𝟹. 𝙱𝚒𝚎𝚗𝚟𝚎𝚗𝚒𝚍𝚊𝚜

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El termino de la semana fue bastante rápido para el gusto del nervioso y tímido Taehyung.

Que pronto, se vio rodeado de lo que era su casa repleta de gente que no era de estado, si no, decoradores, artesanos, escultores, músicos, banquetistas, y más personal para arreglar y ordenar las cosas en su sitio.

El primer día de la llegada de las chicas ya estaba todo más que perfecto, iba en viento en popa. Dispuesto a dar una gran impresión a sus invitadas desde la oterncía blanquecina hasta el mas noble de los criados; todos deseaban con mucho esmeró, encontrar a la candidata perfecta a Reyna.
Las habitaciones de cada una, se hallaban en la torre contraría a donde vivían y dormían el Rey, la princesa y el principe, junto con Laird Sean. Ahí estarían cómodas y con su absoluta privacidad. la estancia donde dormirían, era en lo alto de la torre, subiendo las escaleras de caracol, hasta una amplia y amigable habitación principal para tomar el té. En esa bonita estancia, se colocaban armoniosamente cinco habitaciones de puertas similares en color y forma, que serían cada una de las alcobas de la señoritas que se aproximaba a llegar. Taehyung pediría un permiso especial para ir a visitarlas cuando quiera ir a invitarlas a pasear, esperando en el rosado recibidor de té y estanterías con juegos de mesa, libros e hilos para devanar y coser a su antojo.

Ese día, solo dos de las cinco chicas llegarían, las demás, por lo lejos donde provenían, llegarían en los próximos tres días consecuentes para al Palacio.

Por la mañana, Taehyung y su primo Sean se encontraban en la habitación del Rey conversando y vistiéndose para la conmemoración.
Ambos tenían unas hombreras enormes doradas sobre los hombros, con delgados hilos finos y enrollados que se movían cuando ellos alzaban los brazos. Taehyung vestía de blanco, con parches e insignias colocados en su pecho izquierdo con presunción. Mientras que Sean estaba de rojo junto con la bandana sobre su hombro derecho.

—¿Te han hablado de ellas?

—Si, mi madre. Hace unos días me ha dado la biografía de cada una de las chicas.

Dijo recordando el día que entro a su despacho con el libro grande encuadernado que cargaba. No era un libro, era toda la información recopilada de las señoritas que se aproximaban a llegar.

Sean alzo las cejas sugerente.

—En serio. Y, ¿Hay alguna que ya te interese con solo escuchar la información de tu madre?

—Para ser honesto —Un leve sonrojo se asomó por sus delicadas y acarameladas mejillas —Ninguna de ellas es muy distinta a la otra. Todas tejen, leen, saben bailar y conocen varios idiomas. Además de provenir de familias aristócratas de los otros dos reynos. Dos son del sur y tres del de en medio. Así que... Solo fue información general, con eso no puedo decidir si alguna me llama la atención.

—Vale, pero al menos debes tener una idea de que tipo de mujer que gustaría tener, ¿No? —por la cara que hizo su primo, Sean definió que no.

Soltó un suspiro que termino en una risa, luego fue a la mesita de la sala de oro de Taehyung, a tomar un poco de su vino de las Almendradas, que tanto gustaba. Sabía que Taehyung era inexperto en el tema de mujeres-conquista-mujeres-apareo. Pero no creyera que hasta el punto de ni siquiera saber que le atraía.

—Pues... Bueno —dijo después de un instante. Y una cara familiar le pareció en la mente —me gustan las mujeres amables y...

Se detuvo. Bochornoso de seguir. Sean alzo una ceja confuso y le pidió que siguiera con lo que diría.

—Bueno. Tambien me gustan... Pequeñas

—¿Pequeñas? —para Sean era extraño, ¿Acaso las mujeres no eran pequeñas? ¿De que hablaba su primo? —¿Te refieres a más jovenes o...?

Three Kingdoms Of Korea 2- Kim TaehyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora