🥀Solo Sexo🥀 #3

♡ Capítulo 35 ⚠

Salgo de el baño depues de una larga ducha entre maldiciones a el viejo ese que se supone que soy yo.

Jamás creí que liderar conmigo fuera tan fastidioso y abrumador, y pensar que mis hermanos lidena con eso todo el tiempo, intentare no ser tan, no ser tan yo.

Leé bien idota, intentare no estoy confirmando nada.

Salí del baño solo con una toalla envuelta por la cintura y con otra en mi mano secando mi cabello.

Noto como TN esta acostada boca a abajo con solo su toalla envuelta al rededor de su cuerpo.

Dejó caer mis dos toalla a el suelo, me acerco a ella y quito su toalla al igual que la mía dejando su hermoso cuerpo desnudo frente ami, me tomo unos segundos para apreciarlo completamente de pies a cabeza cada parte de el, cada parate que amo y que para mis ojos es totalmente perfecto, totalmente deseable, su cuerpo es como una maldita dogra para mí.

Me subo sobre ella sentandome en sus piernas sin dejar todo mi peso en estas, mi polla semierecta chica exactamente con su trasero, la imagen es demasiado excitante.

Pase mi mano por su espalda acariciandola hasta llegar a su trasero donde lo golpeé levemente haciéndola sobre saltar.

Comencé a pasar mi pene por su trasero, me incliné al frente hasta que mis labios chocarán son su oreja, tomé entre mis dientes el lóbulo estirandolo un poco mientras comenzaba a simular embestidas.

Abrí su trasero y comencé a adentrarme en ella poco a poco llevándome jadeos en el proceso sintiendo sus paredes apretar mi polla y ala perfección, lo caliente y mojado que es estar dentro de ella.

Simplemente nunca me cansaré de follarla.

Aferre mis manos a su caderas provocando un quejido de su parte mientras yo comenzaba a embestir con fuerza mié tras gruñia y jadeaba viendo como mi polla salía una y otra vez de su coño dejándome llevar por la magnífica sensación de estar dentro de ella.

Veía como si cuerpo se movía al ritmo de mis embestidas, nuestros cuerpos ocasioanvan un ruido bastante placentero al llegar mi penetración, mi pelvis chocano con su rojo trasero gracias a los azotes que doy y como lo estrujo.

Cuando estoy por llegar y quiero escuchar sus gloriosos gemidos mientras ambos nos corremos, me doy cuenta que estos nunca estuvieron ahí, ella nunca gimió ni Jadeó y mucho menos se movió.

Pare mis embestidas rápido sin importarme mi órgasmo, me acerque agitado a ella para poder verla, tenía los ojos cerrado, peor que o parecía estar dormida, parecía estar simplemente hida en sus propios pensamientos.

_Amor?

_Hmm_ Se limitó a decir.

Suspiré aliviado al saber qu estaba bien.

_Tu no, ¿No quieres Follar?_ Solté viéndola con detenimiento.

Ella solo negó con la cabeza lentamente.