no le estaba poniendo las cosas fáciles con esas diminutas patitas.
—Gatote despierta, estoy aburrido. Ayer dijiste que hoy jugarias conmigo si te dejaba dormir la siesta.
—Y no lo estas haciendo.
—Pero era la siesta de ayer.
—Bueno también era la de hoy, ahora déjame dormir pelusa molesta.
—¡Eres un sucio gato tramposo!
JiMin se enfado y encajó sus pequeños dientes sobre el cuello del dormilón minino que pego un brinco sobresaltado mandando a volar al roedor contra el respaldo del sofá.
YoonGi sacudió su pelaje lamiendo sus patitas delanteras y pasándolas por su cuello en busca de aliviar el dolor punzante que la mordida había dejado, se encontraba tan sumido en su tarea de acicalarse que se olvidó por un momento del hamster hasta que un chillido quejoso lo alertó.
—¡Bola de pelos!
YoonGi subío de un salto al sofá olvidándose de las enormes diferencias de tamaño y peso que existía entre ellos lo que por supuesto acabó en un hamster rebotando del sofá directo al suelo alfombrado.
El minino observo casi en cámara lenta como su bolita de algodón salía volando por los aires sin poderlo sostener a tiempo, el cuerpo esponjoso de JiMin se estrelló duramente contra la alfombra soltando un chillido ahogado que asusto al mayor cuando no lo vio moverse ni un milímetro.
—¡Chiquito!
De nuevo YoonGi se movió rápidamente teniendo especial cuidado en no aplastar al roedor que se quejaba con pequeños chillidos intentando ponerse de pie y fallando de inmediato en el intento.
El minino lo tocó suavemente un par de veces con una de sus patitas y se preocupo mucho cuando al más mínimo roce el hamster chillaba peor que cuando fingía aplastarlo. El primer pensamiento de YoonGi fue que había lastimado seriamente a JiMin, que podría tener incluso alguna fractura pues es que siendo tan chiquito y delicado temía haberlo herido de gravedad, movió despacio el cuerpecito esponjoso casi llorando al verlo encogerse sobre si mismo para hacerse una bolita llorosa.
Tenía que llevarlo al médico de inmediato.
Por fortuna ellos vivían a los alrededores del centro de modo que el hospital para híbridos en donde trabajaba una buena amiga de Jin se encontraba relativamente cerca, Adora era muy buena en su trabajo además de que era la única persona en la que confiaba para realizarse sus exámenes físicos correctamente así que definitivamente ir allí era la mejor opción sin embargo no sabía como transportar a JiMin de forma segura pues aún no le habían comprado una cajita especial ni nada parecido.
