cuatro

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Las habitaciones de los vampiros solían ser obscuras, esto debido a que estos seres eran sensibles a la luz solar, no morían por ello como algunos humanos creían, pero si podía llegar a causarles heridas graves en caso de demasiada exposición.

La habitación de Somin no era la excepción, sin embargo, esta también tenía zonas donde la luz podía entrar con normalidad, justo en una de esas zonas, específicamente en un pequeño sillón para leer fue donde Jungkook encontró a su padre sentado.

-- Papá... 

-- ¡Jungkookie! ¡Que sorpresa verte por aquí! --soltó el humano en cuanto divisó a su hijo acercársele-- Hace días que no te veía.

-- Papá, nos vimos anoche en la cena, no seas dramático --se burló el menor sentándose en el sillón frente a su progenitor-- Necesito un consejo tuyo.

-- Claro como no está el increíble Conde aquí hoy, vienes con tu segunda opción.

-- Tu nunca era mi segunda opción appa, no digas tonterías --gruñó el vampiro logrando que el contrario riera, su padre amaba molestarlo casi tanto como lo amaba a él-- Además, según se, tú eres un experto en este tema.

-- ¿Rap? --inquirió el mayor recibiendo una negación de su hijo-- Soy un experto en muchas cosas Kook, tendrás que ser más específico.

Jungkook rió-- Quiero saber que sentiste cuando tú y mamá hicieron click.

El mayor se levantó de golpe del sillón, tirando el libro que tenía sobre el regazo en el camino.

-- ¡Mi pequeño vampiro hizo click! ¡No puedo creerlo! ¡Tu madre va a enloquecer cuando lo sepa!

 -- Papá...

-- ¿Cómo fue? ¿Cuándo fue? --inquirió el hombre eufórico- ¿Con quién fue? Dime que no fue con esa lobita tan molesta, no me cae muy bien si te soy sincero, aunque si hiciste click con ella, te prometo que voy a aprender a amarla, es decir, tu abuelo tampoco me quería a mí al principio y...

-- ¡PAPÁ! ¡Basta! ¡No es Jieun!

Mark se dejó caer contra el sillón suspirando-- ¡Gracias a Drácula! No podría convivir con ella como nuera, entonces, ¿de quién se trata?

-- Ni siquiera estoy seguro si lo que sentí fue el click papá, no te emociones aún --pidió el pálido observándolo nervioso-- La primera vez que lo sentí, fue su olor el que me atrajo, pero no fue hasta la segunda vez que nuestras miradas se encontraron, fue como si en ese momento todo se hubiera paralizado, el tiempo no existía, y solo estábamos ambos observándonos, es una sensación que no puedo describirte, pero me dió seguridad y calidez, y me sentí completo, como si toda mi vida me hubiera faltado algo sin saberlo...

-- Kook...

-- Estuve con él hace un rato papá, y es precioso, tiene unos enormes ojos expresivos y el rostro más bonito que haya visto, y su voz appa, es profunda, pero a la vez tan suave, podría escucharla durante toda mi existencia...

-- ¡Jeon Jungkook!

-- ¿Qué?

-- Justo eso que describes, esa sensación de plenitud, el sentimiento de haber estado perdido y finalmente haber encontrado tu hogar, eso mi pequeño Jungkookie, eso es el click --finalizó Mark sonriendo, ver a su pequeño hijo conociendo al que podría ser el amor de su vida, lo hacía inmensamente feliz-- ¿De qué especie es?

-- Ese es el problema... él es un humano.

Mark palideció al escuchar a su hijo, si bien los humanos eran mucho mejor aceptados en el mundo de los monstruos después de su matrimonio con la hija del Conde, aún había ciertos prejuicios contra los que debían luchar como este, por ejemplo, donde el único descendiente directo de Drácula, había hecho el tan deseado click con nadie más ni nadie menos que un humano, pero no cualquier humano, sino que uno hombre.

Hotel Transilvania | KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora