once

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Wonwoo acompaño a Taehyung hasta uno de los salas comunes con las que contaba el hotel, el humano había insistido en que quería conocer tantas zonas del lugar como pudiera, por lo que por recomendación del vampiro, termino decidiéndose por recorrer una de las zonas más concurridas, misma que contaba con múltiples recreativos, áreas para karaoke, videojuegos, mesas de billar, futbolito y ping pong, entre muchas otras cosas. 

Este lugar como muchos dentro del hotel, se veían bastante pequeño desde fuera, pero una vez que estabas dentro de ellos parecían triplicar su tamaño, siendo muy consciente del sitio donde estaba, no le parecía para nada extraño que todo esto fuera posible gracias a los brujos.

Para Kim, quien provenía de un pequeño pueblo de Daegu, donde lo más interesante que podía encontrar era la propia granja de su familia, llegar a un sitio como el hotel transilvania, que contaba con todo tipo de áreas inimaginables era una completa locura, y él planeaba disfrutarlo mientras pudiera.

El humano recorrió el área con pasos tranquilos, asombrándose de ver a todo tipo de monstruos convivir con humanos por todos lados, él era un claro defensor de los derechos de los seres sobrenaturales, siguiendo de cerca las noticias e historias de como Transilvania estaba siendo un parteaguas para la integración de estos mismos dentro de la sociedad, pero una cosa era escuchar o leer de esto, y otra mucho más distinta era verlo con sus propios ojos, él sin duda quería ser parte del cambio.

Taehyung decidió acercarse a una de las mesas de billar que se encontraban vacías, siempre le había llamado la atención el juego, sin embargo, en donde vivía no contaban con ningún lugar donde pudiera hacerlo, por lo que en cuanto lo vió, supo que esa sería su primera parada en la sala. Le hubiera encantado que su primera vez en el juego fuera al lado del vampiro, pero él entendía que Jungkook tenía obligaciones que cumplir y no era su intención interferir.

Kim se acercó al área donde se encontraban las bolas y los tacos, porque si bien era su primera vez jugando, si había visto videos y leído acerca de ello por lo que tenía una idea básica de como funcionaba. 

Tomó el material correspondiente para depositarlo sobre la superficie verde, recargando el taco elegido antes de dirigirse al otro extremo de la mesa donde insertó las bolas dentro del triángulo de plástico que ayudaba a lograr el acomodo, una vez estuvo medianamente satisfecho con ello, regresó a tomar su taco para comenzar a jugar, pero este no se encontraba en el sobre la mesa donde lo había dejado, el castaño frunció el ceño confundido, juraría que si había tomado uno.

Aún sin explicarse a donde había ido el objeto de madera, volvió a acercarse a la zona donde se encontraban en exhibición los tacos disponibles, tomando uno distinto al anterior, cuando giró el rostro de vuelta a su mesa, todas sus bolas se encontraban dispersas sobre esta, como si alguien hubiera partido por él. 

El humano comenzó a preguntarse si quizás el billar funcionaba de manera distinta para los monstruos, porque de otra manera no se explicaba que demonios estaba sucediendo. Repitió el proceso de acomodar las bolas lisas y rayadas dentro del triángulo de plástico, intentando romper la formación rápido para que no le sucediera lo mismo. 

Continuó con su juego de manera normal, intentando que la teoría de los tiros que había leído se hiciera realidad, sin embargo, las interrupciones continuaban, no importaba que tan bien parecía haber realizado el tiro, las bolas simplemente no lograban entrar en los hoyos, algunas hacían movimientos muy extraños saliendo hacia ángulos completamente diferentes a los que el humano intentaba dirigirlas, mientras que otras, parecían ser frenadas por una fuerza invisible, deteniéndose de golpe y sin explicación alguna. 

-- Joder --masculló Taehyung frunciendo el ceño, la situación estaba comenzando a molestarle, por más que intentaba que al menos una de las bolas entrara en los hoyos, era incapaz de lograrlo-- No puedo creer que de verdad apeste tanto en esto...

Hotel Transilvania | KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora